Mi lugar feliz

24.2K 2.9K 1.9K
                                    

[Capítulo 42]

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

[Capítulo 42]

Abby

El sol salió y el sueño me encontró, pero me negaba a ponerle fin a aquel momento tan especial con Andrea.

Era inefable la forma en la que me hacía sentir a pesar de la situación entre nosotros, increíble que incluso sin ser nada más que amigos, lo fuéramos todo. Respirar se volvió más fácil y la carga en mis hombros dejó de ser tan pesada. Era como si de alguna manera yo absorbiera su fuerza y él suprimiera lo que me aquejaba.

Le confesé todo lo que Barbie había pasado gracias a su padre y fue sorprendente cómo incluso en la calma, Andrea demostró su furia. Y no solo por lo que aquel malnacido le hizo a su propia hija sino también por lo que sufrió él en el secuestro. Y en ese momento sentí en el fondo de mi alma que mi francés padeció más de lo que contó.

Vi en sus ojos el dolor y el tormento de aquellos recuerdos que no se atrevía a vocalizar y, temí saberlos porque intuía que eso me llevaría a la locura.

—Sospeché que Bárbara podía saber algo de lo que su padre estaba metido, pero no pensé en que ella también era víctima de ese hijo de puta.

La manera tan tranquila en la que dijo eso me hizo sentir miedo, ya que manejaba en su voz la calma que precedía a una tormenta. Andrea no era de los que se descontrolaba, de los que perdía los estribos ante situaciones tan delicadas o atroces, al contrario, era cuando más pasivo se mantenía y por increíble que sonara, eso me aterrorizaba más.

—Vamos a atraparlo —le aseguré para sacarlo de sus pensamientos, esos en los que intuí que planeaba su venganza.

—Claro que lo haremos, pero encarcelarlo será solo una fachada ante el mundo —soltó y lo miré sin entender.

—¿De qué me estoy perdiendo? —inquirí.

Nos encontrábamos en una tumbona cada uno y me erguí en mi lugar como una señal de que no me conformaría con una respuesta a medias y Andrea lo entendió.

—He hablado con tus padres anoche, Abigail. Aiden, Dylan y otros Grigoris estuvieron presentes, pensé en incluirte, pero no estabas —aclaró antes de que sintiera que me habían dejado fuera—. Harán todo para atrapar a George por la vía legal, pero ya en la cárcel será mi turno de hacer pagar a esa mierda a mi manera, y luego de que me cansé con él, me dedicaré a cazar a Philippe para cobrarle su traición —confesó.

Y, aunque eso era algo que ya esperaba, el tono con el que me lo recordó me hizo desear jamás estar en el lugar de aquellas ratas y entendí mejor las ganas que tenía Andrea por recuperarse más rápido de lo que los doctores predijeron. La sed de venganza estaba haciendo milagros en él.

Seguimos hablando de los Lupin hasta que ambos nos hartamos de ese tema y luego nos dedicamos a hablar sobre cosas triviales de nosotros. Algo que agradecí, ya que era lo que necesitaba. Olvidarme del caos y seguir confirmando que mi confusión jamás se debió a lo que pensaba sobre él y Michael, sino a lo que en realidad quería con cada uno de ellos.

Abigail (Orgullo Blanco 5) +21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora