Aún me cuesta creerlo. Si no fuera porque tengo la mano de James fuertemente cogida, pensaría que esto es algún tipo de sueño macabro. Pero aquí estamos, solo dos adolescentes paseando por el bosque prohibido, cómo si los apellidos Potter y Malfoy no significaran nada, cómo si Gryffindor y Slytherin no importara. Solo dos personas dispuestas a amarse.
James me mira tiernamente, parece casi tímido. ¡Dios mío! Aún no me puedo creer que siendo el hijo de los Potter se sonroje tan fácialmente. A veces parece tan fuerte y decidido, y de repente ese tinte en sus mejillas lo delata.
-Le veo algo sonrojado señor Potter - Digo con una sonrisa coqueta.
James tira de mi mano hasta pegar nuestros cuerpos. Siento que mi respiración se agita y deposita un casto beso en mi mejilla.
-Señorita Malfoy- Dice mientras deja un reguero de besos por mi cuello - Su brillo la delata.
Y en ese momento me doy cuenta, toda mi piel se ha vuelto a un más blanca, y un pequeño brillo empieza a emanar de cada poro de mi piel.
-Será por el frio - Miento torpemente. Hago esfuerzos inútiles por cubrir la piel de mis brazos.
-Si es así- dice apartando mechones que me caen por la frente - Seguiré con mi investigación.
-¿Qué quieres comprobar? - Digo poniéndome algo nerviosa
- Tranquila Lía, jamás haría nada que pueda dañarte. - Dice agarrando mis manos
Empieza a besarme firme, como si quisiera transmitir esa promesa con los labios. Esa promesa queda atrás cuando poco a poco nuestras bocas se vuelven feroces y hambrientas. Poco a poco siento que me engulle, pero no me importa, porque siento que necesito más, que siempre querré más de esto. James empieza a recorrer mi espalda con sus manos, mientras yo acaricio con ahínco su pelo. En algún momento me coge de la cintura y estoy literalmente a su al redor, como si no quisiéramos dejar espacio entre nuestros cuerpos, como si el estar separados nos quemara. Y siento que es así, que cada centímetro de mi piel quiere reclamarlo como suyo. Poco a poco sus manos exploran más allá de los límites, bajando por mis muslos. Me apoya contra un árbol mientras seguimos devorándonos. Mis manos no se quedan atrás y se dedican a explorar toda su espalda, y sus brazos, y ahora entiendo por qué el Quiditch es el mejor deporte del mundo. Noto que mi piel arde, y solo se siente reconfortada en aquellas zonas donde sus manos me tocan. Siento que me abrasa, y con insistencia le quito la camisa. Él me quita la corbata y la camisa y entonces lo siento, piel contra piel.
- Mío - rujo con desespero
James se aparta a mirarme a los ojos.
-Lía, te prometo que estoy disfrutando esto, y me siento imbécil por pararte ahora mismo.
Le ignoro mientras sigo reclamando su tacto
- Por favor - insiste frustrado - Tienes los ojos rojos y estás ardiendo. No metafóricamente, me refiero a literalmente. Y tu piel... Es cegadora
En ese momento entiendo que hay algo que va mal. Me aparto de él abruptamente. Parezco una luciérnaga, todo nuestro alrededor está brillando, aunque apenas puedo ver bien. Siento mi espalda pesada y mi visión borrosa
-James, esto no me había pasado antes. No sé qué me pasa. - Digo admitiendo estar asustada.
James me mira sin saber qué hacer.
*Figura encapuchada*
-Mira que tenemos aquí - Una voz rompe el silencio - Pocas veces tiene uno tanta suerte.
James se pone protectoramente entre mí y esa extraña figura. Cada vez mi temperatura sube más y siento la visión más borrosa.
-¿Quién eres? ¡No deberías estar aquí! - James intenta mostrarse firme, mientras sigue tocándome el brazo. Me sorprende su capacidad de mantener el control en estas situaciones.
-Jovencito... Sois vosotros los que no deberíais estar aquí. No sabéis que el bosque prohibido no es lugar para alumnos...
- Esta bien, no vamos a robarle más tiempo. Deje que cojamos nuestras cosas y volveremos al castillo.
En ese momento recuerdo que tanto James como yo seguimos sin camisa. Y recuerdo entonces que sigo brillando.
-Ella...- Dice con voz trémula e ignorando totalmente a James -Es una veela. Pensaría que es imposible, pero ese brillo es inconfundible. Dicen que la sangre de veela tiene poderes sanadores.
-¡No te acerques a nuestros! - Apunta con firmeza a la figura encapuchada. - Expecto patronum. Un pequeño tigre sale de su barita y atraviesa la figura, huyendo bosque a través.
-¡Vamos muchacho!... No creías que esto iba a funcionar, ¿verdad?
-Mi patronum enviará un mensaje a la directora, en cuestión de minutos llegará alguien. Te sugiero que te largues si no quieres problemas.
-Que chico más impertinente... si no fuera porque eres el elegido de la veela hace rato que te habría matado
En ese momento siento el pánico recorrer mis venas. James me mira confuso. Un sonido ensordecedor hace que me caiga de rodillas. Siento como todos mis huesos se rompen, lo cual es imposible. James se agacha sin saber qué hacer.
-Así es muchacho, las veelas eligen a su compañero destinado. Si tú mueres, ella muere. El amor para una veela es como una cadena perpetua, prácticamente una sentencia a muerte. Le haces sufrir
-No sabes nada del amor monstruo
-Mírala, el amor no debería doler, ¿verdad pequeña? - Dice lanzándome un hechizo aturdidor- No te preocupes, seré rápido. Apenas lo vas a notar.
Me levanto torpemente, mientras el dolor se extiende por todo mi cuerpo. James corre mientras se interpone entre nosotros.
-Apártate Crio! - Dice pareciendo frustrado - ¡Que no pueda matarte no quiere decir que no pueda torturarte!
Agarra a James del cuello
- O mejor dicho, torturarla.
La figura empieza a apretar el cuello de James, él intenta deshacerse de las garras.
-Lía... Corre. - Dice james con la voz rota - No va a pasarme nada
-James, no tengo opción. Tengo que salvarnos.
Poco a poco James va recuperando el aire, sus heridas se sanan y me mira con incredulidad. Observa mi cuello, cómo empiezan a aparecer regueros de sangre y las marcas de las garras de esa criatura.
-¿Lo ves chico? Está absorbiendo tu dolor, tus heridas. -Dice acercándose a mí - Es fascinante el poder de estas criaturas.
Poco a poco mi visión se vuelve negra. Y dejó de sentir nada. Ya no puedo pensar, no puedo sentir.
ESTÁS LEYENDO
¡Estupido Potter!
Fanfiction¿Un Potter y una Malfoy? Lía odia a James con toda su alma, es arrogante, engreído, desafiante... James odia a Lía con toda su alma, es fría, arrogante, niña de papa... La directora McGonagall esta arta de las disputas entre dos de sus...
