El más grande descubrimiento de los científicos de los laboratorios de Hawkins, regreso.
Después de años perdido sin saber de su paradero y ahora lo quieren de vuelta, aunque no para el mismo propósito con el que fue creado.
Sí no para controlar lo...
Siento un horrible dolor en mi cabeza y cuando intente abrir los ojos, todo a mi al rededor daba vueltas.
Hace unos minutos estaba con Joyce escondiendonos y ahora no se donde estoy, esos infelices me golpearon muy fuerte y no se que mierda inyectaron mi cuello, pero me hizo dormir después del interrogatorio, al abrír los ojos por completo una luz me ciega haciendo que los vuelva a cerrar y no logro moverme ni un poco hasta que alguien lanza agua fría contra mi cuerpo y abro los ojos de golpe. Entonces puedo sentir que estoy atada a una camilla.
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Mis manos, mis pies e incluso del cuello estoy atada y en la boca tengo una mordaza para que no grite. Mi respiración se acelera pues no entiendo que está pasando.
Mi mente se va directamente hacia a todos los que me importan, a los chicos, solo espero no encuentren a Once. Y Billy quien debe estar enojado y a Steve que debe estar preocupado y a Joyce porque no se si esta aquí o si logro escapar.
—Hola, tranquila podrás irte a casa en cuanto nos respondas unas preguntas. — escuche que alguien hablaba.
El dolor en mi cabeza es tan fuerte que me quede dormida.
Me despertaron horas después y empezaron hacerme preguntas, preguntas a las que no sabía la respuesta.
Ellos se estaban empezando a cansar de que no pudiera decirles nada coherente, no se cuento tiempo llevo aquí, hasta que dijeron que alguien vendría a verme.
Me pusieron en una silla, nuevamente atada de nuevo empezaron a interrogarme, pero esta vez me golpearon tan duro que no podía sentir mi cuerpo.
Creo que es mi tercer día aquí y no se si esto se pondrá peor, después de terminar con sus preguntas dijeron que el doctor jugaría un poco conmigo. Unos tipos me quitaron la ropa e hicieron que usará una para que estuviera cómoda.
Me ataron a la camilla de nuevo y entonces el doctor entró con su "juguete". Un gran aparato, que no tengo idea de que sea, porque no lo puedo ver bien.
Me conectaron varios cables en la cabeza y en varias partes de mi cuerpo.
—Esto es para que no mueras — me mostró una gran jeringa que sentí como la metió en mi cuello. — esta lista. —pusieron algo en mi cabeza, es algo frío de metal — esto dolera mucho — metieron algo en mi boca — muerde.
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