El sol brillaba con tanta intensidad a como lo hacía la sonrisa de Jimin.
Caminaba lento y con un valanceo delicado; estaba alegre.Recorrió a lo largo de la puesta hasta llegar al centro del Páramo, allí pudo encontrar a Flai, iba a ser su arma secreta para esta noche.
Necesitaría ropa decente, un peine y un delicioso aroma en su piel.
—¿Para qué quieres todo eso? —le preguntó, Flai totalmente desconcertado.
Ambos caminaban entre árboles y plantas para llegar al santuario de las hadas Flu.—Será una celebración, todos irán bien vestidos y yo estoy completamente sucio —explicó el rubio
—Vamos, Jimin, si alguien te viera, le prestaría más atención a todo de tí menos tu ropa
Jimin aceptó el cumplido, pero insistió en que quería lucir bien aquella noche.
No fue fácil, pasados diez minutos después de saludar a las hadas Flu, comenzaron a sacar telas y cada una de las hadas aportaba alguno de sus mejores accesorios.
—El rojo no le combina, sus ojos son azules y su cabello rubio, le quedará mejor esto —Una hada puso en las piernas de Jimin un lindo conjunto blanco
—Es demasiado básico —exclamó otra de ellas.
El rubio sólo las escuchaba y extendía las telas para ver el modelo del conjunto.—Es hermoso —Le dijo Jimin, el hada sonrojada agradeció.
De pronto, aprecio Flai apartando a todas para llegar a Jimin.
—Estuve buscando algo por horas y por fin lo hallé —dijo Flai —, debes verlo, te encantará y es lo que buscasDetrás de su espalda, fue descubriendo un traje bien doblado y se lo entregó a Jimin.
Él lo tomó con tanta delicadeza y extendió la hermosa tela de seda.Era un color café muy tenue; con unas mangas en caída con forma de clavel, los hombros se conectaban en el cuello; como un collar, dejando a la vista de hombro a hombro sus clavículas.
El torso estaba ceñido como un corsé, dándole silueta de una cintura bien detallada.
Acompañada por sus caderas que estaban envueltas en un pantalón recto color azul pastel.—Luces aún más bello —dijo Flai totalmente embobado.
—Como un príncipe —acompletó una hada.
Jimin se veía en el espejo de las hadas y realmente era un bonito conjunto; decente y extravagante.
—Flai —llamó Jimin —no puedo usarlo —dijo, empezando a quitar los botones
—Es demasiado, tú deberías estar usándolo, no yo, será mejor que utilice el conjunto rojo...—Basta, Jimin —se acercó rápidamente, Flai
—Luces tan bien, qué no te das cuenta —el hado nuevamente lo abotono
—Y para mí es un honor que nuestro invitado use lo mejor, e incluso acepta estas prendas como un regalo—Flai, no, es demasiado —insistió Jimin —lo usaré, pero te lo devolveré e incluso lo lavaré.
—De ninguna manera, es el regalo que nuestro Jimin se merece —las demás hadas estuvieron de acuerdo, apoyando a Flai y convenciendo a Jimin hasta que aceptara las prendas.
Por lo cual, causó un pequeño retraso en su hora, pues ya había oscurecido por completo y él iba corriendo por los campos del gran laberinto de las hadas Flu.
“Es el protector del Páramo, pregunta por Jimin”
fue el incentivo que le hizo salir corriendo.En la entrada principal de las hadas Flu, se encontraba la silueta más grande que había visto, aunque la luz era tenue y la noche estaba en su punto, sabía que era él.
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MALÉFICO: DUEÑO DEL MAL |KOOKMIN| 1960
FanfictionTras un terrible acontecimiento, el joven hado-brujo transforma su corazón en un hueco hondo que sólo podía ser llenado por odio y maldad convirtiéndose en un hombre frío, autoritario y déspota, buscando venganza y cobrarla en un inocente bebé. Prof...