48.

2K 101 19
                                    

Capítulo 48.

Nuestros días en las costas italianas han llegado a su fin. Fueron días maravillosos que atesorare con todo mi corazón.
Visitamos restaurantes de ensueños y lugares turísticos increíbles como la Basílica Notre-Dame de la Garde, reservas naturales, museos y playas. Durante nuestro viaje de regreso a Mullingar no he dejado de agradecerle por el increíble regalo de cumpleaños.
Niall sonríe besándome en los labios tantas veces como puede antes de descender del transfer que nos deja a las afueras de su edificio.
Es imposible que mis ojos se aparten de él mientras avanzamos con nuestro equipaje. Los días soleados han bronceado su piel y su cabello castaño se ve con algunos reflejos rubios que lo hacen ver increíblemente guapo, divino y hermoso.
Sí, estoy completamente enamorada de él y todo me parece perfecto.

-¿Estás triste? —Me pregunta.

-Un poco, pero eso significa una cosa —Respondo mientras entramos en el ascensor. Él me observa a la espera de que continúe —Y es que fue increíble, maravilloso y especial.

Su sonrisa se ensancha mientras me apoyo en su hombro. Cierro los ojos brevemente, estoy muy cansada.

-Me alegra mucho, Anna. Una semana pasó muy rápido, pero aún nos queda otra semana para seguir disfrutando —Comenta —¿Que te gustaría hacer?

-Uhmm, por hoy... solo acurrucarme a tu lado y ver televisión. También podemos tocarnos como dos adolescentes y llegar hasta la tercera y cuarta base, si quieres.

Niall se ríe.

-No podría rechazar una oferta tan tentadora —Acercándose me besa en los labios —Pero antes, debemos comer. Lo que dan el avión es bueno, pero prefiero preparar algo yo mismo.

-¿Vas a cocinar?

-Por supuesto, no soy un experto pero hasta ahora no he muerto por mis propias preparaciones.

No puedo evitar sonreír.

-Recuerdo la primera vez que cociné, lo hice para ti —Digo —Me sentía muy nerviosa, Alana me había dado cada indicación pero aún así, temía que algo saliera mal o lo que es peor llevarte a la muerte por una preparación mal hecha.

Niall suelta una carcajada.

-Pero no fue así, me encantó lo que hiciste —Dice acariciándome el mentón —Vamos, preciosa.

Con pereza salimos al pasillo y luego ingresamos en el apartamento de él. Lo primero que hago es quitarme los zapatos y caminar hasta el sofá. Se siente bien estar aquí, se siente como en casa. Mi cuerpo está agotado por las horas de viaje y no dudo en cerrar mis ojos.

-Te quedarás dormida allí —Me advierte y asiento —¿Quieres beber algo?

-Solo a ti —Le pido y él se ríe.

-Anna, beber no comer —Se burla y sonrío.

-A ti, por favor.

-No te duermas —Me pide, pero ya estoy bostezando y acurrucándome en el sofá —¿Anna?

-Uhmmm —Balbuceo.

Él vuelve hablar, pero mi mente está demasiado lejos, lo único que siento es la manta que deja sobre mi cuerpo y luego me duermo.

[...]

Cuando despierto, siento que han pasado horas. Todo el lugar está lleno de un aroma agradable, puedo distinguir inmediatamente el olor de la pasta y la carne. Sonrío pensando en Niall, lentamente me quito la manta y camino a pies descalzos hasta la cocina, donde él está terminando de preparar una linda mesa para dos.
Cuando sus ojos se encuentran con los míos, sonríe.

𝐓𝐀𝐋 𝐕𝐄𝐙 𝐌𝐀Ñ𝐀𝐍𝐀 - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇 🥀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora