54_ Vello

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Luz estaba saliendo de su reciente ducha con una radiante sonrisa en el rostro y puesta una bata.

Hoy sería un gran día.

Lo presentía.

Emocionada, fue a su habitación a cambiarse, dando pequeños saltitos. Abrió la puerta y su mandíbula casi se le cae al ver a Lucía, Hunter, Viney y Emira con ropa interior deportista.

- Pero que... ¿Que están haciendo?

Pregunto y todos pusieron su mirada sobre ella, Viney la recorrió de pies a cabeza y esbozo una sonrisa coqueta.

- Wow, Luz, no sabía que así recibes a tus visitas.

La castaña al principio no entendió pero luego se sonrojo ferozmente al darse cuenta que solo estaba con una bata.

- Viney, ojos aquí.

Le recriminó Emira con el ceño fruncido.

- Lo siento.- río nerviosa la chica.

- ¿Ya me van a decir que hacen aquí?- volvió a preguntar Luz avergonzada.

- Verás, hermanita, todas las chicas y yo...

- Soy hombre.

Aclaro el brujo pero Lucía lo ignoro.

- Estamos aquí para hacer un acto privado entre mujeres y que solo las ultra mega amigas...

- Y enemigas... estamos en guerra desde que le rompiste el corazón a Amelia. 

Interrumpió Emira mirando acusadoramente a Lucía quien miró hacia otro lado nerviosa. 

- ¿Acto privado? Lucía, ¿de qué estás hablando?

- De esto, niña. 

La mayor señaló un tarro que Luz venía viendo desde hace tiempo en las manos de Viney.

- ¡Depilación con cera caliente!

- Váyanse de mi cuarto, por favor.

- ¡Oh, vamos, Luz! Todas nos reunimos aquí porque nuestras piernas están como unas junglas, además este también es mi cuarto.- aclaro Lucía.

- Sabes que hay métodos menos dolorosos, ¿verdad?

- Eso es en el mundo humano Luz, estamos en el reino de los demonios y Eda dijo que con esto se depilan las brujas.

- Es cierto.

Apoyo Hunter recordando los momentos donde Belos se ponía a llorar cuando se depilada sus piernas.

Luz sabía que eso era doloroso, agradecía no estar pasando por esos problemas de vellos como las demás.

- Bueno, ¿quien inicia?

Pregunto Viney y todos miraron hacia diferentes lados.

- Ugh, vamos chicas, como los chicos soportan esto siendo unas divas de primera.

- ¿Los chicos también se depilan?

Cuestionó Emira y todas enarcaron una ceja.

- ¿Edric no se hace manicura y se afeita la axila?

- Si, pero...

- ¿Gus no se afeita las piernas?

Pregunto Hunter y Emira frunció el ceño.

- Yo que se.

- ¿El directo Bump no se afeita los vellos de su pecho con cera?

Pregunto Luz con rostro traumado y todas la imitaron.

- Esa asquerosa imagen que vimos la otra vez cuando nos mandaron a la oficina del director por hacer explotar un salón de clases era algo que quería olvidar.

Aclaro Lucía y todas asintieron.

- Bueno ya, hay que empezar.

Hablo Hunter y... el fue el primero en ser depilado. Luego siguió, Lucía (por reírse mucho), Emira y Viney, todas gritaron y lloraron por el dolor en sus piernas y axilas.

Mientras una Luz estaba matándose de risa al verlos torturarse.

- ¡Jahahahahahaha! ¡U-ustedes... si que son tontas! ¡Jahahahahaha!

Todas miraron a la morena, para luego mirarse entre sí y asentir.

- Tu turno, Luz.

Luz paro de reír y nerviosa mostró su pierna.

- Y-yo no tengo vello.

Se justifico y todas gruñieron en respuesta.

- ¿En serio no tiene vello? Hasta Amity tiene, pero se para depilando cada vez que crece, hasta se depila el vello de su....

- ¡No tienes que contarme eso, Emira!

Grito Luz sonrojada.

- Y... s-si tengo vello en...cierto lugar privado.- aclaro incómoda y avergonzada.

Lucía sonrió como el Grinch y extendió su brazo hasta Viney.

- Viney, pasame la cera.

Luz sudo frío, sintiendo un dolor fantasmal en su parte baja al saber el plan de su hermana.

- Bueno, yo ya me voy.

Dijo Hunter dejando a una Luz sola quien lo maldecía internamente.

- E-esperen, chicas, el vello no me molesta ¡Enserio!

La pobre morena se asusto aún más al ver que Lucía se acercaba con la cera en manos junto con las demás.

Ese sería el fin de Luz Noceda.

- ¡Alto!

Entro Amity quien se puso roja de furia al ver como tenían acorralada a su novia en un rincón.

- ¡Aléjense de mi Luz!

Con un hechizo atrapó a las tres chicas en una masa de abominable y las colgó en el techo como piñata.

Luz por fin pudo respirar y corriendo fue a abrazar a su novia.

- ¡Batatita! Me salvaste.

Exclamó emocionada mientras la pelilila se ponía como tomate al darse cuenta que su novia estaba solo con una bata puesta.

- L-Luz, e-estas...

- ¡Ay, lo siento!

Se disculpo sonrojada y antes de irse a cambiar, le dio un fugaz beso en los labios.

- Gracias por ayudarme.

Y se fue, dejando a una Amity toda roja.

Y así Luz se salvo de la depilación en "esa" parte sensible de su cuerpo.

Continuará...

Luz y Amity: Tonterías de los Noceda [Lumity] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora