Beautiful Spring

Capítulo 1

La habitación estaba envuelta en una penumbra suave, iluminada apenas por los primeros rayos del amanecer filtrándose a través de las persianas. El leve zumbido del monitor cardiaco llenaba el silencio con un ritmo constante, casi tranquilizador. Jisung dormía en una camilla junto a la ventana, con las mejillas ligeramente abultadas por la posición, el cabello castaño cayéndole sobre el rostro en mechones desordenados. Su respiración era tranquila, pausada, como si por fin hubiese encontrado un momento de paz.

Un leve chirrido anunció la apertura de la puerta. Sin necesidad de abrir los ojos, Jisung sonrió.

—Jihye… —murmuró, reconociendo los pasos y el calor familiar que se deslizaba bajo las cobijas.

El menor se acurrucó a su lado, rodeándolo con los brazos sin decir una palabra. Jisung le correspondió, abrazándolo con suavidad, ambos compartiendo esa cercanía que no requería explicación.

—Hazte el dormido, que Hyung viene para acá —susurró con una risita, cerrando los ojos.

La puerta volvió a abrirse, esta vez con una intención menos sutil.

—Ya sé que están despiertos —dijo una voz divertida. Hyunwon caminó hacia ellos con sigilo, antes de atacar sus costados con cosquillas—. ¡Boo!

Los dos chicos brincaron en la cama, soltando una carcajada que llenó la habitación de vida. Hyunwon sonrió, dejando la carpeta médica sobre la silla.

—Hyung, eso fue cruel —se quejó Jihye, sentándose en la camilla mientras se acomodaba el cabello alborotado.

—Y ustedes son muy flojos —respondió entre risas, sacudiendo la cabeza—. Bueno, hora de la revisión. Ya saben el protocolo.

Ambos asintieron, obedientes.

—¿Tomaron sus medicamentos?

Los dos negaron con la cabeza.

—Deben hacerlo antes del desayuno.

—Sí… —respondieron al unísono, resignados.

—Jihye, tú primero.

El menor se recostó en la camilla mientras Hyunwon tomaba su pulso con profesionalismo.

—¿Cómo te has sentido últimamente?

—A veces me duele el corazón… pero en general, estoy bien —respondió con naturalidad, aunque la mueca de Jisung lo traicionó.

Hyunwon suspiró, anotando algo en su tabla.

—¿Dificultades para respirar?

Jihye negó con la cabeza.

—Muy bien. Todo parece en orden. Toma tu medicamento.

Jihye asintió, tomando las píldoras sin entusiasmo. Luego, se hizo a un lado para que Jisung tomara su lugar.

—Yo me he sentido muy bien —dijo con una sonrisa exagerada.

Hyunwon lo miró con una ceja alzada, aunque no pudo evitar sonreír. Lo revisó con la misma calma de siempre: pulso, vista, orientación.

—¿Problemas para hacer del baño?

Jisung negó, divertido.

—Perfecto. No olviden tomar sus medicamentos y avísenme si sienten cualquier cosa. Una enfermera traerá el desayuno en unos minutos.

—Gracias, Hyung —dijeron ambos, mientras lo veían salir de la habitación.

El silencio volvió por unos segundos.

—¿Volvemos a dormir? —preguntó Jihye, ya acurrucado otra vez.

—No, primero el medicamento —dijo Jisung con voz de hermano mayor responsable, pasándole su recipiente.