Parte II Capítulo IV ¿café?

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- ¡MJ! Espera-gritó Daniela al salir del ascensor en la recepción del edificio donde se encontraba la agencia, corrió hasta quedar junto a la chica de cabello rosa- me gustaría poder hablar contigo, ¿nos tomamos un café?

-Daniela lo mejor es que mantengamos nuestra relación como simples compañeras de trabajo, no necesito saber lo que ha pasado en tu vida, ni la hermosa relación que tienes, ni lo feliz que eres-responde Poché seria- además el hecho de que yo aún no termine mis estudios es debido a que estaba estudiando en España y después de tomar unos talleres en Londres apliqué para NYU y me aceptaron, validaron algunas de mis clases y otras las tengo que estar cursando de forma extemporánea, es por eso que, aunque la mayoría de los estudiantes están de vacaciones, yo estoy llevando estas prácticas además de una clase, la cual logré llevar en línea pero aun así tengo que entre la bitácora del trabajo de prácticas más la clase en línea y sus trabajos diarios mis tardes después de las prácticas están abarrotadas, eso sin contar que aquí tu ex amiga tuvo la grandiosa idea de para practicar sus habilidades con la cámara y los humanos ahora realiza sesiones fotográficas principalmente los fines de semana con lo que acaba frita.

-Y es por todas y cada una de esas cosas que quiero que nos pongamos al día Poché, perdón, MJ quiero saber que ha sido de la vida de la que fue mi mejor amiga y mi primer gran amor.

-Recordar es doloroso Daniela

-Pero es parte de tu vida, no puedes hacer como si nunca hubiera ocurrido.

-Prefiero pensar en que solo fue un sueño, una pesadilla de la que he despertado y nada de eso ha ocurrido, que mi vida es feliz, que soy yo contra el mundo y que tengo una familia a la distancia que me apoya en mis locuras. Y si me disculpas necesito ir a mi casa.

-Está bien, solo te advierto que no me daré por vencida, lograré que tomemos ese café y nos pongamos al día, yo si quiero recuperar a mi mejor amiga, en verdad que me vendría bien tenerte de nueva cuenta en mi vida.

-Adiós Street- sonríe de lado y sale por la puerta principal pasando de lado de Mason, el cual esperaba a Daniela con un girasol en la mano.

- ¿para mí? -se acerca Daniela tomando la flor y depositando un pico en el chico que le había respondido asintiendo con un simple movimiento de cabeza- gracias, es un lindo detalle ¿Qué le pasó a tu ropa? Estoy segura de que así no es como saliste de casa esta mañana.

-Larga historia corta: cuando te mandé mensaje de que había ido por café choque con una chica y ambos terminamos con el latte encima.

-De casualidad ¿esta chica era delgada, bajita, con el cabello rosa e iba acompañada por un chico gordito y con barba?

-Si ¿Cómo es que lo sabes? ¿Acaso me tienes vigilado? –enarca su ceja para sonreír después en señal de que bromeaba, toma del brazo a Daniela y comienzan a caminar rumbo a su apartamento.

-La chica con la que chocaste está haciendo prácticas conmigo, el chico es el fotógrafo de la agencia, pero lo más impactante de todo, la chica es María José, mi Poché.

-Alto ahí, esta conversación no la podemos tener sin una botella de vino de por medio-menciona el chico- esperemos a que lleguemos a casa y me lo cuentas todo, por ahora dime ¿Cómo estuvo el trabajo?

-Bien, pero recuerda que no puedo comentar nada de nada contigo así que tendrás que conformarte con pasear del brazo de tu chica mientras ella te escucha atentamente contarle como estuvo tu día.

-En ese caso el camino a casa va a sentirse sumamente corto-menciona Mason iniciando con el relato de su día que consistió en revisar propuestas para las próximas campañas, reuniones con posibles clientes y una llamada con su padre.

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