Miro hacia atrás mientras corremos, hasta que tengo que mirar al suelo cuando comenzamos a bajar rápidamente unas escaleras.
-¿¡Donde vamos!? - la grito sintiendo una gran adrenalina por lo que estaba pasando.
-¡SOTANO! - grita abriendo una ventana que ni yo sabía que estaba y encima abierta.
Ella rápido se sube a una silla para después salir por la ventana.
-¡NOA DETENTE! - miro hacía las escaleras por donde habíamos bajado escuchando las voces.
-¡VAMOS VIENEN! - me grita la niña desde afuera.
Tiro mi mochila fuera de la ventana para luego saltar y pasar por ella sintiendo de nuevo como mi cuerpo me dolía demasiado por exigirlo tanto.
De nuevo me vuelve a coger de la mano saliendo corriendo por él viejo jardín hasta llegar de nuevo a la pared, pero me sorprendo cuando había un agujero en la pared por donde podías salir.
Salimos fuera a la calle, tiro de ella frenando de golpe cuando un coche se detiene a nuestro lado dando un gran frenazo haciendo chirrear las ruedas.
-¡CORREEEE! - me grita ella volviendo a tirar de mí cuando la puerta se abre saliendo un hombre.
-¡NOAAAAAA! - la grita cuando nos estamos alejando del lugar.
Corremos, corremos más sin parar sintiendo que me dolía hasta él pecho por no parar a descansar un poco hasta que llegamos a un callejón.
La suelto posando ambas manos en mis rodillas soltando un gran quejido de dolor por las heridas y él dolor de cuerpo que sentía.
-¿Estás bien? - me pregunta ella con ese tono de preocupación.
-Si, solo... - separo la camiseta larga de mi cuerpo cuando meto mi mano por dentro de la chaqueta sintiendo como se había quedado pegada por las heridas. - Creo que tengo... - sentía demasiada, calor y no era por correr. - Déjalo - le quito importancia. - ¿Quién eran esos? - la pregunto.
-Son de donde me escape vienen a por mí porque no quieren que este con mi hermano - me dice ella también con su respiración acelerada.
-¡NOAA! - él mismo hombre del coche llega de nuevo con él saliendo.
-¡CORRE! - vuelve a gritarme.
¡Dios mío!
De nuevo salimos corriendo alejándonos cada vez más de donde estaba la casa de Noa, mi garaje, de todo...
Narra Aiden:
Había salido para ir a buscar a Evelyn teniéndome que abrigar más que otras veces porque hoy hacía más frío.
Llevaba bastante rato caminando por las calles, pero no daba con ella.
¿Dónde se había metido?
No creo que la haya dado tiempo irse tan lejos, tampoco la dio tiempo porque llegue al poco tiempo de que ella se fuera.
Sigo caminando por un rato más metiéndome hasta por los callejones cuando mi móvil comienza a sonar.
Saco mi móvil de mi bolsillo sin mirar de quien se trataba.
-¿Sí? - es lo único que digo cuando cojo la llamada.
-¡Aiden! - la voz agitada de Carmen se escucha a través de la llamada.
-¿Carmen? - le digo sin entender porque me estaba llamando a estas horas. - ¿Qué pasa? - le pregunto rápido.
-Se trata de tu hermana Noa, ¡SE ESCAPO DEL ORFANATO! - justo en ese mismo instante que escucho aquellas palabras mi respiración se detiene por unos segundos.