Ella

Parte III Capítulo XI Domingo familiar

-No puedo creer que mi hijo te pidió que fueras su otra madre-menciona atónita Daniela ante la confesión que la fotógrafa le hacía. Había terminado la fiesta del pequeño MJ que ahora dormía plácido en los brazos de Poché, mientras que Polar se encontraba en el regazo de la castaña que lo acariciaba con cuidado. Eran cerca de las once de la noche y tanto María José como Daniela se encontraban sentadas hombro con hombro en el sillón de la sala, con la chimenea encendida y la pantalla plana con un aviso que preguntaba si seguían viendo el capítulo- este niño me salió más vivo que nada.

-Él solo quiere verte feliz- responde Majo detallando las facciones de MJ- tiene la forma de tus ojos, tu nariz y tus labios, no entiendo cómo es que no me di cuenta antes de que es tu hijo-voltea a ver a Daniela-ahora entiendo porque lo amé en el primer instante en que lo vi, es parte de ti, me fue inevitable.

-No me veas de esa forma porque se me va olvidar que tienes a mi hijo en brazos y te voy a cobrar ese beso que me regalaste anoche-menciona Daniela armándose de valor para externar su sentir.

-Y con eso cerramos la noche, guíame a la habitación de MJ para dejarlo acostado y poder retirarme a mi casa- menciona Poché poniéndose de pie con cuidado.

-Aburrida, pero está bien, mañana tenemos un día especial para la pequeña familia Evans, incluiremos a cierta fotógrafa a nuestro ritual cumpleañero-menciona Daniela con Polar en brazos y caminando escaleras arriba. Al llegar a la habitación de MJ abre la puerta para encender la luz y se encuentra con los regalos sobre el escritorio, algunos juguetes tirados en la alfombra y la cama hecha un desastre-creo que mejor lo llevas a mi habitación.

-Creo que es buena idea-responde Majo observando el desorden de la habitación del pequeño y siguiendo a Daniela a su habitación la cual se encontraba perfectamente hecha, Majo se queda en el umbral de la puerta observando como Daniela preparaba todo para recibir a su hijo y pasar la noche con él.

-Listo, puedes entrar, colócalo aquí-señala el espacio abierto y una vez Majo lo acuesta el pequeño abre los ojos-calma pequeño estas en la habitación de mami, hoy dormirás conmigo.

- ¿Dónde dormirán mi mami MJ y Polar? –dice entre sueños- no quiero que se vayan.

-Tu tranquilo hijo mío, mañana nos vemos, ten dulces sueños-menciona Majo depositando un beso en la frente del pequeño y arropándolo una vez Daniela lo había dejado en ropa interior y el cumpleañero volvía a cerrar los ojos y la sonrisa que tuvo todo el día continuaba implantada en su rostro.

-Ven, acompáñame a la cocina para revisar que te puedes llevar para mañana en la noche cuando partamos el pastel-Daniela toma de la mano a María José y caminan tomadas de la mano cuesta abajo, al llegar a la cocina se sueltan las manos y Daniela comienza a revisar desechables y dulces que coloca en una bolsa de tela reutilizable, además de un bote de 48 onzas de la nieve favorita de MJ prácticamente lleno y que podría servir de acompañamiento al pastel que María José le había encargado y el cual Valentina y Effi recogerían mientras que los Evans y María José estarían en su cita familiar.

-Daniela ya es suficiente-se acerca Majo a la castaña, la toma de las manos y le quita las bolsas de botanas y chocolates que metía en una nueva bolsa- no necesito más cosas, tengo todo preparado, lo que necesito es irme a mi casa sabiendo que tú te irás a dormir para poder pasar el día juntas y no parecer zombies por no dormir lo suficiente.

-Lo siento, pero todo esto me tiene nerviosa-responde la castaña dejando por la paz las bolsas y caminando junto a María José que llevaba en un brazo a Polar y en el otro la bolsa con los desechables.

- ¿nerviosa? ¿tu? ¿la señora yo puedo con todo? -bromea Majo intentando aligerar el ambiente, sin embargo, Daniela continúa con la misma expresión de miedo y ansiedad- vaya es serio ¿quieres que lo hablemos?