¿QUIEN ERES?

•Capitulo 41•

Se levantó del colchón confuso, su compañero de trabajo que estaba a su lado le ayudo.

— ¿Estás bien?— le preguntó.

— Supongo ¿En dónde estoy? ¿Quien eres tu? — volteo a ver al joven confundido, nunca lo había visto en su vida— ¿Que me pasó?.

— ¿De que hablas Daniel? primero me hablas con mucha confianza y me pides ayuda en cosas y ahora dices que no me reconoces, de repente estabas trabajando y te desmayaste, llevas más de 1 hora así, llamamos a un doctor pero nos dijo que no era grabe, que probablemente era que estabas agotado.

Volteo a todos lados, puso a trabajar su mente para no asustar a su compañero y levantar sospechas de el mismo ¿Le había dicho Danny? No sabía que pensar, las otras veces se trataba de que I.M siempre lo metía en esas situaciones, dónde estaba en un lugar bajo una situación difícil para manejar el mismo pero ahora ¿Había sido Daniel quien lo controlo está vez? Era extraño porque no estaba en un hospital recuperandose después de haber intentado matarse o en un momento dónde precisamente se este llevando a cabo esto. A lo que pudo ver y analizar por su uniforme y por lo que le había dicho el otro chico, estaba trabajando, pero ¿Cómo?.

Esto estaba demasiado raro, a lo que sabía de Danny no era alguien que quisiera salir adelante, esa no era la meta ni para el ni la meta que tenía planeada para Changkyun y I.M; de trabajar ni pensarlo. Pero entonces, será que Danny ya pensó más las cosas y ahora quiera ayudar a Changkyun a salir,    era más fácil dar su nombre y datos de Changkyun, vamos, esto no es una competencia de quién gana a quedarse con el cuerpo, pero para ellos es como si así fuera, cada uno lucha por lograr sus objetivos y obviamente el objetivo más grande es existir no solo en la mente de Changkyun si no para todo el mundo, cada uno quería ser reconocido de cierta forma o simplemente decidir por si mismos.

Changkyun fingió una broma a su compañero, hizo como si se hubiera recuperado y en seguida se puso a trabajar pero su compañero no lo dejo.

—Vete a casa mejor a descansar— le dijo el chico mientras también recogía sus cosas.

—No, en seguida me pondré otra vez a trabajar, ya cause un muy grande problema.

— Vamos, necesitas recuperarte, aún estás aprueba, ya es de noche y estábamos por terminar lo que nos tocaba del día de hoy, vete y mañana regresas.

Changkyun al final termino cediendo, tomo sus cosas y estaba apunto de irse

—Recuerda que mañana lo primero que tienes que hacer llegando es ir a reparar la cerradura del departamento del señor Chae— le dijo por detrás su compañero.

Changkyun volteo a pedirle que le repitiera porque no había escuchado bien—El señor ¿Quien?.

—El señor Chae, el del departamento 5**.

Changkyun fruncio el ceño, había muchos señores con el apellido Chae en Corea, no tenía porque imaginarse o suponer cosas que no, simplemente no.

—Esta bien, en cuanto llegue yo voy.

Al final termino de preparar sus cosas y se fue del edificio, ahora el problema era a dónde iría no sabía cómo estaba afuera, pero por supuesto no podía dejar que lo reconocieran, así que se puso su gorra y su cubrebocas para evita dejar muy expuesto su rostro. Siguió caminando pero era imposible saber ahora en dónde se hospedaba.

Regreso al edificio un poco más tarde, ya en el momento que la mayoría del personal se había ido, solo quedaban los que hacían guardia o los de recepción y cuidandose de que lo vieran busco la manera de buscar un lugar en dónde dormir. Fue a la bodega  en dónde guardan la mayoría de utensilios de limpieza y tomo una frazada que por suerte estaba ahí, la extendio y se acomodo encima de ella.
Eso estaba resultando muy incómodo pero no había otro lugar, se puso a pensar en la situación que estaba, se supone que tenía que estar feliz de estar lejos de la cárcel, pero en realidad resultaba siendo una situación de incomodidad; el estaba muy seguro que de forma legal no había salido y eso era lo malo aquí, el tener que esconderse y ser aún más cuidadoso en lo que hacía era más agotador.
Por fin cerro sus ojos y se puso a dormir, mañana tendría que levantarse más temprano para no dejar que lo vieran y ahora sí se quedara sin un lugar en dónde descansar.