Capítulo 29

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Me remuevo sintiendo como si tuviera mis ojos pegados ya que me costaba abrirlos, suelto un pequeño quejido llevando mi mano a mi cabeza sintiendo algo que tiraba de la piel de mi mano.

Cuando consigo a lo largo de los segundos abrir mis ojos observo la vía que tenía en mi mano.

Observo las paredes a mi alrededor dándome cuenta de que estaba en una habitación de hospital.

Giro rápido mi rostro porque había sentido unas cosquillas, pero hasta que no veo una silueta no me doy cuenta que me estaban acariciando mi brazo.

Me encuentro con los ojos azules de Aiden mirándome fijamente, entonces cuando dejo reposar de nuevo mi mano en la camilla siento como aprieta mi mano, pero no ejerce mucha fuerza.

-Hola Evelyn me alegra que hayas despertado por fin - frunzo mi ceño cuando escucho sus palabras, su voz era suave y sus ojos demostraban él cansancio que llevaba encima.

-¿Qué? - le suelto confusa clavando mis ojos de nuevo en los suyos estando confusa. - ¿Cuánto tiempo llevo dormida? - le pregunto viendo como él me mira.

Cuatro días - le miro sorprendida.

-¿Cómo? - miro de nuevo la habitación. - ¿Cómo que estás aquí? - no entendía nada.

Entonces justo en ese momento vuelve a mi cabeza los recuerdos de Noa, la niña con la que estuve.

Rápido me alzo soltando un quejido, Aiden se levanta de la silla en la que estaba sentado.

-Eh tranquila Evelyn estas a salvo tienes que seguir recuperándote - evita que me levante.

-¿Dónde está la niña que estaba conmigo? Cuando me fui de tu casa me encontré con una niña que buscaba a su hermano estaba con ella, pero entonces... - me quedo callada. - No recuerdo nada más... - le digo cada vez más confusa.

-¿Te refieres a mi hermana? ¿Noa? Ella está bien - le miro aún más confundida.

-¿Tu hermana? - él me muestra una medio sonrisa, pero agotadora.

-Relájate y te contare todo - suelto una respiración volviendo a posar mi espalda en la camilla haciéndole caso. - No es bueno que te alteres, todo está bien - me vuelve a decir.

-Te escucho - le digo.

-Cuando pienso que la vida no me va a sorprender más me termina sorprendiendo por todo lo alto - medio sonríe. - Por cosas de la vida te encontraste con mi hermana y agradezco que así fuera porque gracias a ella te pude encontrar a ti - se acerca quedando más cerca de mí. - ¿Evelyn que se te pasaba por la cabeza para irte de esa manera en él estado que estabas? - suelto un suspiro cuando lo escucho.

Mis ojos se humedecen sintiendo un picor en ellos y al instante mis lagrimas comienzan a fluir por mis mejillas.

-Lo siento... - cierro mis ojos por un momento para después mirarlo. - Yo solo no quería buscarte problemas - hago una pequeña pausa. - Bueno ni a ti ni a nadie - Aiden suelta una respiración.

-Créeme que te entiendo, pero la solución no era marcharte, pudiste morir allí sola en aquel almacén Evelyn si no te hubiera encontrado si mi hermana no hubiera ido a nuestra antigua casa y hubiera insistido en buscar a su amiga no te hubiera encontrado nunca - ¿dijo amiga?

-¿Amiga? - pestañeo varias veces.

-Mi hermana te considera una amiga, te cogió cariño al instante porque la ayudaste - me explica.

-¿Dónde está ella? - él agacha un momento su mirada.

-En él orfanato de donde se escapó, yo no tengo su custodia así que mientras se tiene que quedar allí, fui a verla, pero no quiere verme esta enfadada conmigo porque la deje de nuevo allí, pero no puedo hacer nada si no la llevaba me hubiera metido en serios problemas - me explica.

Perdido Entre Tus CurvasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora