Seduce Me +19 [Completada]

20

Jungkook

Caminando hacía la habitación no podía evitar sonreír, mi Ama había mostrado sus celos conmigo, se sentía celosa de la recepcionista y por una parte eso me hizo sentir increíblemente bien.

—¿Qué te causa gracia? —preguntó ella deteniéndose frente a la que ahora sería nuestra habitación.

—Nada amor, que me alegra que tú amiga haya cancelado —le sonreí de manera pícara y me acerqué  para susurrarle en el oído— Soy todo suyo, Ama, si quieres castígueme.

Ella lamió sus labios para luego morderlos, no sabe que cuando hace eso solo me provoca besarla hasta dejarla con los labios hinchados. Me quité la camisa y me arrodillé encima de la cama, ya había adoptado mi posición sumisa y ella sonríe, caminó hasta su bolso y fué cuando sentí el vibrador que aún tenía en mis pantalones volverse a encerder.

—Nivel 4, ¿Qué tal?

Me estaba retorciendo en la cama debido al placer que ese aparato me estaba haciendo sentir, era demasiado fuerte.

—Aaah~ Ugh —no dejaba de gemir o gruñir y cuando estaba a punto de venirme, lo apagó— Ama, déjeme venirme, por favor.

—¿Por qué? Te estabas riendo de tu Ama, así que debo castigarte.

Ella se acercó y agarró la orilla de mi pantalón y así abrir el botón la ayudé a bajarlo y sacarlo de mi cuerpo luego ella metió la mano en el bóxer y tomó mi pene, lo movía de arriba abajo a un paso semi rápido... Se siente mejor que el vibrador, sus manos son tan suaves que me encanta sentirme así, mi cabeza automáticamente se echa hacía atrás disfrutando de las sensaciones que su mano produce.

—¿Te gusta más mi mano o el vibrador? —ella seguía moviendo su mano solo que está vez era más rápido y su pulgar hacía círculos en la punta.

—S-Su vagina —ella abrió los ojos en sorpresa, supongo que no esperaba esa respuesta.

—¿Quieres follarme? —ahora era yo quien comenzaba a sentirme desesperado, se verdad quería hacerlo con ella, se lo hice saber asintiendo varias veces ya que solo jadeos dejaban mi boca— Si eres un buen sumiso, te daré mi vagina como premio y harás lo que quieras con ella.

Tragué grueso... Era un premio maravilloso y de verdad que quería hacerle tantas cosas a todo su cuerpo en realidad.

—Voltea, vas a aguantar tu orgasmo hasta que yo te diga, quiero que me supliques que te permita venirte, si lo haces todo bien, dejaré mi cuerpo en tus manos y podrás hacerme todo lo que quieras, ¿Entendido?

Ya estaba jadeando de solo pensarlo, mi pene tuvo un espasmo al oírla decir todo eso, mentalicé el aguantar pero con ella cualquier cosa puede pasar, ya estaba a mi espalda así que no podía verla, estaba completamente desnudo y con mis nalgas al aire y ella detrás. Sentí como el cuero pasaba por mi piel, tenía un látigo en sus manos, mentalmente me preparé porque creo que hoy exploraré mi lado masoquista al extremo, sentí como su dedo se metió en mi orificio trasero, estaba baboso, su dedo resbalaba al entrar, supe que estaba usando lubricante, los hombres somos sensibles en esa área así que con solo su dedo ya me hacía sentir mucho por lo tanto mis jadeos y gemidos habían aparecido.

—Aah~ Ama~

—¿Qué quieres que te haga, Kookie?

Quedé en silencio y no dije nada, no tengo algo en mente pero sé que todo lo que ella me haga me gustará.

—Dime una cosa que te guste mucho y que sea una sola palabra.

—E-El negro...

—Mmm así que vamos por un color, bien, ese color me lo dirás cuando el dolor sea insoportable para tí, cuando quieras venirte basta con que me lo pidas —asentí varias veces.

Hubo unos segundos de silencio cuando luego sentí algo entrando en mi ano.

—Aaahhh~ —entró tan fácilmente debido al lubricante.

—Que buen chico, sigue así y recibirás muy pronto tu recompensa.

Ella se colocó detrás en el suelo, mientras yo sigo en la cama, entonces el primer azote lo sentí.

¡Zas!

Mordí mis labios para tratar de no gritar, el dolor se esparce por mi cuerpo dándome la sensación de placer y calma que tanto me gusta, seguramente nadie entiende y si no han tenido sexo me entenderán menos, pero la excitación y el placer hacen al ser humano sentirte de una manera tan maravillosa que no te importa nada con tal de disfrutar y que tú pareja también lo disfrute, de esa manera se crea una conexión profunda entre los dos.

¡Zas! ¡Zas! ¡Zas!

Tres azotes seguidos y ya mi pene estaba botando gotas de pre semen en la cama y ya gemía de manera audible.

—Ama~ Ama~ me gusta.

Cada eran más los azotes cuando él vibrador en mi trasero comenzó a trabajar mandándome casi de golpe hasta la pared, me retorcía en la cama sin perder la posición en la que estaba, si me quitaba me castigaría, los azotes continuaron podía sentir ya mi piel adormecida y seguramente tendría algunas heridas de cortes, el vibrador subió al máximo nivel.

—Aaaaaahhhh~ Amaaaaa~

—¿Te quieres venir? —esa voz solo me pone peor, ya no aguanto más el venirme.

—Si, ¡¡S-SI!!

—Suplica —me susurró en el oído.

—Ama, por favor —ella se colocó frente a mí, mi boca estaba abierta y saliva salía de la comisura.

—Puedes venirte —entonces me besó con tanta pasión, que exploté y me vine.

Chorros de semen caían en la cama llenando las sábanas, hasta que todo salió y ella apagó el vibrador, caí en la cama boca abajo.

—¿Te gustó? —ella lamía el látigo, mi cabeza estaba pegada a la almohada pero estaba mirando hacia un lado así que podía verla claramente.

—M-Me encantó, A-Ama —estaba más que satisfecho, sentía mucho sueño por la magnitud de mi orgasmo.

—Descansa —me dijo acariciando mi cabello— Mañana podrás reclamar tu recompensa.

Sino estuviera tan cansado y somnoliento, lo hubiese hecho ahorita, pero no tenía fuerzas ni para levantar mi cabeza.

Y entre las caricias de sus dedos en mi cabello y el pensamiento de que mañana podré hacerle lo que yo quiera, me quedé dormido.

Yo les tengo una pregunta mis pervertidas favoritas: ¿Les está gustando? 😈