Luz y Amity: Tonterías de los Noceda [Lumity]

40_ Cosas de hermanos

Emira miraba con burla a su hermana quien tenía el ceño fruncido.

- ¿Quieres reírte de mi?- cuestionó con enfado la pelilila.

- Sip, pero eso me haría una mala hermana, Manoplas.

- Ugh, callate.

- Vamos, Manoplas, no estés enfadada conmigo, yo no tuve la culpa que Luz haya echo una competencia con su hermana sobre quien terminaba los tres litros de leche y no haya venido a la escuela por que tiene un terrible dolor de estómago.

Amity se molesto aun más al recordar eso.

Se suponía que su novia era inteligente... en algunos casos, pero tomarse 3 litros de leche sabiendo que es intolerante a la lactosa, era el colmo.

Estaba segura que nadie podía igualar la idiotez de Luz y Lucía.

Las dos eran igual de tontas.

- No me lo recuerdes, Emira, ahora por culpa de esa tonta competencia voy a estar sola otra vez.- suspiro Amity.

- Wow, si que te estas ablandado, ¿donde está la Amity solitaria y fría?- se río la bruja, haciendo sonrojar a su hermana.

- Por lo menos yo y Luz estamos saliendo oficialmente como novias.- se burló Amity sonriendo con superioridad.

Emira paro de reír.

Era verdad que Viney todavía no le pedía para salir oficialmente, pero eso no le daba derecho a que su hermana se lo eche en cara. 

- ¿Así? Pues yo fui el primer bi panic de Luz, burlate de eso.

Soltó la peliverde con sorna y se fue corriendo, dejando a una furiosa pelilila quien ya tenía bolas de fuego en las manos.

- ¡AHORA SI ERES BRUJA MUERTA!

Y así inició una persecución entre Amity lanzandole bolas de fuego a Emira quien suplicaba clemencia.

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Bonus:

En la casa búho.

Eda miraba con preocupación a Luz ya que esta había empezado hablar sola y no quería que nadie se le acerque.

- Día 1.
No se donde estoy pero puedo decir que al parecer las paredes respiran y hay una vieja decrépita.- hablo Luz grabando con su celular a una Eda molesta.

¡¿Cómo se atrevía esa mocosa a llamarla vieja decrépita?!

Ya había sacado una chancla de quien sabe donde pero de la nada Lucía cayó delante suyo junto con unas tablas de madera.

Miró al techo y vio un agujero con un King asomando su cabeza.

- ¡King! ¿Que rayos paso?

- ¡Ella me reto, yo no tengo la culpa!- y se fue.

Eda suspiro profundo.

Sin duda necesitaba unas vacaciones lejos de esos idiotas que llamaba familia, y reparar ese agujero.

Continuará...