Aneu tiene una suerte sorprendentemente mala, con una media beca que debe mantener, un cuarto donde se escuchan como los vecinos discuten todas las noches y el dinero que cada mes recibe y debe utilizar para cubrir sus gastos día a día, no hay momen...
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Los ojos de cachorro de su madre la hicieron sentir mal.
- ¿tan pronto te irás hija? - preguntó la madre de Aneu sentada en la cama de su hija mientras la veía alistando una mochila de viaje, vio que metió solo dos mudas de ropa y bragas.
- si mamá, solo serán dos días, iré a recoger mi trabajo a la casa de esta compañera y vuelvo, nada de otro mundo - mintió fácilmente - se quedarán mis amigos, iré con Jungkook y Seojoi, estaremos bien.
Su madre estaba preocupada, había escuchado en las noticias sobre asesinatos muy cerca de Daegu, donde iba su hija, era peligroso irse de esa manera, pero si estaba con ese apuesto muchacho su corazón dejaría de latir de esa manera de preocupación.
- cuídense y coman algo en el camino, traten de hacer pares para descansar -
Aneu sonrió, esa era su madre, a pesar de no ser familia biológicamente, ella iba a seguir siendo su madre incluso después de que pase todo esto y se aclare.
- te quiero mamá - murmuró viéndola con calma, su madre se entristeció, no la había oído decirle mamá desde que tenía 17 años, escucharla llamarla así le hacía feliz - estarás segura aquí.
Su madre sentía miedo, algo estaba mal, desde que su hija le dijo que no respondiera ante su nombre y a cualquier solicitud que la preguntara por ella, las cosas eran extrañas.
