XXXV

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—¡Bradek! —exclamó sorprendido, acercándose a él para darle un abrazo, siendo correspondido.

—Moses, creí que no volvería verte, y que bueno ver qué estás bien, dentro de todo.

—Sí, estoy bien. A veces es muy aburrido estar aquí encerrado, pero me permitieron tener un cuaderno y lápiz, así que escribo mucho.

—Ojalá pronto puedan pasarte a la sección de presos comunes. Sería más fácil conseguirte una pena menor, o al menos una salida condicional.

—Sí, pero aún siguen investigando. Dejando eso de lado ¿Ya nacieron los bebés? ¿Cómo está tu hijo?

—Muy bien, ambos ya se encuentran en buen estado de salud. La semana próxima, si todo sigue bien como hasta ahora, a Giassy le dan el alta —sonrió, entregándole un sobre—. Te traje algunas fotos, para que puedas conocerlos.

—¿Giassy se llama la niña? No creí que tú te verías tan emocionado por la hija de Noaelí —sonrió divertido.

—No, Noaelí se fue —le dijo serio—. Él renunció a la niña, yo soy el padre de ella.

—¿Qué? ¿Hablas en serio?

—Por supuesto, en la partida de nacimiento de ambos, están el nombre de Kira y mío como padres de los bebés.

—Pero... ¿Noaelí estuvo de acuerdo con eso?

—Se fue de la isla, imposible saberlo.

—¿Y si vuelve? Tú sabes muy bien porqué Lashel le dió esa misión a Araza, él está enamorado de ella, y sé que ella de él también... Tú serás el único que salga perdiendo, Bradek. La hija es de él, no tuya, y elegirá a su padre, no a ti.

—Sí, yo lo sé —pronunció bajo—. Pero amo a esa bebé ya. He estado con Araza desde que despertó, y con Giassy desde que nació. Yo le cambié su primer pañal, le di su primer biberón. Ella se calma con mi voz, con mi aroma, y sé que no soy su padre biológico, pero es mi hija.

—No, es hija de Noaelí, ten eso en mente todo el tiempo —le dijo serio—. Tú sabes muy bien como es Araza, y lo que siente. Cuando ese tipo regrese aquí, no va a elegirte a ti, no le va a importar todo lo que tú hiciste por ella y los niños, ella se irá con él. Siempre fue una mujer egoísta, y un tanto fría. Y más contigo, Bradek... No quiero ser cruel, pero sabes que es así.

—¿Y qué me quieres decir con eso? ¿Qué me aleje de ella? ¿De mis hijos? ¿Qué la dejé sola? No puedo hacer eso.

—HIJO, tienes sólo UN HIJO, Bradek. Aunque te duela, esa bebé tiene un padre, que lamentablemente, es el hombre que Araza ama.

Bradek miró hacia abajo, sintiendo que sus ojos se cristalizaban, apretando los puños. Moses lo miró con pesar, y apoyó una de sus manos en el hombro de él.

—Lamentablemente, Araza salió igual a Lashel, no le importa más nadie que ella. Y tal vez, ahora te permite estar junto a ella porque se encuentra sola con dos bebés. Pero ambos sabemos cómo es, cuando esté fuerte y segura de si misma, te dará una patada, te echará de su casa, y buscará a Noaelí.

—Sí —susurró.

—Lo siento, lamento decirte esto de forma tan brusca y romper tus ilusiones.

Bradek negó con la cabeza, aún mirando hacia abajo.

—No, gracias por abrirme los ojos.

***

—Deja todo así, mamá, por favor. Es más, ve a tu casa ¿Si? Bradek y yo haremos las cosas, ve —le dijo con fastidio.

No le gustaba que su mamá estuviera metida en todos lados, diciéndole que debía hacer y que no. Y sí, sabía que era mamá primeriza ¡Pero quería un tiempo a solas! Sentía su casa invadida.

Fue hasta su habitación, llevando un plato con la cena para Bradek, y encontró al rubio acostado en la cama, con su hijo durmiendo sobre su pecho, y una de sus grandes manos en la espalda del bebé.

—¿Me demoré mucho preparando la cena?

—No, no, sólo descansaba un poco los ojos —le dijo sin abrirlos.

—Te traje la cena, mi mamá me puso tan histérica, que quemé un poco el filete. Pero ya lo probé, y no está tan mal.

—De seguro sabe bien.

Araza se sentó en la cama y tomó al bebé, para que Bradek pudiera cenar.

—Le dejé la cáscara a la papa para el puré, creo que así te gustaba ¿No?

La miró, y sonrió levemente, sin decir nada. No, a Moses le gustaba así, pero no diría nada.

—Estuve pensando, y hablándolo con mi mamá, y creo que sería bueno que me acercara, o al menos, intentara contactarme con Noaelí.

—Tú sabrás que es mejor —pronunció bajo, sin apetito realmente.

—Creo que al menos merece saber que Giassy nació, y que ya está fuera de peligro. Tal vez, si él cambió de opinión, podría conocerla. Pronto le darán el alta.

El rubio asintió con la cabeza y Araza se giró para verlo, confundida al no recibir respuesta.

—¿No estás de acuerdo?

—No es algo que me corresponde decidir a mí.

—No, obviamente no, pero sé que tienes un gran vínculo con mi hija.

Mi hija... Ahora Giassy sólo era su hija.

—Bradek ¿A dónde vas? Ni siquiera-

—Terminaré de cenar en la cocina, y ayudaré a tu mamá a acomodar la casa, antes de llevarla a la suya. Ya es muy tarde para que se regrese sola —le dijo saliendo de la habitación.

Fue hasta la cocina, y encontró a Ura'Elie lavando los platos, acomodando las cosas ya secas.

—No se preocupe, ahora lo hago yo.

—¿Mi hija te mandó a decirme que me vaya?

—No ¿Por qué lo dice?

—No sé que le pasa a Araza, hoy realmente está muy malhumorada. Se enojó conmigo porque le dije que le estaba poniendo mucha sal al puré.

—Sí, ella tiene un temperamento bastante difícil.

—Creo que el verdadero motivo de su rabia, fue cuando le dije que no se acercara a la familia de Kumi. Ella insiste en buscar a Noaelí, y yo le dije que si a él le importara Giassy, ya se hubiese contactado con ella.

—Ella lo ama —pronunció bajo.

—No sé si lo ama o no, sólo que es un error lo que quiere hacer. Acercarse a él una vez más, buscarlo, sólo traerá más problemas.

...

Princesa de Eritma Donde viven las historias. Descúbrelo ahora