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-Odio los viajes largos en aviones - se quejó Sasha.

-Por lo menos es avión y no metrobús - Anne dijo luego de soltar una risa y rodar los ojos.

-Ambos son cansados - Marcy dijo.

Sasha terminó de bajar las maletas del taxi y se acercó a la puerta de este para pagarle al conductor.

Anne y Marcy observaron la gran entrada del hotel que se extendía frente a ellas, la nieve llenaba el lugar que se encontraba en completo silencio, siendo la única excepción, el canto de las aves en los árboles.

Marcy se sonrojó cuando Anne colocó una bufanda en el cuello de la pelinegra para abrigarla bien.

No sabían mucho sobre el hotel, solo sabían que eran cabañas separadas por varios kilómetros cada una, Sasha había hecho una buena elección.

El lugar se encontraba en Alemania y justo estaban en épocas de frío, así que se tuvieron que abrigar a más no poder para evitar terminar muriendo por una hipotermia sin poder disfrutar de su luna de miel.

-¿Van a caminar o van a esperar a terminar congeladas? - Sasha pasó a su lado arrastrando las maletas con ella.

Anne y Marcy rieron y de inmediato la siguieron por el camino de piedra que llevaba hasta el lobby del lugar.

Abrieron la puerta y una mujer en la recepción las saludó, lo hizo en alemán, así que no sabrían que fue lo que dijo exactamente.

Dentro estaba caliente, seguramente la calefacción estaría a tope tomando en cuenta que afuera estaba a menos de 10 grados.

Sasha se acercó al mostrador y empezó a hablar con la recepcionista, así que a Anne y Marcy no les quedó más opción que esperar a que terminaran, específicamente, porque la plática eran en Alemán.

Sasha apareció frente a ellas con un manojo de llaves y les dijo que la siguieran, se despidió de la recepcionista y salieron del lugar.

-Hay aguas termales en la ciudad, ¿Quieren ir? - dijo Sasha.

-Por el momento quiero dormir el resto del día - Anne respondió.

-Podemos quedarnos en la cabaña, pero no específicamente a dormir - Sasha levantó las cejas y se ganó un golpe en las costillas por parte de Anne.

Marcy rió al ver que la rubia soltó un quejido por lo bajo y le reclamó a la castaña, quien solo la ignoró y le volvió a pegar.

-¿Marcy escuchas algo? - le dijo - yo escucho una vocecita molesta pero no sé de dónde viene.

-¡Ahora ignoren a la increíble organizadora de la luna de miel y que por lo tanto es su esposa, genial! - se quejó Sasha.

Anne la tomó de las mejillas y dejó un pequeño y corto beso en los labios de Sasha, para luego llevar una mano a la cintura de Marcy y acercarla a ella.

-Ya me voy a callar pues.

Luego de un rato caminando llegaron a la cabaña. Anne y Marcy observaron la cabaña con sorpresa, era de dos pisos y hasta tenía un espacio reservado para las fogatas.

Caminaron por el camino de piedra que las guiaba hacia la entrada de la cabaña, se quitaron las botas y abrieron la puerta. Todo dentro estaba ordenando y hacía calor, un calor reconfortante y necesario para ellas desde que habían llegado al país.

El lugar era grande y estaba decorada por completo, había cocina, sala, comedor y una puerta al final de la casa que llevaba a un gran jacuzzi fuera.

Un par de escaleras se encontraban en el extremo de la sala y este llevaba a la única habitación.

The Other Woman ~ Sashannarcy - ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora