365 días para recordar ▪︎ PEDRI GONZÁLEZ

Capítulo 18

-Tengo la garganta seca-me quejé en cuanto acabaron de maquillarme.

-Traedle agua a Casilda-ordenó Telma de forma autoritaria.

Me miré al espejo y suspiré. Me sudaban las manos, sentí el frío ascender por mi cuerpo. Traté de respirar hondo para poder tranquilizarme, pero fue misión imposible. Respiré un par de veces y solo conseguí tranquilizarme al ver a mi marido en la puerta. Me miró de arriba a bajo, se le dilataron las pupilas. No me quitó el ojo de encima, vestidazo el que llevaba aquella noche y él no dudó en hacérmelo saber.

Primera aparición pública tras el accidente, primera entrevista y los nervios me fueron matando poco a poco. Aunque no fue en televisión como tal, fue junto a Ibai en su canal de Twitch. Quise que mi primera aparición fuese algo cómodo y natural, no quise miles de focos centrados en mí. Y quizás me vestí muchísimo más arreglada de lo que la ocasión lo merecía. Estábamos en casa, todo mi equipo se desplazó para ayudarme a prepararme, los nervios me comían por dentro, pero en cuanto mis ojos miraron a Pedri todo mi cuerpo se relajaba al instante.

-¿Cómo estás?-sus brazos rodearon mi cuello y me dio un beso en la mejilla.

-Con mil taquicardias encima. ¿Es normal que esté tan nerviosa?

Me giré para poder admirarlo bien, sonreí con desesperación y él comenzó a acariciarme el rostro con muchísima sutileza. Hasta el momento no había experimentado una sensación de nervios tan fuerte. Estuve al borde de las náuseas, me dolía la tripa, las manos me sumaban y de vez en cuando mi respiración se entrecortaba.

-Claro, mi reina. Es normal que ahora mismo estés atacada, pero tranquila que todo va a salir bien-depositó un beso de nuevo en mi mejilla y me abrazó-. Vas a estar perfecta y no hemos podido elegir mejor escenario para hacer la primera aparición pública.

-¿Le habéis dicho que no quiero hablar de mi enfermedad?-pregunté y él asintió.

-Tranquila amor, Ibai está al corriente de todo. Va a ser una entrevista como si estuvieras hablando con un amigo-Pedri sonrió y automáticamente me contagió la sonrisa.

-Gracias-murmuré.

-Gracias a ti por confiar en mí-sus labios se posaron sobre mis labios.

Nos dimos un beso corto, pero intenso. Me abracé a él y cerré los ojos en cuanto escuché los latidos de su corazón. Sus manos se perdieron en mi espalda en un intento de apaciguar mis nervios y lo consiguió  vaya si lo consiguió. No sé qué poder tenía él en mí, pero siempre acababa relajándome. Con él siempre me sentí cómoda, en sus brazos sentí mi hogar.

-Creo que ya estoy lista-suspiré.

-¿Estás segura?-rió sabiendo cuál era la respuesta.

-No, pero no me gusta hacer esperar a la gente-me aparté de su pecho y le agarré la cara, me alcé un poco y pose mis labios sobre los suyos-. Te quiero infinito.

-Te amo Casilda-me devolvió el beso.

Bajamos a la planta baja y suspiré. El salón se había convertido en un improvisado set muy acogedor. Respiré hondo, traté de tranquilizarme y fui muy segura de mi misma a saludar a Ibai. Solo deseaba y esperaba que todo saliera bien porque a pesar de ser muy extrovertida, de cara a una cámara me volví muy vulnerable, me dio vergüenza.

...

-¿Qué tal ha ido?-pregunté en cuanto acabamos el stream.

-Ha ido muy bien-dijo Ibai-mucho mejor de lo que te imaginas.

Me abracé a él muy satisfecha. Me vi bastante bien, con soltura. Fui respondiendo las preguntas de una forma muy fácil y espontánea. Pedri tuvo razón, fue como estar hablando con un amigo, conté mi vida, pero a mi manera y de forma bastante breve. No hablamos ni del accidente ni de mi amnesia, fue algo que preferí mantener en secreto. Más que nada porque no quise que sintieran pena por mí, no quise que se formase un círculo alrededor mío. Quise alejar a la prensa rosa todo lo posible tanto para mi salud mental como para mi tranquilidad.