Wash over - CARMUEL

DIECIOCHO

CARLA P.O.V

Tenía que asistir a una fiesta que hacía empresa de padre de Samuel, no soportaba tanta gente en el mismo lugar. Tuve que enfrentar a Christian de nuevo, hace semanas que hemos perdido contacto y todo porque me enamore de Samuel.

Samuel estaba hablando con varias personas con las que trabajaba, creo que les estaba explicando algo sobre el nuevo proyecto, no deje de mirarlo, estaba orgullosa de él.

- ¿Qué tal, cuñada?

Di vuelta y vi a Christian, sonriéndose.

-Hola – dije

- ¿Qué tal?

-Muy bien, la verdad.

-Lo sabía, ya que no respondes a mis llamadas.

-Christian, el hecho que no estaba respondiendo a tus llamadas es por algo.

Él cruza los brazos, tenía miedo de que Samuel lo descubre todo.

-Me enamoré de Samuel.

- ¿Y mi hermanito sabe lo de nuestro?

-Ni se te ocurra decírselo, no tienes ningún derecho a meterte entre él y yo.

-Por dios, lo que tú tienes con él empezó con una mentira.

-Yo lo amo.

-Igual que yo a ti, ¿no?

-Christian, por favor... no compliques más las cosas.

Christian se acerca a mí, sonreía de manera más malvada, no iba a permitir que destruye todo.

-No pienso dejar que seas feliz con él, tu misma dijiste que querías estar conmigo, que me querías y todo.

-Igual sentía algo por ti, pero lo que siento por Samuel es real y amor puro.

Me daba miedo ver ese comportamiento de Christian, le desconocía.

-No te vas a salir con la tuya, Carla – decía, amenazándome

¿Acaso sería capaz de decirle algo a Samuel?

SAMUEL P.O.V

Toda la noche estaba lejos de Carla y quería tenerla más cerca, la vi hablando con Christian y supongo que no fue una conversación agradable, siempre es así con él.

Luego me acerque a ella al notarla muy pálida y mal.

- ¿Estás bien? – cuestione preocupado

-No.

- ¿Qué te pasa?

-Vayamos a casa, no soporto estar aquí.

-Le prometí a mi padre que vamos a ir a su casa para cenar con ellos.

-Por favor, podemos hacerlo otra noche.

Me parecía demasiado intranquila, pero decidí seguirle el caso, me despedí de todos y nos fuimos a casa.

- ¿Estás mejor? – pregunté al entrar en casa

-Mucho mejor.

No sé qué le pasaba, pero algo sucedía.

Siento sobre el sofá tratando a entender que sucede, pero igual solamente está enferma.

Carla quita su chaqueta y al dar vuelta me sonríe.

- ¿Qué? – dije sin entenderla

Ella quita su vestido y me mira con una mirada fugaz.

¿Acaso no decía que no se sentía bien?

-Por fin estamos solos – susurra

Sube sobre mis rodillas y empieza besarme en labios.

-Espera... dijiste que no estabas bien.

-Pero tú me haces sentir bien, ya olvidé de lo que me pasaba.

Sonreí al sentir sus labios sobre mi cuello.

- ¿Segura que estás bien?

-Ahora que estoy contigo mejor que nunca - susurra en mi oído

No tenía tiempo de preguntarle nada más porque me deje llevar por sus besos y caricias, terminamos haciendo el amor, aunque aún sabía que algo le pasaba.