19. Pasando Página

6 1 0
                                    

Marihela

Me levanto de la cama con pesadez. Ya es miércoles. Y aún no puedo creer que hayan pasado una semana y dos días desde el cumpleaños de Christian. Está claro que me sigo sintiendo mal. El sentimiento no se va de un día para otro, pero creo que es más llevadero. Por lo menos ya no quiero llorar cada vez que lo veo. Por lo contrario he hablado con el un par de veces. De igual forma no es que lo vea muy seguido. Han pasado cuatro días desde que presento a Isabelle. Casi nunca lo veo. Ya vienen mucho. Ni a mí departamento. Ni al de rebecka.

Mis sentimientos con todo esto están revueltos. El domingo no fui a la consulta porque a decir verdad no quería salir. Pero le dije que estoy mal y agendamos la cita para hoy porque no quería esperar hasta el domingo.

Es un poco tarde en comparación a la hora que me suelo despertar. Estos días únicamente me he centrado en la universidad y en la tesis.

Me voy a bañar cuando el reloj marca las ocho y media. Entro al baño y me ducho con rapidez.

No tardo nada en salir. Al estar un poco menos depresiva si tengo energía para buscar un buen vestuario. A la final tienen que ser funcionar porque luego de la sesión tengo que ir a la universidad.

Busco unos jeans negros. Una franelilla del mismo noto y una blusa blanca con escote de bandeja dejando ver las finas tiras de la franela de tiras. Me recojo el cabello en una coleta alta. Me veo en el espejo y considero cortarme el fleco.

Me coloco unas botas tacón que me hacen sonreír.

Me veo en el espejo y agradezco que hay recupero la confianza en estos días. Ya pasé hace mucho tiempo esa temporada donde me sentía mal conmigo misma y no me gusta. Me empecé a amar tal cual soy y no deseo cambiar eso porque se siente horrible no quererte. Me rehuso a pasar por eso otra vez. Lo detesto. Destes el sentimiento. Detesto verme a un espejo y no sentirme bien conmigo.

Supere eso hace mucho tiempo y no deseo recaer. Niego que si pienso  en Isabelle automáticamente me siento mal. Es imposible no compararnos. Somos polos opuestos.

La chica es hermosa. No lo niego. No puedo negar algo que está ante ojos, pero tampoco me voy a menos precise a mi. Me veo bien. Soy atractiva. Puede que no tenga la delicadeza que posee ella, pero cada quien tiene lo suyo. Y para gustos colores.

<<O eso prefiero creer>>

Escucho el teléfono sonar y voy hasta a él.

Daniel

Frunzo el ceño y por unos segundos me preocupo. No es habitual que me llame.

–Hola ¿Todo bien? –Indago.

–Eh si. Hazme un favor. En la sala deje un carpeta. Puedes buscarla.

–Si –Camino hata la puerta –Déjame ver.

–Gracias.

Alejo el teléfono y camino hasta la sala. No es muy difícil de ver. Está sobre la mesa de vidrio.

–Ya la tengo.

–Me puedes hacer un favor. Es importante.

–Depende.

–Es que Dylan no va hoy a la oficina. Está libre, pero necesito que lea el documento y yo no sé lo puedo llevar porque estoy por entrar a una junta. Nayely va a entra junto a mi. Salvador debe estar durmiendo. Christian y Sophia deben estar ocupados. Ángel está trabajando en la colección y no la quiero interrumpir. Rebecka no me responde así que...

–¿Quieres que se lo lleve?

–Si –Finaliza dudoso.

–Vale. Pero necesito que me pases la dirección. No sé dónde vive.

Kalon #2 [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora