14. No soy tú

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Dylan.

Me levanto de la cama con dolor de cabeza y quiero poder decir que es por el alcohol, pero el dolor tiene nombre y apellido... Paulo Rojas.

Por desgracia mi progenitor. Voy al baño intento sacar mis pensamientos y desconectarme pero no es posible. Entre Paulo que no me deja en paz. Marihela y yo discutiendo a cada segundo y Salvador que quiere cuidarme y no hayo como decirle que no se preocupe por mi y mucho menos si eso implica que discuta con Nayely por nuestra culpa. No tienen que discutir por bandos. Se lo dije ayer y me alegra que omitieran el tema. Pero al parecer Salvador habló con Marihela y no tengo ni idea de que, porque ella no me dijo y mi hermano omitió el tema.

Me ducho y salgo para vestirme con traje de tres piezas a la medida. Uno color miel me espera sobre la cama junto con unos zapatos de vestir. Al terminar me arreglo el cabello a la perfección y como una tostadas antes de salir a la sucursales de la empresas de España. Tengo que hacer unos trabajos y mientras busco unas oficina para mi voy a estar en una de las estás de Daniel. Estoy claro que aquí no tengo poder. Este no es mi lugar. Es el de Daniel y por lo tanto lo respeto por lo que es. El jefe.

Me froto la cara y salgo del departmento dirigiéndome a la empresa. Allí tengo respeto es por mi estatus y familia. Así que tengo presente mi puesto.

El camino no es muy interesante.

La imagen de Mare llega con sus hermosos ojos llenos de lágrimas y necesito saber que demonios hablo con Salvador.

Sin embargo eso no implica que ya me estoy cansando de todo lo que implica estar con ella. Las peleas, intercambios de pensamientos y sobre todo las palabras hirientes que me están cansando.

La amo pero no puedo ser el único en querer perseverar en lo que podamos tener.

Llego a la empresa y entro al ascensor subiendo hasta el último piso dónde está la oficina de Daniel y está la que me toca por los momentos. Al abrirse las puertas metálicas me encuentro con un espacio abierto donde se encuentran las personas de más prestigio aquí. Es decir, ejecutivos, gerentes y los mayores inversionistas que trabajan en las empresa. Camino con seguridad y seriedad a la oficina de Daniel. La secretaria se encuentra afuera de la oficina de mi primo.

- ¿Daniel llegó?- Indago.

Me mira- El señor Rojas se encuentra en este momento con su padre y tío.

Eso no es bueno. Ya estamos teniendo problemas con ellos según porque mi presencia en España no es requerida y no estoy ejerciendo bien mi desempeño laboral .

- ¿Hace cuánto llegaron?

- Aproximadamente treinta minutos.

Asiento- Informarme que llegue y pregunta si requieren mi presencia.

Asiente, llama por el teléfono fijo,.

- Señor, su primo llegó ¿Requiere su presencia?- Asiente al teléfono y vuelve a mí colgando- Pase.

Me mantengo firme y camino a la puerta que da paso a la oficina. No toco porque ya saben e mi presencia, simplemente abro la puerta dando paso a las personas que me esperan.

Paulo está sentado en una de las sillas del lado contrario del escritorio junto con Paul. Daniel esta en si debida silla, lleva un traje color azul marino con rayas finas negras, casi imperceptible. Mi padre lleva un traje color mostaza oscuro y mi tío uno negro.

- Llegó el que faltaba- Comenta Paul causando la seriedad de su hijo.

- ¿Esta reunión a que viene?- Indago. Me voy a sentarme en un mueble sercano. Esta oficina se asemeja al tamaño de la mía.

Kalon #2 [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora