Extra 2/3

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Sophia

Me tiro boca abajo después de hacer lo que sé le va a encantar. Sonrío como idiota por tenerlo cerca. Miro de reojo la puerta. Se que nadie va a entrar porque Simón se a encargado de maravilla con que nadie suba. Parece ser muy quisquilloso en eso.

Me acuesto feliz y una de las cosas que me encanta de este cuarto es sentir el aroma de Christian. Ese exquisito aroma particular de menta y ahora con una leve sensación a whisky. No debería, pero se siente muy bien. O ya estoy paranoica. También es una opción. Parece que estar cerca de ese hombre me da la misma reacción que estar drogada. Quiero más de él. No lo quiero soltar. Es como una adición a él. No se sienta mal y a decir verdad me vale mierda si lo es. El es mío. Tengo dos años sin verlo y no esta mal que lo quiera cerca de mi. Me voy a ir un día y mientras que pueda me voy a llenar de él. De sus besos. De sus sonrisas. De sus caricias. De sus mirada predominates encima de mi. De sus abrazos. De todo lo que tenga en mi alcance y más por qué soy una maldita avariciosa que no se sacia de él.

Sonrío de solo pensar que me voy a quedar con él, en su departamento todos estos días. Es como el cielo y el infierno a la vez. La tranquilidad sin vacío que me causa estar con él es como el cielo y por otro lado está ese lado eufórico, lascivo y maliciosa que me arrastra al infierno más veces de las que puedo contar.

El teléfono suena. Me levanto nuevamente y rebuscó entre el lugar buscando el celular. Al final lo consigo tirando en el piso. Maldigo al ver que entre nuestro proceso se callo y se partió la pantalla. Maldita sea. Solo lleva conmigo seis meses.

Gruño de malas.

Veo el nombre de Tibisay y busco una sábana para cubrirme. Tapo mis pechos descubiertos y me vuelvo a tirar en la cama viendo la hora.

1:46 p.m

Es decir que allá van a ser las ocho de la noche.

Contesto topándome con mi amiga.

-Hola... ¡;¿Perra, ya te cogió?!

Me mira y sonrío.

-No.

-Para los cuentos que tengo de ese hombre me parece interesante que camines aún.

-¡Tibisay!

Se ríe.

-Es más. No deberías estar respondiendo. Deberías estar con tu hombre acaparando toda tu atención.

Ruedo los ojos sonriente.

-Primero. No todo en la vida es sexo. Dos. ¿Si pasaste que no te ibas a responder porqué llamaste?

-Uno. No todo en la vida es sexo, pero es jodidamente delicioso, se disfruta y con el hombre correcto te deja en cama. Eso sí es un perfecto hombre. Dos. Esta era mi manera de saber si está siendo un perfecto hombre o todavía no.

-Te aseguro que ganas no faltan, pero siempre terminan interrumpiendo.

-¿Que puede ser más importante que estar contigo?

-En la primera iban a llegar los invitados y después se llegó la exnovia a joder -Ruedo los ojos.

-¿Con la que se iba a casar?

-Si, pero no necesito que me recuerdes eso.

-Sophie. Yo sé que fuiste porque querías verlo y han estado hablado y todo eso, pero tampoco quiero que te iluciones, preciosa. Hombre no es gente y solo espero que esté tenga humanidad por lo menos. No des todo por echo por simples palabras bonitas. Las palabras se las lleva el viento

-Él es bueno -aseguro confiado.

-Eso dije yo de José, Pedro, Luis, Bryan, Alfonso, Jesús, Juan y muchos más. No quiero que resultes como yo. No has estado con otro hombre. No te a interesado nadie más y tengo miedo que estés dando todo por echo -Me mira como una madre osa protectora -Te adoro y sabes que jamás voy a desear algo malo para tí.

Kalon #2 [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora