Aneu tiene una suerte sorprendentemente mala, con una media beca que debe mantener, un cuarto donde se escuchan como los vecinos discuten todas las noches y el dinero que cada mes recibe y debe utilizar para cubrir sus gastos día a día, no hay momen...
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Aneu se sentía tan embarazada, molesta, sujetó el cabello de Jungkook y tiró de sus rizos de un lado a otro, pudo escuchar la risa ronca de su esposo mientras lo hacía, eso la molestó más.
- todo es tu culpa - murmuró con las mejillas rojas de vergüenza, recordando como fue que ocurrió el accidente - astuto, lobo astuto.
Jungkook sonrió mientras colocaba su mejilla encima de la panza hinchada de Aneu, sus dos cachorros estaban moviéndose lentamente, por eso su mujer estaba golpeándolo a él. Muy pronto, muy pronto iba a dar a luz, la iba a hacer feliz y serían una familia, ¿pensarían en otros hijos?
- no voy a volver a tener hijos nunca más - murmuró ella mirando como su estómago se movía debido a los dos cachorros dentro - si no dejan de moverse, dormirán juntos hasta los veintiún años.
Jungkook soltó una carcajada cuando su panza dejó de moverse, incluso antes de nacer, la voz mandona de Aneu tenía tanto efecto espiritual en sus bebés que era sorprendente.
- te amo tanto Aneu - murmuró levantándose un poco y besándola - ¿quieres comer algo?
Aneu se sonrojó, las muestras de afecto de Jungkook siempre la dejaban avergonzada a pesar de que ya tenían cuatro años juntos.
- pollito a la brasa - murmuró juntando sus palmas - de la pollería que me gusta.
Jungkook sonrió.
- pero, eso está en Perú mi amor - murmuró burlón, aún no podía creer el gran apetito que tenía.
- si me lo traes, tendremos sexo esta noche - Aneu estiró su cuerpo un poco y colocó sus piernas a cada lado de las caderas de Jungkook, el pobre se quedó sin aire al ver como los bonitos muslos regordetes apretaban sus caderas, presionando justo en ese punto - mucho sexo.
Jungkook sintió como se ponía duro.
- ¿mucho sexo? -
- si, mucho sexo -
- ¿y puedo comerte bien? - Jungkook subió sus manos por las caderas hasta la espalda de Aneu, lentamente quiso deslizar la camiseta de tirantes que tenía para chupar sus tetas hinchadas - ¿te sentarías en mi boca?
- todo lo que quieras si me traes pollo a la brasa - Aneu le sonrió mientras molía su entrepierna con su coño vestido, Jungkook jadeo, su esposa embarazada era un peligro en los últimos meses, su apetito sexual había aumentado y se veía tan bien cuando lo montaba.
- bien -
Apresurado se levantó y cogió su chaqueta, miró por última vez a Aneu y la vio tocarse un poco los pechos doloridos por atención, sintió que todo su mundo volvía a encenderse. Salió de la habitación y corrió hacia la de su cuñada, abrió la puerta y la vio sentada frente a la computadora en alguna partida online.
- Seojoi, llévame a Perú de nuevo -
- ¡sal de aquí chucho! - gritó mientras apretaba los controles apresurada - estoy en la mejor partida de LOL del mundo y no voy a interrumpirla por qué me quieres usar de transporte.
- vives en mi casa sin pagar nada - Jungkook entrecerró los ojos - Aneu quiere pollo a la brasa.
Seojoi volteó a verlo con molestia.
- la última vez que abro un portal, me iré a vivir con Jain si es necesario no oírlos - molesta levantó sus manos y señalo la puerta de su baño - allí lo tienes, estará abierto una hora completa, si llegas tarde será una mala suerte para ti.
Jungkook sonrió mientras se apresuraba, pero antes, se acercó a Seojoi y le apagó el PC, luego corrió hacia la puerta y desapareció.
- ¡MALDITO JEON! -
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