SETHXHORUS: Entre el desierto y el cielo.

Capítulo 15: Presión.

SETH.

Me encaminé directamente hacia el trabajo de Isis y me paré en su puerta a esperar, sabía que no sería para ella, la más grata sorpresa verme allí pero aún así, está vez necesitaba su ayuda. Necesitaba que ayudara a su hijo de igual manera.

Apreté la mandíbula conforme veía a los trabajadores salir del edificio y sentía como mi interior se revolvía cada vez un poco más conforme pasaban los minutos. Cuando finalmente salió, rodeada por un par de compañeras de trabajo, me acerqué a ella en silencio, mientras notaba la sorpresa dibujarse en su rostro.

–Seth ¿Qué haces aquí? ¿Acaso te envió Osiris?

Sonreí con algo de sorna –No me envió Osiris, pero estoy aquí por causa suya ¿sabes?

Vi cómo su expresión se volvía algo complicada –Sabes que no puedo intervenir en lo que pasa entre ustedes, todo eso... está completamente fuera de mi alcance.

–Pero si puedes intervenir entre lo que pasa con Horus ¿No es así? Es tu hijo después de todo.

La mujer frente a mi bajó los ojos y asintió con algo de tristeza –Vamos a por un café ¿Quieres?

–Estoy aquí por causa de Horus– repetí.

Frente a mí, la aludida miró su café y asintió –Supongo que ya lo descubriste.

–¿Qué cosa?

–Que Horus... por ti...

Ella habló con algo de vergüenza, sin embargo, la interrumpí al instante – Estoy enamorado de Horus, Isis.

Se quedó perpleja mirándome con los ojos muy abiertos –¿Qué?

Ni siquiera me di un tiempo para contestar eso y agregué –Y el que lo esté es el origen de todo lo que está pasando. Osiris lo sabe.

Asintió y se quedó pensativa –Supongo que no estaba tan lejos de la verdad después de todo, pensé que lo que había descubierto era que Horus se había enamorado de ti. Pensé que era lo mejor que se alejara si sólo se iba a hacer daño amándote cuando tú no le correspondías, pero no me esperaba esto.

–No puedo proteger a Horus sólo por mi cuenta Isis. Necesito de tu ayuda.

Isis se quedó unos minutos en silencio y finalmente soltó un largo suspiro — He visto muchas veces la forma en que te mira Horus, él mismo parecía no notarlo, luego me di cuenta de que no era la única persona que se había dado cuenta, Osiris también lo estaba observando, pero nunca pensé que tú le corresponderías ¿desde cuando..?

La miré unos segundos antes de decirme si podría responder sin sonrojarme al instante, luego me di cuenta de que no se estaba resistiendo a nosotros, no se iba a oponer. Decidí ser sincero — Desde que lo conocí, prácticamente desde la primera vez que lo vi, intenté resistirme ¿Sabes? Intenté hacer las cosas bien, no interferiría en la vida de Osiris y me marcharía en silencio una vez que terminara la universidad y tuviera la herencia de mis padres en mis manos, pero...

Isis se veía un poco compasiva, se inclinó levemente sobre la mesa y me palmeó el hombro — El amor es más fuerte ¿no? Espero que también lo sea para Osiris.

—Creo que la razón de que Horus se haya marchado es que lo amenazó con decirle a mi familia a ver si por la presión de mis tíos terminan pidiendo que me deshereden formalmente. No es que no sea capaz de ir yo mismo a decírselo en su cara, ya no tengo miedo Isis. Muchas cosas han cambiado. Estar con Horus cambió mucho en mí. Pero necesito a su vez algo de presión desde tu parte, algo de cohersión que obligue a Osiris a pensar las cosas dos veces antes de ir por allí amenazándonos con quebrar nuestra relación.