SETHXHORUS: Entre el desierto y el cielo.

Capítulo 29: Familia

—Seth. 

Está bien. No iba a mentir. 

Sí estaba algo ansioso por esa visita a mis tíos. 

Estaba bastante ansioso, esa la verdad. El desastre se olía por todos lados. Ni siquiera la expresión tranquila de Osiris ni la aceptación de Isis me tranquilizaba un poco. Mi hermano quería terminar con todo el problema de una vez.

A mí casi me parecía prudente escapar un poco más. 

Pero no me quedó alternativa que ir con ellos y mi novio a ver nuevamente a mi familia. Horus me miraba de hito en hito e incluso sonreía un poco ante mi evidente expresión de incomodidad —Si aún quieres tirar la bomba puedo hacerlo contigo— me susurró en el oído y solté una carcajada.  

—Eres... tan tú— le dije en voz baja. 

—Te encanta, sólo asúmelo. 

Lo miré con diversión y le apreté la mano — Puede ser. 

—¿Qué dijiste?— me cuchicheó al oído retador. 

—Que te amo. 

 Se sulfuró un poco y miró por la ventana pero estaba evidentemente sonriendo yo también estaba sonriendo abiertamente. Desde que lo conocí no podía evitarlo. Me tenía el día completo sonriendo como un tonto. 

Al contrario de yo y mi impertinencia, mi hermano, había llamado a la casa de mis tíos para avisarles de nuestra visita. Así que esta vez, nos estaban esperando en la puerta con toda clase de expresiones, iban desde la ira hasta la sonrisa que le dio Serket a Horus en cuanto lo vio. Mi novio se la devolvió como si fueran alguna clase de buenos amigos, rodé los ojos. 

Osiris tomó la mano de Isis y se paró frente a ellos con la hostilidad escrita en todas partes de su cara y les dijo —Ha sido un tiempo... tíos — casi escupió la última palabra y agregó —Les presento a mi futura esposa, Isis. Este es su hijo Horus, aunque eso ya lo saben, supongo. 

Ni siquiera tengo que decir que todo el mundo parecía estar teniendo una crisis nerviosa.  Y que no podía precisar en ese minuto quién estaba más sorprendido, acaso no era yo, al darme cuenta de que Isis si llevaba un anillo. Horus me dio una mirada llena de asombro y le dijo en voz muy baja: 

—Felicidades a ambos. 

Sin embargo, mi hermano había cometido un error, no tenían idea de la relación entre mi novio y su novia. Me acerqué a Osiris y le dije al oído —No, eso no lo sabían. 

—¿Qué? — vi como cambiaba de colores, había lanzado algo más que una bomba atómica en los primeros cinco minutos de esa visita. Se volteó alarmado para mirar la reacción de mis tíos, pero ya era muy tarde. 

Sothis estaba lívida e incluso Serket que no la callaba nadie se había quedado muy quieta. Fue mi tío el que habló y ya definitivamente no parecía que se había fumado un porro, porque estaba bastante tenso —¿Acaso escuché correctamente? ¿Este chico insolente es... el hijo de tu prometida, Osiris? 

—Chico insolente, me llamó chico insolente ¿Lo escuchaste mamá? — masculló Horus y rodó los ojos. Apreté los labios, no me quería reír, pero maldita sea, dentro de todo lo que podía estar pensando ¿En serio se quedó con eso? 

Isis le apretó el brazo con algo más que un poco de fuerza y vi como Horus torcía el gesto mientras se quejaba en voz baja.  Se me escapó una sonrisa, totalmente inapropiada pero no pude evitarlo, bajé la cabeza para ocultarlo mientras Isis les hablaba en voz dura —Escuchaste correctamente ¿Tienes algún problema con eso? Porque lo que pasa en mi casa respecto a relaciones de pareja es problema de nosotros y la verdad es que no me agrada para nada cuando llaman a mi hijo chico insolente, incluso aunque estoy bastante segura de que puede serlo, créeme sé  lo que crié.