Al enfocar la mirada hacia la ventana mis ojos arden al sentir los rayos del sol.
- Cierren la ventana - Murmuro contra en cuello de Alec, mis piernas enredadas en las suyas.
- Alguien está gruñona hoy, creí que Aiden la había amansado en el auto - Murmura Alex riendo suavemente, apretando mi cadera en el proceso.
- No molestes - Gruño lanzando un manotazo en su dirección pero atajó mi mano y le dió un beso.
- Bonita mañana ¿No? - Habla tiempo después.
Me levanto con unas ganas inmensas de ir al baño, salgo con dificultad de los brazos de ambos y medio dormida camino al baño de la habitación.
- ¡AY CHIHUAHUAS! - Grito al golpear con mi cuerpo desnudo el marco de la puerta, mi tracero impacta con el frío suelo.
- ¿¡MIA!? - Aiden, Alex y Alec se levantan exaltados de la cama para ponerme de pie como una muñeca.
- Me caí - Me río frotando mis ojos alcoholizados de ayer.
- Si tenemos que cuidar a nuestra niña - Aiden me ingresa al baño y me sienta en el retrete. Alec y Alex se cepillan los dientes en los lavamanos dobles.
- No me siento cómoda si me estás viendo - Cubro tontamente mi cuerpo y cubro mi sexo cruzando mis piernas .
- Estamos casados, amerita que no haya vergüenza entre nosotros - Aiden me ve fijamente teniendo en cuenta que me incómoda. Cierro los ojos un momento para relajarme y poder hacer mis necesidades, escucho como Aiden va a la ducha.
Al terminar Alec y Alex me ven poniéndome a prueba, a lo que yo les saco la lengua descaradamente provocando sus risas.
Acompaño a Aiden en la ducha lavando su ancha espalda.
- Se me cayó el jabón - Aiden me mira pícaramente.
- Nooooo, lo recoges tú - Beso sus labios y el aprovecha para agarrar me de los glúteos.
- No me invitas mujer hermosa - Alec se situa en mi espalda repartiendo besos en mi cuello.
- Estaremos muy apretados - Murmuro deslizando mi mano para masturbar el miembro de Aiden. Pero no termino lo que empiezo, porque Aiden se arrodilla y me besa el abdomen siguiendo un sendero invisible a mi sexo dónde introduce su lengua y echo la cabeza hacia atrás, Alec aprovecha el acceso a mi cuello para hacerme unos cuantos chupones.
- ¿A quién perteneces? - Murmura Alec en mi oido con una mordida que me hace gemir.
- Yo me pertenezco AAAAH Aigh - Aiden me muerde el clítoris.
- No Muñeca, di lo que queremos escuchar - El que me proporciona placer entre mis piernas masculla apretando mi trasero.
- ¡Son unos obsesivos esposos! - Trago saliva - Soy de ustedes - Presiono aún más la cabeza de Aiden en mi y levanto mi otro brazo para acariciar el cabello de Alec, entre suspiros y apretones llegó al orgasmo que me deja las piernas temblando por las fuertes sensaciones.
Salimos de la ducha riendo para encontrarnos a Alex en la cocina preparando lo que parece ser carbón.
- Están nuestros padres al teléfono - Grita Alex dejando el teléfono en la mesa y corre a la estufa.
Voy y sujeto el teléfono viendo a mi niña en medio de sus dos abuelos.
- Holaaaaa mi vida - Sonrió y saludo a mis suegros también - ¿Cómo se está portando?
- Como un ángel no te preocupes Mía - Mi suegro me responde felíz.
Hablamos por unos minutos más y les pasó a sus hijos para que conversen mientras me ocupo del desayuno calcinado. El sentimiento de hogar inunda la estancia y se de los nuevos retos que estamos dispuestos a afrontar por nuestra familia.
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Bajo Sus Encantos ©️ [+21]
RomanceFiesta, alcohol y bailar ... Esas eran las tres combinaciones que más frecuentaba mi vida privada. [+21]