Kalon #2 [Completa]

12. Otra vez

The heart wants what it wants - Selena Gomez

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Dylan

Salgo del cuarto. Mi cabeza martillea con todo lo acontecido. Me topo con la mirada de todos sobre mi. Los gritos estoy más que seguro que se escucharon así que no es novedad.

–¿Que pasó? –Indaga Salvador.

–Lo de siempre –Gruñó.

Camino a Jennifer que me mira con tristeza. Es mi única amiga. Sabe lo que pasó entre Mare y yo. A parte de ella y posiblemente su novio no creo que alguien más lo sepa. Es la única con quién me encariñé en Francia. Es la única persona que dejé que me conociera más allá del Señor Rojas.

–Vámonos –Le hablo a la chica.

–Yo enserio lo lamen...

–No fue tu culpa –Hablo notando como sus ojos se llenan de lágrimas.

–Claro que sí, te debí decir. Supe que venía y por eso me adelante. Y pasaron muchas cosas. No me pude comunicar contigo y pensé que llegaría antes que la loca, pero se adelantó.

Suspiro.

–No es tu culpa –me acerco abrazándola –Vámonos muñequita –Apago el tono agridulce –Te ayudo con los que quieras hacer y nos vamos...

–Pero ella...

–Déjalo –le doy una leve sonrisa –No quiere hablar conmigo, cuando regresé y este más calmada le explico –Asiente. Le doy un beso en el cabello. Me separo de ella viendo a los demás –Se las presento chicas, ella es Jennifer mi amiga y secretaria–Veo a la francesa –A mis hermanos ya los conoces.

Varias veces fueron a Francia para visitarme.

–Hola pequeña –Saluda el mayor con una sonrisa.

–Hola –Le sonríe tiernamente.

–Ellas son Rebecka, mi prima. Nayely, mi cuñada. Valentina, una amiga y algo así como cuñada.

Las tres le sonríen cálidamente.Presento a Daniel y después de segundos hablando me llevo a la chica, para hacer todo lo que deseaba.

Mi mente no paraba de repetir una y otra vez lo sucedido.

Cómo digo siempre que avanzamos un paso retrocedemos cinco. Y me jode que con todo lo que pasó anoche de verdad pensé que podría haber una oportunidad y no la hay... Parece nunca haberla.

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Suspiro bajando del Jet. Hago una mueca queriendo salir cuanto antes de la caja voladora que no me gusta por obvias razones. Camino todo el tramo hasta el estacionamiento donde vislumbro mi camioneta junto con Chris y Salvador charlando amenamente. En cuanto me ven sonríen.

Chris hace una mueca.

–Una semana en Francia y ya te vez más viejo, cansado, amargado, enojado...

–Si gracias, no necesito recordatorio –Lo miro mal.

–Y además se te va el humor –Rueda los ojos.

–¿Cómo te fue? –Indaga Salvador. Hago una mueca de pesar –¿Tan mal?

–Si. Tuve como siete altercados con el Imbécil que fue a mi empresa a menospreciar mi trabajo y además mi palabra. Lo tuve que confrontar por las idioteces que él dijo Paulo.

–Yo sigo diciendo que soy adoptado –Asegura Christian con una sonrisa.

–Los tres lo somos en ese caso –Ruedo los ojos.