capítulo 15. (Conocerlo)

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Ya llevo varios días acá, en este reino que ni se cómo se llama, solo sé que su Rey es un idiota; he comido una tipo salsa roja con pan, hasta creo que rebaje un poco, huelo horrible y en las noches me da mucho frio -si me mantengo solo así creo que moriré muy pronto- pero todo este tiempo me ha servido para recordar todo lo que sucedió en el reino del Rey Neronius, quiero regresar a mi mundo, ya no quiero estar en este.

Escucho que abren la puerta, y no es hora de comer aun, me levanto de golpe y veo hacia enfrente, esperando ver a quien abre.

-El rey la solicita- Es el guardia.

-¿Para qué?

-Vamos- Me dice con voz mandona.

-No me ha dic...-No me deja terminar y me sujeta del brazo para llevarme a donde está su "Rey".

Cuando llegamos donde se encuentra, que es en el mismo lugar que la última vez, él está comiendo en una mesa de madera, mis ojos se van hacia donde se encuentra el banquete de fruta y carne - me gruño el estómago y casi se me sale la baba.

Para de comer y me mira de pies a cabeza.

-No te vez muy bie- Me dice embozando una sonrisa.

Dejo de ver la comida y lo veo a él, con un semblante serio.

-Eso a ti no te importa -No quería decir eso, pero se me escapo.

El borra su sonrisa y me mira serio

-Tú no deberías de hablarme así, soy tu Rey.

- Mi "Rey"-Dije en forma burlona -Yo no tengo ningún "Rey"

-Desde que llegaste acá, y fuiste mi prisionera, soy tu Rey.

-Como usted diga mi majestad- digo burlona y le hago una reverencia.

-Basta -Se escucha enojado- Te he mandado a solicitar por algo.

-Dígame-Digo en forma de burla.

-Quiero que me des toda la información que tienes de tu antiguo "Rey"

-No sé nada.

-Claro que lo sabes, eras o eres la mujer del príncipe - dice en forma burlona.

-YO NO SOY LA MUJER DE NADIE -Digo enojada.

-bueno, su "amiga" -Dice en forma burlona.

-No sé nada, ya lo dije.

-¿Me dirás que tu amigo Amice nunca te conto lo que haría para defender el reino de su padre?

-No, no lo hizo

Y si, no lo había hecho, solo había aumentado la vigilancia, bueno eso era lo que yo sabía.

Puso su brazo en la mesa y se sujetó con su mano su cara, pensando.

-Bueno, Valeria. ¿Así te llamas verdad?

-Si

-¿Quieres comer? Te veo cara de hambrienta -Lo dice en forma burlona.

-No, gracias.

-Segura

-Si

-Bueno, ya que termine esta conversación contigo, puedes regresar al calabozo -Dice riendo.

Maldito desgraciado, creo que odio a este hombre.

Se dirige al guardia.

-Llévala. Nos vemos pronto Valeria.

UN AMOR EN SUEÑOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora