Capítulo 36

4K 357 15
                                    

Cuando cerré la puerta me quede con la mirada de Evelyn, camine por él pasillo hasta llegar a la puerta principal abriéndola, pero me detengo antes de salir apretando fuerte mi mandíbula mientras agarraba la puerta con fuerza debatiéndome que hacer.

Lo menos que quería es que ella se sintiera usada por mí, me iba por una buena razón si quería seguir manteniendo la confianza del jefe tenía que irme, pero tampoco quería que Evelyn me mirara con esa mirada como si estuviera dolida.

Suelto un gruñido cerrando de nuevo la puerta comenzando a caminar de nuevo por él pasillo hasta llegar al cuarto abriendo la puerta rápido sorprendiéndola.

-Aiden... - me mira sorprendida. - ¿No te ibas? - me pregunta sin entender tapándose.

Entro al cuarto mirándola acercándome a la cama hasta llegar a ella chocando mis labios con los suyos escuchando un sonido de sorpresa por su parte.

Nuestros labios se mueven al compás encajando perfectamente sobre todo cuando nuestras lenguas batallan volviéndose un beso tierno y caliente.

Me separo viendo como abre despacio sus ojos encontrándose con los míos mirándome aun sorprendida.

-¿Esto te deja claro que lo que paso en está habitación no solo es un polvo? - le pregunto viendo como entre abre sus labios sin esperarse mi pregunta.

-S. si... - consigue decirme.

-Bien, porque sé que tenemos una conversación pendiente, te contare todo Evelyn, pero ahora tengo que irme no quiero que pienses que te use no soy como esos hijos de puta - meto mi mano entre su pelo tocando su nuca haciendo que me mirara fijamente a mis ojos. - Estoy cerca de que se cumpla mi venganza por todo lo que te hicieron - la doy otro beso, pero más pequeño sin dejarla que me contestara. - Luego nos vemos - con unas zancadas llego a la puerta saliendo de nuevo cerrando la puerta escuchando su voz.

-¡AIDEN ESPERA! ¿¡A QUE TE REFIERES CON LO QUE DIJISTE!? ¡AIDEN! - me llama escuchando su voz más clara cuando abre la puerta, pero yo ya había llegado a la puerta de la entrada.

Veo como corre hacía a mí con las sábanas enredadas en su cuerpo, pero cierro la puerta alejándome rápido de la casa.

Mi móvil comienza a sonar de nuevo lo saco de mi bolsillo cuando levanto mi mano agitándola llamando la atención de un taxista que pasaba justamente en este momento.

Le digo la dirección más cercana al taxista cuando me subo al taxi para después coger la llamada.

-¿¡Se puede saber dónde cojones andas!? - ruge molesto él jefe.

-Te dije que estoy lejos estoy llegando dame unos minutos - le contesto serio dándome ganas de matarlo por atreverse a hablarme así.

Cada vez me costaba más controlarme con él.

-Te quiero ver en seis minutos aquí o tendremos problemas, ¡NINGUN MINUTO MÁS! - vuelve a rugir colgando la llamada después.

Suelto un gruñido apretando él móvil en mi mano para después decir al taxista que fuera más rápido.

Consigo llegar a tiempo por poco, ya desde afuera se veía hombres que trabajan para él pegando a otros y algunos heridos.

La policía si no se pasaba es porque la tenía comprada.

Entro dentro del club sacando mi pistola comenzando a disparar a los enemigos viendo como todo era un caos, todo estaba echo un desastre había bastantes cuerpos tirados en él suelo y alguna bailarina entre los cuerpos de los enemigos sin vida.

Me tengo que cubrir agachándome para ir hasta él despacho disparando a otros dos que intentaban llegar hasta él jefe viendo que algunos de mis compañeros le habían retenido hasta que llegue yo cargándome a los que no dejaban de joder.

Perdido Entre Tus CurvasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora