La Hija de William T. Spears

~ Capítulo 13 ~ Esa shinigami, come curry ~

El Palacio de Cristal de Londres era un lugar luminoso, amplio y muy bien cuidado. Definitivamente, los habitantes de dicha ciudad tenían un gusto exquisito para la construcción de sus edificios; o, al menos, así lo consideraba la pequeña Spears, que en ese momento se encontraba junto al Conde y su mayordomo, observando cada mínimo detalle del lugar.

Hablaban tranquilamente cuando notaron que un hombre vestido de manera elegante, se acercaba hacia donde ellos se encontraban; y no era otro que Lord West.

Rápidamente, entabló conversación con Ciel, y no tardó mucho tiempo en incluir a la niña en ella, por lo que tuvieron que decirle que era una prima que vivía en el exterior para que luego no se le ocurriera iniciar falsos rumores que pudieran traer problemas en la reputación de la familia Phantomhive.

-Entre ustedes y yo-comentó con discreción-, unos espías irrumpieron en mi mansión ¡Fue terrible! Una de mis lámparas Galle fue rota junto con un juego de ajedrez que había conseguido en el comercio general... Me da escalofríos pensar que el criminal incluso puede estar aquí. Afortunadamente, los secretos del curry de mi empresa fueron mantenidos a salvo.

______ evitó por todos los medios intercambiar una mirada de complicidad con Sebastian, puesto que si lo hacía, sabía que terminaría soltando una estruendosa carcajada que fácilmente atraería la atención de cada persona que se encontrara en el establecimiento.

El hombre siguió con su perorata durante unos cuantos minutos hasta que por fin decidió retirarse para esperar a que la competencia empezara.

Tras intercambiar unas cuantas palabras con Ciel, su mayordomo se retiró hacia la sala de competidores para comenzar a prepararse y esperar a que el momento llegara.

-No puedo esperar a ver la cara de ese idiota cuando nosotros ganemos-comentó el pequeño Conde, curvando sus labios en una sonrisa burlona.

-¿Te refieres a West?-preguntó la shinigami.

-Sí, él está demasiado seguro de que va a ganar, pero nadie tiene oportunidad contra Sebastian.

-Ciertamente-dijo ella, llevando una mano a su mentón en un gesto pensativo-. Las posibilidades de que un simple humano pueda ganarle a un demonio son casi nulas.

Ambos regresaron cerca del escenario, donde los esperaban Soma y Lau, en cuanto notaron que el presentador ya se encontraba allí. Se quedaron de pie lo suficientemente cerca como para tener un buen panorama de la situación, y aguardaron pacientemente a que el hombre comenzara a hablar.

-Con los participantes de famosas casas de curry de todo Londres, ¡dejemos que este espectáculo de curry comience!-anunció alegremente.

Acto seguido, comenzó a nombrar a los jueces de la competencia. ______ no pudo evitar darse cuenta de la expresión de horror que puso Ciel en cuanto nombraron a uno de ellos y tuvo que hacer un gran esfuerzo por contener su curiosidad y no preguntar acerca de él.

Luego, los concursantes fueron presentados junto con el nombre de la compañía a la que representaban. Entre ellos, los dos niños divisaron al demonio de ojos carmesí y a Agni, el mayordomo de Soma.

Cuando la orden de comenzar fue dada, rápidamente los chefs se pusieron a trabajar en lo suyo. Muy pronto, los espectadores pasaron de parecer tranquilos a tener expresiones de sorpresa surcando sus rostros; esto se debía al hecho de que la mano derecha de Agni parecía tener vida propia gracias a la rapidez y precisión con la que se movía, tomando ingredientes y especias para luego echarlos dentro de su olla, que comenzaba a desprender un aroma delicioso.

No obstante, Sebastian tampoco se quedó atrás, y las personas notaron esto. Los comentarios sobre lo increíble que estaba siendo la compañía Funtom no se hicieron esperar, y ______ puso los ojos en blanco ante esto.

<<Los humanos se asombran con mucha facilidad...>> Pensaba.

Por segunda vez en menos de media hora, tuvo que contener sus ganas de reír, esta vez por la sorpresa de todo el mundo al ver que el mayordomo añadía chocolate a la olla que contenía su curry. Definitivamente, sus reacciones habían sido mucho más exageradas que la de ella cuando le estaba ayudando en la cocina.

Sin embargo, ese no fue el único desconcierto que les brindó el demonio: el segundo se presentó en cuanto comenzó a transformar su curry en algo parecido a un pan relleno.

-Vaya... Se está arriesgando demasiado con eso-murmuró la niña.

-Ella tiene razón-acotó el príncipe, mordiendo su labio inferior con nerviosismo-. Una semana para aprender el arte del curry no es suficiente, no creo que el mayordomo de Ciel pueda ganar con esto.

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El tiempo pasó y el momento de cocinar culminó. El momento que todos los allí presentes estaban esperando, por fin llegó: la evaluación de los jueces.

Los cuatro primeros concursantes fueron descartados por diversos motivos, y el siguiente curry que sería examinado, era el del mayordomo indio. Como era de suponerse, no obtuvo más que grandes elogios por su excelente trabajo.

______ dirigió sus ojos verdes hacia Sebastian, y lo vio sonriendo con confianza y seguridad, sosteniendo su bandeja en la mano izquierda mientras se acercaba a la mesa de los jueces. Arqueó las cejas con diversión; era obvio que ese demonio no podía dejar de presumir toda su perfección frente a los demás, aunque fuera de manera indirecta.

Cuando quitó la tapa de la fuente, las expresiones de estupefacción de los tres hombres no se hicieron esperar.

-¡¿Qué es esa cosa blanca?! ¡¿Qué estás tratando de mostrar?!-exclamó uno de ellos, completamente anonadado.

Sin emitir palabra alguna, el mayordomo tomó aquella masa con unas pinzas y la dejó caer dentro de una olla con aceite hirviendo para freírla. Cuando estuvo lista, la sacó de ahí, dejándola nuevamente en un plato y extendiéndola en dirección a los jueces.

-Este es el curry que nuestra compañía presenta orgullosamente, y tiene un nombre: ésta es la Rosquilla de Curry-anunció, sin perder su brillante sonrisa.

No tuvo que pasar demasiado para que las palabras de felicitación aparecieran. Todo estaba saliendo perfectamente para la compañía Funtom.

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Mientras los tres hombres deliberaban sobre el resultado de la competencia, el público comenzó a disfrutar de cada curry preparado. La pequeña Spears, por su parte, fue directamente hacia el de Sebastian; ansiaba volver a probarlo desde aquel día en que lo estaba preparando.

Tomó una de las rosquillas de curry, para luego regresar con los demás. Hasta ese momento, no había notado el hambre que tenía.

-Me pregunto qué diría su padre si la viera comiendo algo preparado por una alimaña como yo-susurró el demonio cerca de su oído, empleando un tono divertido en su voz.

-Bueno, probablemente no me dejaría probarlo...-respondió, con una sonrisa. Se llevó el dedo índice a sus labios y le regaló una mirada traviesa- Pero papá no está aquí, así que este puede ser nuestro secreto.

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HOLIWIS ^^

Vamos a dejar el capítulo hasta acá porque se está extendiendo mucho y no quiero aburrirlas... De todas formas, se supone que saben quién gana la competencia xDDD

Si les gustó, voten y comenten! Me divierto leyendo sus opiniones ^^

Nos vemos en el próximo capítulo!

Bye byeee~

PD: Qué opinan de la pareja Sebastian y ______? ¬u¬