Te extraño tanto.

Una noticia desagradable.

Capitulo 2

Una noticia desagradable.

Mientras que los capitanes se encontraban reunidos en la 1ª división, Renji se encontraba de rodillas en el cuarto de baño de su dormitorio. Cuando esa mañana se levantó, sintió un enorme mareo. Como pudo, llegó hasta el WC y se arrodilló. Acto seguido, vació su estomago. Estaba realmente indispuesto. Sentía unas enorme nauseas y le daba vueltas la cabeza. Era como si tuviera una enorme resaca.

Después de vomitar hasta quedar exhausto, se incorporó y se dirigió a la ducha. Notar como el agua fría recorría todo su cuerpo y tensaba sus músculos, fue como volver a la vida. Ya repuesto de su malestar, se comenzó a vestir. Una media hora más tarde, llegaba a su oficina.

Tomó asiento en su escritorio y se dispuso a seguir con el papeleo del día anterior. La lista de nuevos reclutas era enorme. Ya no tenía nauseas, ni mareos pero no conseguía desprenderse de una desazón en su pecho. Esa sensación le tenía angustiado. Era como un mal presentimiento.

Pasó un rato y empezó a tener hambre. Su estomago rugía pidiendo algo de comida. Se levantó y se fue directo a la puerta con algo de prisa. Justo cuadro él la empujaba hacía fuera, Byakuya tiraba de ella provocando que Renji cayera de golpe encima de él. Terminaron los dos tumbados en el suelo semi-incorporados. Varios shinigamis que deambulaban por el pasillo se quedaron estáticos mirando la escena. Renji puso cara de susto ya que Byakuya le miraba con el ceño fruncido.

- Quieres quitarte de encima de una maldita vez, Renji.- Dijo calmado, pero con cierto tono de enojo en su voz.

- Lo siento mucho, taichô. No me esperaba que abrieras la puerta.- Renji se levantó raudo y se apartó de su capitán dándole espacio para que se incorporara.

- Está bien. ¿Dónde ibas con tanta prisa?- Peguntó ya de pie y entrando en su oficina.

- Tenia hambre iba a la cantina a por algo para comer.- Le contestó pasando a la sala y cerrando la puerta tras él.

- Eso puede esperar. Tienes una misión esta tarde. Ha habido varios ataques de holows en el Rukongai.- Contestó ya sentado en su escritorio.

- ¿Una misión? Pero...- No pudo acabar la frase. De repente las nauseas volvieron con más fuerza que nunca. Salió corriendo al cuarto de baño dejando a Byakuya sorprendido en su silla.

El pelirrojo, por mucho que intentó vomitar, no lo logró. Tenía el estomago vacío. Los mareos habían vuelto y se sentía fatal. Unos minutos después se lavó la cara ya más calmado. Parecía que todo volvía a la normalidad. Sin demorarse se encamino de nuevo al despacho de las 6ª división. Byakuya le esperaba muy serio detrás de su mesa.

- Lo siento taichô. No me encuentro muy bien hoy.- Dijo apenado.

- Hmmm. Prepárate para la misión. Sales en dos horas. El capitán Aizen te espera en su división.-

- ¿El capitán Aizen? ¿Por qué él?- Preguntó con recelo.

- Por que él ha sido quien ha descubierto los ataques. Su teniente está indispuesta y por eso vas tú en su lugar.-

- No me encuentro bien como para ese tipo de misión. Llevo todo el día vomitando. Además tengo un mal presentimiento.- Dijo sentándose enfrente de su capitán.

- No acepto excusas. Iras a esa misión. Si no comieras tanto no estarías así. No hagas que me avergüence de ti.- Byakuya fue muy severo en su afirmación. A Renji eso le sentó como un tiro.

- ¿Qué estas insinuando? He dicho que no me siento bien, solo eso.- Dijo enojado.

- Me da igual como estés. Eres un irresponsable a veces y no pienso permitir que manches el nombre de esta división por una simple indigestión.- Byakuya se había levantado y encaraba a Renji enojado.