Había pasado una semana desde lo ocurrido con Wonho, la misma semana la cual no se sentía con la valentía para bajar y verlo a los ojos, menos con Changkyun ahí en la empresa. Se había decidido, que estuviera la personalidad que estuviera en el cuerpo dejaría que entrara a la empresa y dejaría que trabajara como si nada pasara, solicito con Kihyun que fuera así y aúnque fue difícil Kihyun accedió, se había acostumbrado ya a el cambio de personalidad tan de repente, ya sabía diferenciarlos a la perfección y a su vez también manejarlos, aunque Dany no era muy común verlo.
De hecho solo lo había visto esa vez, cada que se acercaba a uno de los ventanales que daban vista hacia el edificio de enfrente el cual fue el lugar donde lo vio por primera vez recordó todo, el miedo que sintió y las expresiones de Dany, con una disforia elevada, un chico que parece tranquilo pero tiene mucho que decir y que expresar aunque le es casi imposible, de las tres personalidades es a quien Hyungwon compadece más porque al menos I.M y Changkyun han tenido mucho derecho de decir lo que sienten, pero para Dany la cosa no es así.
Changkyun tocó a la oficina para avisarle que bajaría por un café, Hyungwon solo le sonrió y asintio con la cabeza aceptando, el menor se encamino hacia el elevador y cuando esté se abrió dejo a la vista a una muy elegante Seunghee, con su gran porte que la caracteriza, Changkyun hizo una reverencia y paso al elevador quedando a un lado de ella.
— ¿No saldrá a ver al señor?.
— No, al que vengo a buscar es a ti, tomemos un café — Seunghee no volteo a verlo solo miraba derecho hacia la oficina con una expresión de irritación — Katya, le dices al señor Chae que Changkyun tardará, que está conmigo.
El elevador se cerró y ambos bajaron, Changkyun estaba con los nervios de punta, sentía incómoda la situación y a juzgar por la cara de la mujer sabía que nada bueno saldría de ese café.
Salieron hacia el auto de la mujer.— Pensé que lo tomaríamos en la misma empresa.
— Ja! No quiero que Hyungwon nos interrumpa, tranquilo no te haré nada aúnque tenga las ganas de matarte por arruinar mi vida, solo súbete al auto.
Seunghee se subió y el menor se subió de lado del copiloto.
Mientras se encaminaban hacia el sitio el cual Changkyun desconocía, no decían nada, Seunghee solo se dedicó a manejar y cuando paraban por los altos solo tomaba su celular, era como si el menor no estuviera ahí, Changkyun no sabía que estaba pasando, lógicamente el creía que Seunghee ya sabía lo de el y Hyungwon, el problema era que no sabía cómo.Llegaron a una cafetería común, nada fuera de lo normal, bajaron y Seunghee caminaba siempre al frente de Changkyun imponiendo que ella era la importante ahí.
Pidieron sus bebidas, aunque ese momento fue más bochornoso porque el chico que atendía la caja trato de coquetear con Seunghee pero ella no le correspondió, su semblante era muy serio durante todo ese rato. Terminaron de pedir y en seguida se fueron a sentar.
— Se que te sorprende el que yo tomará un poco de tu tiempo pero es que debemos dejar en claro ya todo esto.
— No entiendo a qué se refiere — Changkyun jugaba con sus manos por debajo de la mesa haciendo notar su nerviosismo.
— No nos hagamos los idiotas niño, tu y Hyungwon me han estado jugando sucio — Saco un sobre de su bolso y lo sostuvo en su mano— A decir verdad me da un poco de asco el saber que me engaña contigo, nunca creí que Hyungwon cayera tan bajo.
Changkyun se empezó a molestar ¿A qué se refería con eso? Era claro que lo estaba insultando.
— Escuché señora...
— Déjame terminar — Estiró el sobre blanco hasta el menor — Yo fui primero en la vida de Hyungwon y aunque el no me ame de la mera que yo lo amo, antes de que llegarás éramos felices, vivíamos en paz, es por eso que vengo a hablar esto contigo, en este sobre hay el dinero suficiente para vivir más que cómodamente durante cinco o más años, si te vas y nos dejas es todo tuyo más mi auto que está estacionado allá afuera.
Esa fue la gota que derramó el vaso, estaba humillandolo de la peor manera y en público aunque la gente no supiera bien lo que estaba pasando.
— Yo nunca le he hecho nada como para que me trate de esta manera, yo también amo a Hyungwon, no sabría decirle si más que usted pero lo amo y esto que me está pidiendo no lo puedo hacer — Changkyun no podia ser sumiso y dejar que lo tratara asi, no porque quisiera hacer algo contra Seunghee, si no porque quería dejar en claro que el no se dejaría de nadie y menos siendo de esa manera.
En ese momento llegó un mesero con sus bebidas y las dejo sobre la mesa lo más rápido que pudo, todo mundo los veía susurrando entre ellos.
—Vamos Changkyun, no te hagas el orgulloso, acepta el maldito dinero, tu dignidad callo desde el momento que enredaste a mi esposo con tal de tener más comodidad, eres como cualquier puta barata.
— ¡No voy a permitir que me hable asi! — Changkyun se levantó de su asiento y golpeo con una mano la mesa, Seunghee ya había ido demasiado lejos.
— A mi no me levantas la voz maldito! — Seunghee también se levantó — Si crees que te dejare el camino libre estás muy equivocado, voy a hacer que te alejes de Hyungwon por las buenas o por las malas.
Seunghee tomo su bebida fría y sin pensarlo más la tiro sobre el menor, ensuciando su ropa y haciendolo menos frente a todas las personas que se encontraban en esa cafetería. Changkyun no pudo hacer nada, no la golpearía y tampoco la insultaria, después de todo ella era la esposa y sabía que lo merecía por haberse metido con Hyungwon.
— Que te quede bien claro que aquí solo eres como una puta en la vida de Hyungwon — dijo con voz baja en el oído del menor — aún así tenga que matarte con tal de que nos dejes en paz, lo haré.
Seunghee se fue del lugar dejando solo a Changkyun en esa mesa, apenado volteo a ver a su alrededor deseando que muchas personas no hubieran presenciado lo de hace unos momentos, pero para su desgracia había mucha gente y algunos hasta habían grabado lo sucedido, solo pudo salir corriendo, llorar como el cobarde que siempre ha sido. Estaba enojado con todo pero más con el mismo por no haber sido capas de tan siquiera defenderse. Gracias a el cielo en ese instante iba saliendo Minhyuk de un restaurante que quedaba a un lado, tardo en reconocerlo pero al final lo hizo.
— !Por dios!, Changkyun ¿Que te paso? — dijo Minhyuk y fue rápidamente hacia el para ayudarlo dejando en el piso la comida que llevaba en una bolsa de plástico.
El menor abrazo a Minhyuk sin importar y Minhyuk correspondio sin dudarlo, era lógico que algo malo le había pasado al amigo de su novio. Lo abrazo y ambos tomaron un taxi, de todas formas Minhyuk iba ir hacia Jooheon así que era una casualidad buena.
Llegaron a la casa de Jooheon donde el solo esperaba a su novio, grande fue la sorpresa cuando al abrir la puerta también estaba Changkyun sucio y mojado.
— ¿Que paso? — abrió sus ojos como platos y Minhyuk solo le dijo que se callara, pasaron y sentaron al menor en uno de los sofas, se soltó en llanto.
Lo único que quería era que nada de esto pasara, se sentía idiota y poca cosa porque creía que Seunghee tenía razón, Hyungwon nunca lo iba a presentar en sociedad como su pareja y mucho menos hacer una vida entera con el; aúnque Hyungwon le dijera que lo amaba, las cosas no cambiarían.
Después de un rato Changkyun comenzó a explicar lo que había sucedido, durante el tiempo que estaba ahí decidió apagar su celular, sabía que Hyungwon lo llamaría y lo que quería evitar eran más problemas. Pero poco duro el no saber nada de el porque Hyungwon llegó al departamento de Jooheon, Changkyun le dio la cara y en cuanto abrió la puerta Hyungwon lo beso desesperado.
— ¿Que haces aquí Hyungwon?, Vete porfavor.
— Te he llamado y no respondiste ¿Que paso? ¿Que te dijo Seunghee? — El delgado abrazo a su Chang.
Pero el menor no dijo nada y alejo al delgado de su cuerpo de una manera en la cual dejo saber todo su enojo y rechazo.
— Basta, todo queda aquí ya no quiero estar contigo.
ESTÁS LEYENDO
¿QUIEN ERES?
Fanfic❌FINALIZADO❌ Hyungwon es un hombre de prestigio CEO de una empresa herencia de su familia. Un día contrata al chico que le cambiará la vida por completo enfrentándose a cosas que nunca imaginó.