"Tres misteriosos hombres aman y son sus esclavos pero solo uno de ellos la tiene a ella como esclava también"
Antes de leer:
A partir de este capítulo les propongo un reto. Como vimos anteriormente Marcel (Padre de Ana) esta como prisionero en la mansión de los Macondo y no sabemos el por qué. El argumenta que Deborah fue su cómplice en todas sus maldades (Como por ejemplo, lo que le hizo a Clara, recuerden que el mato a los padres de Clara). TODO ESTO PASO EN EL CAPITULO ANTERIOR, hagan memoria pues si no, no entenderán el de hoy.
Al final del capítulo Marcel revela a Clara que Deborah era su cómplice y pues de seguro lo ayudo a matar a los padres de Clara, Deborah para salir de la situación golpeo a Clara en la cabeza y la desmayo.
¿Qué pasara hoy?
Bueno el reto es el siguiente:
¿Recuerdan que en las notas de autor del cap anterior dije que Marcel tenía otra identidad y que tampoco es quien creemos?
Pues el reto no es más que descubrir, ¿Cuál es la otra identidad de Marcel? Esta identidad también se relaciona con los Macondo y hoy aparecerá.
Hoy veremos a tres personajes nuevos. ¿Podrán descubrir cuál de ellos es Marcel?
OJO-Por algún motivo (Que es secreto) Marcel finge delante de los Macondo, aparte de Deborah y Clara ser otra persona.
Buajajajajaja. Ahora si...
¡Acción!
...
Narra Deborah:
La oscuridad rodeaba todo el lugar, mis ojos no dejaban su rostro pálido e inconsciente, sus ojos estaban tan cerrados que parecía que nunca despertaría, su cabello rubio se dejaba caer en largos rizos sobre sus hombros.
Retorcidamente hablando, la quería.
Era la hija que Vanessa no era.
Y por supuesto mi querer se basaba en dos cosas:
Que fuera extremadamente loca y malvada y...
Que fuera útil en el negocio.
Ella lo era.
Lentamente fue abriendo sus ojos y una mirada de confusión los lleno en cuanto noto la situación.
-De-Deborah... ¿Por qué estoy atada? ¿Y Daniel?-Su voz se escuchaba entrecortada y desprendía un aura llena de miedo y confusión.
No era la Clara psicópata.
Por primera vez me alegre de que su personalidad idiota, de mujer ejemplar existiera.
Hacía unos minutos estaba ante la Clara asesina, la Clara que quería asesinar a Marcel pero el jodio todo como siempre, la hizo atar sus conclusiones y darse cuenta o creer que sabe mi participación en el asesinato de sus padres.Como es normal en el trastorno que sufre Clara no tiene recuerdos sobre lo que hizo o dejo de hacer con sus otras personalidades. Eso era bueno pero igual me preocupaba:
Cuando la otra despertara, recordaría todo y querría asesinarme por lo que Marcel le hizo a sus padres.
¿Era hora de desasearme de Clara?
Ya se había vuelto un problema pero no podía darme el lujo de perder otra pieza contra Ana.
-Estabas muy violenta... tuve que atarte.-Mentí fingiendo preocupación mientras la desataba.
-Tengo un gran dolor de cabeza y siento como se hubiera pasado algo, ese vacío que siento cuando hago algo con mis otras personalidades, o descubierto algo.-Dijo pasando su mano por su rostro.
-No te esfuerces. Ven, Daniel no está, ven a dormir.-La tome por la mano y la lleve a la habitación.
Ella se durmió rápidamente y la probabilidad lleno mi mente:
¿Y si cuando despierta esta la otra Clara?
Se veía tan inocente durmiendo, sería tan fácil asesinarla.
Podría asfixiarla, darle par de cuchilladas, dispararle...
-Mamá.-La irritante voz de Vanessa me desconcentro.
-¿Qué?-Pregunte sin darme vuelta para verla.
-El delegado Caleb está aquí, te espera.-Respondió y se fue sin más.
Deje a Clara no sin antes asegurarme de que estuviera realmente dormida y de cerrar con llave la habitación por si las dudas.
Baje las escaleras con ánimo de encontrarme con Caleb, el me ayudaría con Ana.
-¡Deborah!-Grito al verme fingiendo alegría pues frente a él estaba Marco.
-Caleb, Caleb.-Dije mientras le abrazaba.
-Necesito tu ayuda con un trabajo.-Pedí descaradamente luego de todo lo que había pasado.
-Deborah, sabes que haría todo por ti pero hemos tenido ciertos "problemitas" y lo sabes.-Dijo y sabía a lo que se refería.
Eso era lo bueno de él. Haría lo que fuese por mí. Ya había asesinado por mí, había sido mi cómplice, era mi fiel esclavo.
Su piel era blanca y su cabello y ojos de color grisáceo. Era realmente guapo y todo un demonio.
-Solo en ti puedo confiar, podemos tener diferencias pero somos amigos de años, hemos hecho demasiadas cosas juntos. Eso nos une.
-Señora...-Nos interrumpió el puto mayordomo.
Lo observe con una mirada fría pero sus ojos tranquilos chocaron con los míos.
Malcom.
De una piel tan blanca casi pálida, un cabello gris y ojos dulces pero engañosos.
Parecía el simple y común mayordomo pero no lo era. Mi compañero, me ciervo. Podía tratar de escapar cuanto quisiera pero siempre volvería a mí.
Le dedique una sonrisa perversa y tome las copas de champán que traía para mí y para Caleb.
-Te ayudare, Deborah. ¿Cuántos hombres necesitas?-Termino por decir Caleb antes de que le ofreciera la copa.
-Los que puedas darme, todos fuertes para que carguen los materiales para la fiesta, dispuestos y valientes para armar ese festín.-Dije en código el me sonrió demostrando que me había entendido.
Le ofrecí la copa y bebí de la mía.
-Toma un trago y brindemos.-Ofrecí sonriente.
El soltó una ronca carcajada.
Se me acerco y me dijo al oído:
-Se bien lo que le hechas a tus invitados en sus copas.
-¿Miedo?-Pregunte sonriendo ampliamente.
-El miedo existe en todos, solo que a algunos los domina a mí no. A mí el miedo me tiene miedo.-Respondió sonriente.
Se alejo un poco y extendí mi mano, el la agarro y la beso o esa fue la escena que actuamos. En realidad en mi mano tenía una foto de Ana y el al tomar y besar mi mano tomo la foto.
-Hoy mismo tendrás a esa chica que quieres destruir muerta.-Susurro.
Luego de eso se alejo hasta salir por la puerta y perderse de mi vista. Observe a Marco y parecía un maldito maniquí, miraba fijamente hacia la nada como el jodido loco que era.
Unas manos se posesionaron sobre mis hombros. Un toque suave y algo amenazante al mismo tiempo.
Era él.
-Mayen.-Pronuncie y en mi voz se noto algo de molestia mezclada de diversión.
-Amor...-Pronuncio lentamente.
Lo observe y disimule una sonrisa a mi esposo.
El era mi obra maestra, más de dos años casados, era aún más fiel que Caleb y Malcom.
Completamente manipulable, gran amante.
Los tres eran mis esclavos:
Caleb. Malcom. Mayen.
Los tres eran fichas en mi juego con las cuales Ana no contaba, tres idiotas con poder que harían todo lo quisiera.
Un delegado corrupto que se vendía por solo unas monedas.
Un mayordomo que siempre me amo.
Y un esposo dispuesto a todo.
Solo que había uno, solo uno, que NUNCA dejaría ir. El era mi mayor obsesión, el me había convertido en quien era, delante de mi familia era una persona pero en verdad era un secuestrado, me pertenecía, en verdad uno de ellos era Marcel.Si, ese hombre que tenía aprisionado y que no dejaba ser libre para todos era normal pero en realidad era mío aunque fuera contra su voluntad.
¿Cuál de ellos era Marcel?
Narra Ana:
Caminaba por la calle con la capucha puesta, en mi mano las compras para la casa de Cristian.
La calle se veía oscura por la noche.
De un momento a otro sentí algo extraño, una sensación rara. Al observar hacia atrás un auto me seguía.
El auto era negro y al verlo no podía evitar recordar el auto de Deborah, el auto en el que Ana Adams murió o mejor dicho fue asesinada.
Comencé a correr pero fue inútil un hombre vestido completamente de negro y de una altura casi sobrenatural apareció frente a mí.
Entre su altura y oscuridad parecía el mismísimo slender man.
El me sostuvo y aunque trate de soltarme dos más se bajaron del auto y me arrastraron hacia allí.
Mierda. No, no, no, no.
Desperté y sabía muy bien que algo no estaba bien.
Había sido secuestrada.
Pero...
No estaba atada. No estaba en un rincón oscuro ni encapuchada.
Y lo peor era quien estaba frente a mí.
Con una sonrisa que no pude definir si era malvada o gentil, sus ojos sobre mi.
Daniel.Buenas tardes mis queridas y queridos. Agradecer a los nuevos lectores Wii y anunció que abra cambio de portada está estará SUPER.
Hoy no les voy a dejar spoilers porque mañana abra actualización.
Para los que quieren cumplir con el reto:
¿Quién creen que es Marcel?#Caleb😎👮
#Mayen
🤵🏋️
#Malcom🗞️🍷
Se les quiere un montón.
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Nuevo Amanecer[COMPLETA]✔️
AçãoUn juego comienza cuando las reglas son dictadas. En este simplemente: No hay REGLAS. El juego de la venganza admite trampas, maldades, traiciones, no hay límites sí de vengarse se trata. No importa si inocentes resultan heridos, si hijos resultan h...