CAPÍTULO 25

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Había despertado con la claridad de la ventana dandome en los ojos, mire a mi alrededor y recordé que me encontraba en la casa de Hanks, con la luz del día se veía más acogedora que de noche. Hanks parecia no estar en casa y mire la hora en mi celular y llegaba tarde otra vez al trabajo. Tenía que irme a casa, rápidamente me vestí y fui en búsqueda del baño para lavarme la cara, al hacerlo no tenía tiempo para esperar a Hanks o quien sabe si el estaba en el trabajo. Yo rápidamente cogí mi bolso y cosas y salí de ahí.

Tenía que ir a casa para arreglarme y sabía que mi madre me iba a matar si se daba cuenta que no había amanecido en casa. Entre a casa cuidadosamente pero me tope con el torso de mi madre cruzada de brazos.

-¿Donde estuviste? - se veía sería y eso me intimidaba.

-Yo, bueno... Estuve con Daniela en el hospital. -dije rápidamente.

Ella me analizó y su cara seria de fue tornando un poca más apenada.

-Pobre, nunca imagine que ocurriría estas desgracias.- dijo tocando su frente con frustración yo baje la cabeza, ellapauso un momento y siguió hablando.

-Tienes que hacer que firmen el contrato los padres de Oliver. -finalmente terminó por decir.

Había recordado lo de la firma y claramente como podía olvidarlo, pero con tantas cosas se me había pasado un poco.

Yo asentí a mi madre y rápidamente para que no continuará subí las escaleras. Me había ido a duchar y ponerme algo de ropa, esta vez había elegido unos pantalones y una camisa roja. Con mis tacones fui a por mi coche y me dirigí hacia Dabam.

Estaba ya en la oficina haciendo mi trabajo y tocaron mi puerta.

-Adelante...

Abrieron la puerta y era Oliver, se veía un poco desanimado y sin ganas tenía tiempo sin verlo así, al ver su ceja aún un poco herida por la pelea con Hanks un recuerdo fugaz de él paso por mi cabeza.

-Quería verte menos mal has venido, así te pasaba el contrato para que tus padres lo firmen pasaré a por ellos en la noche...- dije al verlo frente a mi, al rato después se sentó en silencio en la silla y me miró con una curiosidad.

-¿Que pasó ayer? - preguntó un poco frío.

Yo confundida no entendía que trataba de decirme. Acaso sabía algo.

-¿Que tratas de decir? - le pregunté, me dio una sonrisa y negó leve con su cabeza.

-Ayer estuviste con Hanks ¿no?- preguntó pero en realidad era afirmando más que otra cosa.

Yo me quedé en silencio por un momento y pensé en lo que diría. -Da igual si estuve o no con él, eso no te incumbe.

-¡Que no me incumbe! -dijo furioso. -Acaso eres idiota, como quieres que piensen que somos prometidos si estás todo el rato con el yonki de Hanks.

Yo me exalte y me alce rápidamente de mí asiento ofendida. -Cuida tus palabras Oliver.

Él rio por lo bajo más todavía también alzándose. -¿Tanto te importa para defenderlo así?

-Si. - me atreví a decir, sus ojos se tornaron un poco cristalizados y su puño izquierdo lo apretaba con fuerza.

-No sabes donde te metes, ese chico era un drogadicto y no sé qué haces con una persona así. - comentó ya más serio. -¿Acaso te ha dicho algo sobre eso?

Cada vez lo entendía menos y menos podía confiar en las palabras tontas de Oliver.

-Es un drogadicto ¿Porque crees que es así y llego drepente aqui? Todo es gracias a su padre, él no pinta nada en esto.

-¡Callate! - conteste inmediatamente.

Tal vez me daba miedo de que su rumor fuera cierto. No sé porque algo me decía que tal vez era eso lo que me ocultaba.

-Si no me crees ve y pregúntaselo a él.- me dijo cogiendo el contrato y ya más relajado.

-¿Quién te dijo eso? - me atreví a preguntarle, mirando sus ojos avellana.

-Una fuente confiable. Y estoy seguro que sigue metido en eso. - dijo sin más ya sin hacerme mucho caso se largo de mi despacho.

Yo estaba confundida, algunas cosas me cuadraban y si tal vez no conocía a Hanks tanto como yo creía.

¿Y si en realidad él y yo no teníamos nada en común como yo pensaba?

Me quede paralizada aún frente mi escritorio. Rato después mi curiosidad aumentó y no pude aguantarme las ganas de ir al despacho de Hanks a hablar de esto.

Camine.

Camine.

Hasta llegar a su puerta nerviosa ¿estaría bien entrometerme? ¿No sería raro preguntarle por algo tan íntimo como esa situación o si Oliver solo quería asustarme?

De ser así ¿Yo quisiera seguir con esta rara relación con Hanks?

Abrí la puerta.

La rabia me subió fácilmente y no entendía como podía ser tan ingenua. Hanks nunca me decía nada, siempre me ha ocultado todo y todo lo que se de él ha sido porque yo lo he ido descubriendo. Al verlos me dio una sensación amarga y nada mejor que preguntarlo frente esa persona.

INEXPLICABLE   DESTINO ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora