La decepción de Doflamingo no desapareció del todo, o sea fue un gran golpe a su ilusión. Su cabecita de ave atrofiada soñó toda una vida y su destino sellandose junto a una persona con tal noticia y luego resulto en nada. En el camino de regreso pensó cuidadosamente en un nombre adecuado para el supuesto bebé, ¡Esto era una tragedia!, no un robo descarado, por qué inevitablemente su corazón puro de hombre enamorado había sido roto en miles de pedazos.
Sueños y vanas ilusiones. Se volvieron puras mentiras.
Se sintió miserable pero no por mucho, la opulenta Crocosmia lo hizo olvidarse de todas sus penas por la noche.
Las noticias y el estado de salud de Crocosmia dejaron atónitos a los oficiales, porque paso de estar tan pero tan enferma a estar llena de vida con la sola presencia de Doffy en la guarida. Paso de planta mustia a verse esplendida y florecida con la presencia de su sol. Giolla pensó que ella estaba fingiendo sentirse mejor para no preocupar al joven amo y esparció el rumor entre ellos ya que fue completamente drastico el cambio que se quedaron sin una respuesta más coherente en el momento. Las palabras de Giolla cobraron más sentido. Lo que conmovió a todos allí, por otro lado Los ejecutivos: Pica, Diamente y Trébol, aunque este último ya lo sabía desde antes, todos los demás estaban muy bien enterados que tenían bajo su techo a la emperatriz pirata de esta generación, era asombroso y ¡Magnifico! Tanto Pica como Diamante pensaron que no había mujer más digna para su amo Doffy que la Emperatriz de las piratas Kujas. Esperaban poder mejor este andrajoso lugar para que la pirata se sintiera más a gusto.
Por la noche una vez dejó durmiendo a Doflamingo, Crocosmia bajo a la primera planta sin hacer ruido. Salió y bajo hasta el puerto de basura y chatarra, allí Trébol la estaba esperando para una reunión secreta.
—Tengo lo que me pediste— Trébol ya tenía la información. Le acercó el sobre y Crocosmia lo leyó con atención. Alzó sus cejas, no era muy lejos esperaba poder soportar el viaje y la distancia si es que era eficiente con el tiempo.
Ella masticó las ideas primarias de su partida. Ahora venía su parte del trato —dame un par de días para preparar el viaje y hacer que baje la guardia. Ahora quedo muy sensible por la payasada esa del falso embarazo.
El hombre moco asintió molesto ya que la quería lejos lo más pronto posible. La morena lo miró indignada también, tampoco quería estar más en este lugar. Anhelaba volver a su paraiso tropical a su inmaculado trozo de cielo pero nada de eso iba a ser posible a estas alturas.
Todos sus planes se desbarataban esta vez y debía actuar conforme a nuevas metas y una nueva realidad. El encuentro fatidico con Doflamingo era el desastre más caro hasta ahora en su vida, de eso tenía toda certeza, esperaba de todo corazón no volver a toparselo de nuevo.
Destruyó la información despues de memorizarla. Este negocio estaba por llegar a su fin.
Correcto, esa era la actitud. Todo esto era una gran negocio.
Los días siguientes trascurrieron con mucha normalidad. La rutina usual. Yacer y despertar junto al rubio enamorado, alimentarlo con migajas de amor para que no sospechará de nada, distraer su tiempo con los oficiales y Rosi, caer en la retórica del quehacer mundano de unos bandidos del bajo mundo. Los días que doffy no salía, jugaba cartas y apostaba con los demás, platicaba y fumaba con el Señor Pink, tomar el té con Giolla, arrancar de los descarados y hostigosos coqueteos de Doffy, sentarse a la mesa y compartir con todos allí como si fueran una enorme y disfuncional familia que se quiere demasiado.
El tiempo se quemaba más rápido cuando se dejaba arrastrar.
Sus calculos fueron precisos, juntó los suficientes suministros para largarse y los escondió. El dia de luna nueva escogido para fugarse corría un vieto constante y perfecto para desaparecer. Con una pequeña bolsa salió sin ser notada de la guarida y sin mirar atras abordó su bote, Estaba hisando la vela cuando el olor a humo de cigarrillo barato la obligó a voltear, solitario y sin hacer ruido la figura altiva de casi tres metros de alto estaba mirandola fugarse.

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Mi Emperatriz.
Fiksi PenggemarBasada en la teoría de la Emperatriz Kuja que habría muerto de amor, y el pasado misterioso del implacable pirata, Sir Crocodile. Doflamingo se enamora por primera vez perdidamente de una mujer fría y meticulosa, que nunca le da chance, después de...