[24 - 25] Panteón-Mitología / Multimouse.

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—Los gatos y ratones han vivido en guerra durante siglos —empezó a relatar Marinette, frente al grupo de padres y alumnos que la observaban— Se han vuelto las referencias de discusiones comunes entre hermanos, o los protagonistas de fábulas para niños pequeños.

Tom Dupain, con su grande cuerpo se acercaba lo más que podía al escenario grabando de cerca el momento de su hija, incluso tapaba la vista de otros padres que esperaban el turno de sus hijos.

Cuando Marinette llegó emocionada a su casa, pidiendo la ayuda de sus padres y la aparición de su mejor amigo, ellos no dudaron en formar parte de ese evento.

Aún les parecía curiosa esa actividad, pues lejos de ser el proyecto final de su clase, daba pauta a que los niños explotaran su imaginación, y bueno, al decidir Marinette que no quería trabajar en equipo con ninguno de sus compañeros, ideó todo un plan para que su obra teatral fuera la más original.

—Sin embargo, no siempre fue así —dijo Marinette, antes de aplaudir y que las luces se apagaran.

La pequeña tomó la linterna que tenía frente a sus pies y alumbró a su rostro tan directamente que tuvo que voltear la vista haciendo reír al público.

Talló sus ojos con sus manos, aclaró su garganta y continuó con el relato.

—Era en mil cuatrocientos dos, en el tenebroso panteón del mágico pueblo de Miraculous cuando se dio a conocer esta historia.

Las luces volvieron a encenderse en un tono bajo para mejorar el ambiente. Las lápidas de cartón estaban puestas en todo el pequeño escenario junto a papel verde hecho trizas simulando el pasto.

Marinette se puso lo más rápido que pudo su máscara gris con rosado, con la cuál ya se podía identificar fácilmente el papel que ella interpretaría. Tomó asiento en el suelo y se puso a jugar con el pasto.

Esperó y esperó.

Miró a su madre, quien entendió que algo no andaba bien. Buscó con la vista al pequeño rubio que estaba tan concentrado viendo maravillado a Marinette con ese traje, que olvidó por completo que ya le tocaba entrar en el acto.

—Adrien —susurró Sabine, llamando su atención— Ya es hora.

—¡Oh, claro!

Se acomodó mejor, subió las escaleras y cuál gato caminó hasta quedar a un lado de su compañera.

—Que bella noche —saludó la niña, observando a su amigo— ¿No lo crees, Chat Noir?

Mutimouse y Chat Noir habían sido amigos desde hace mucho tiempo. Ambos se conocieron en una noche de tormenta justo en ese panteón temeroso, eran compañeros leales que se defendían de los demás a capa y espada, sabían que podían confiarse la vida entera.

—Bah, una noche más en este solitario panteón —respondió él, sin ánimos— ¡Nadie viene de noche! Yo quiero espantar a algunas personas, multimouse.

—¿Cuál es el chiste en espantarlos? —preguntó curiosa, caminando de un lado a otro— Si puedo saber, claro.

—¡Pues todo! —carcajeó él, como si fuera lo más obvio— Usualmente los humanos son tan pero tan tontos que le tienen más miedo a algo invisible que a algo real. Aunque los jóvenes son los que vienen en las noches más para retarse, suelen salir más asustados de ver a un gato negro que de ver a un fantasma.

La azabache soltó una vaga risa y se acomodó a su lado.

—No creo que sea por eso que aún estás aquí —aseguró— ¿Por qué no te vas, Chat Noir? ¡Puedes ser libre! ¡Hay un mundo que recorrer! Paseo durante todo el día escuchando las típicas peleas de pareja, observando a los niños en su primer día de escuela y a los hombres ser despedidos de su trabajo, y a la noche vuelvo al panteón sabiendo que aquí estarás. ¿Por qué?

The scary little kids [MLB] MAYO MARICHAT.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora