HENTAIYAROU

୨⎯ "ʏᴜᴊɪ ᴛᴇʀᴜꜱʜɪᴍᴀ" ⎯୧

"=⌕ [Warnings: Lectora dominante, follando la almohada, degradation/humiliation, mommy kink, masturbation propia, algo de feminizacion, menciones de chastity belt, sobreestimulación, consumo de semen & ligero juego de impacto  ] //﹫

: ̗̀➛ Chastity Belt: es un candado sexual usado en las prácticas CONSENSUADAS en el BDSM

: ̗̀➛ Depósito de dudas sobre el FF ( dinámicas, palabras, situación, etc.)

-ˏˋEn caso de que el contenido de la historia no sea de tu agrado, te pido de manera más amable que te retires de este fanfic y cheques alguno de los otros FF que tengo disponibles. ˊˎ

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ᴠᴏʟᴜᴍᴇ : ▮▮▮▮▮▮▯▯▯▯

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T/N: Sigue follando esa almohada, zorra - exigiste fría -

Mirabas a Terushima con incredulidad desde el asiento que se encontraba en la habitación, este sollozaba arrodillado en la cama, almohada entre sus piernas, follandola desesperadamente.

Terushima: ¡P-por Favor! - grito - ¡T-te necesito!

T/N: Deberias haber pensado en eso cuando decidiste desobedecerme - te burlaste -

Terushima gimió en desesperación, las lágrimas nublaban su visión de tanto llorar, no era para nada su intención desobedecerme, el estaba tan solo en la casa, no pudo evitar que sus pensamientos intrusivos le ganaran al comprobar si de verdad sentía algo si follaba la almohada.

Una cosa llevó a la otra y terminó siendo visto por ti al regresar de una urgente junta, que para su mala suerte, no había terminado bien y con la desobediencia que habías presenciado, no pudiste sentirte más enojada del no tener ni control en casa.

T/N: No eres estupido, sabes el porque de tu castigo - dijiste firme - Y tienes las putas agallas para desobedecer y suplicar por piedad

Terushima: ¡Lo siento! - volvió a gritar - ¡Mo-mommy! ¡Lo siento!

T/N: Oh bebe - dijiste burlonamente - Si no fuera por que no encontre el candado, lo llevarías una semana

Mientras te burlabas, te acomodaste en la silla, dedos yendo hacia tus labios y clitorios humedos, frotandolos lentamente para tentar a tu amado, quien solo soltaba otro sollozo, temblando de lujuria ante tus palabras frias, sabía que en cualquier momento se volvería loco.

Riendo entre tus dientes, observaste como sus ojos se enfocan en cómo te dabas placer a ti misma, cerrando tus ojos hasta tenerlos entrecerrados.

Terushima se estremeció, su garganta se vuelve seca, deseando que lo estuvieras tocando, que el te estuviera tocando, complaciendote mientras lo follabas tonto, inconsientemente se froto mas rapido en la almohada, deseando fervientemente que fueras tu quien lo tocara.

Con un sollozo altamente vergonzoso, derramó su semen en la almohada, disminuyendo la velocidad mientras patéticamente.

T/N: Oh, no, no, no, no, Yuji - arrastraste las palabras - No vas a parar hasta que te diga

Terushima: ¿Q-que...? - pregunto sin aliento -

T/N: No vas a dejar de joderte en esa almohada hasta que yo lo diga - dijiste con fuerza -

Terushima: P-pero mommy- - dijo algo dudoso -

T/N: No me hagas que lo repita, zorra - demandaste - Apresura tu paso, ahora

Con un sollozo obedeció, corriendose varias veces sobre la almohada, sin detenerse nunca para tomar un descanso, podía sentir que su mente se quedaba en blanco, su mente se volvió insensible a todo menos a tu voz y la sensación de la almohada en su pene.

No sabia cuanto tiempo había pasado pero, finalmente cuando escucho tu voz decirle "alto", se detuvo derrumbándose en la cama, temblando por toda la sobreestimulación, recordando tus ordenes anteriores al sentir tu mirada creando un agujero en su cuerpo.

Sus ojos aturdidos se clavaron en la almohada y la agarró con sus manos temblorosas, lentamente y tímido lambio el semen de ella, rostro arugandose al no gustarle el sabor de su propio semen, finalmente cerrando sus ojos acostándose en un lado.

  Un gimoteo salió de su garganta, abriendo sus ojos en grande para voltearte a ver en el momento que sintió el golpe en su trasero.

T/N: Nunca dije que podías descansar - sonreíste malévolamente - Aún no hemos terminado, mi niña malcriada

Terushima sintió su piel ponerse chinita mientras se arrodillaba en la cama nuevamente, mirándote a los ojos aturdido mientras esperaba por tus ordenes,