Te extraño tanto.

Al día siguiente.

Capitulo 19.

Al día siguiente.

Cuando Renji despertó encontró a su pareja a su lado. Byakuya le miraba con una pequeña sonrisa dibujada en los labios.

- Buenos días.- Le susurró el Kuchiki de forma cariñosa a la vez que depositaba un tierno beso en sus labios.

- Buenos días.- Contestó el pelirrojo sonriente aun medio adormilado.

- ¿Cómo has dormido?- Preguntó el moreno tumbándose de lado y acariciándole el pelo.

- Como nunca.- Renji se acomodó a su lado mirándole de frente. Ambos hombres no despegaban sus miradas mientras que se acariciaban.

- ¿Recuerdas ya todo?- Se aventuró a preguntar el noble.

- Si, cada detalle de mi vida. Por fin las lagunas han desaparecido por completo.- Renji estaba feliz. Ya sabía todo lo referente a su vida.- Y quiero que sepas que tú no tuviste la culpa de lo que me pasó.- Le habló dulcemente.

- Si tuve la culpa. Tú no te encontrabas bien y aun así te obligué a que fueras a esa misión.- Le consefó sintiéndose más culpable que nunca y recostándose en la cama boca arriba. Renji se incorporó sobre un brazo para poder mirar bien a Byakuya.

- Eso es una estupidez. Yo estaba lo suficientemente bien como para una misión de ese rango.- Habló firme.- Lo que pasó fue una emboscada y puesto que tú no eras conocedor de ese detalle, no tienes la culpa de nada.-

- Pero...-

- Shhhhssss.- Le silenció poniéndole un dedo en los labios.- Si no quería ir a esa misión fue por que Aizen el día anterior intentó que me liara con él. También sabía que estábamos juntos y me dijo cosas que me hirieron. No quería volver a verle y mucho menos salir en una misión a solas con él.- Se sinceró con el noble.

- ¿Por eso ese día casi me dejas?- Preguntó recordando la actitud depresiva de su pareja en la víspera de su desaparición.

- Si, me dijo que jamás me antepondrías a tu clan. Esas palabras abrieron más mis heridas.- Renji esta entristecido por su comportamiento infantil. Ahora era muy consciente de lo absurdo de sus preocupaciones.

- Tenías motivos para creerle. Mi mayor error siempre fue no hacer público lo nuestro desde un comienzo.- Byakuya le miró arrepentido de sus pasadas decisiones.

- Deja de torturarte Byakuya. El pasado, pasado está. Los dos hemos vivido un infierno, cada uno el suyo propio. ¿No crees que ya es hora de que seamos felices?-

- Llevas razón.- Admitió el moreno.- Pienso hacerte el hombre más feliz del mundo.- Después selló su promesa con un beso.

- Y yo a ti. Te amo Byakuya.-

- Yo también de amo.- Los dos se volvieron a fundir en un intenso beso.

Después de darse una nueva sesión de caricias y arrumacos, pasaron a ducharse y vestirse para poder ir a desayunar. Estando los dos hombres ya tomando el primer alimento del día, Renji se animó a preguntarle algo a su pareja. Ambos disfrutaban de su desayuno sentados en el tatami de la sala principal.

-Byakuya quería pedirte un favor.-

- Dime.- Contestó dando un sorbo a su taza de té.

- Sakura echa mucho de menos a Gin y a Grimmjow. Como hoy es mi día libre me preguntaba si podíamos ir a visitar a Grimmjow a Karakura. La verdad es que yo también le extraño un poco.- Le dijo con una tímida sonrisa.