Seduce Me +19 [Completada]

21

Bianca

Al siguiente día me levanté y desperté al lado de Jungkook...

Jamás había compartido la cama con mis sumisos, de hecho siempre se retiran después de una sesión.

Así que con una sonrisa en mi rostro me levanté hasta el baño, y al salir pude ver a Jungkook aún dormido plácidamente. Y la verdad es que no quiero despertarlo, por lo tanto le dejaré una nota para que sepa que me fuí a las reuniones de hoy, afortunadamente para mí, los socios con quiénes hablaré hoy son mitad coreanos y saben hablarlo así que será más fácil.

Salgo del hotel con una sonrisa y subí al auto.

—Se ve muy feliz señorita Reels —Makoto era mi chófer siempre que vengo a Japón.

—Digamos que este año es diferente —le devolví una sonrisa.

—Pues ni cuando se casó la ví tan feliz como el día de hoy —me reí, sabía cuál era la causa...

Jungkook... Él era el único que podía hacerme subir como bajar rápidamente, me he dado cuenta de eso, si él me sonríe soy capaz de olvidar el problema que estaba rondando en mi cabeza en ese instante. Pero si lo veo con otra chica, me siento celosa y posesiva, cómo si quisiera guardar a Jungkook en una bolita de cristal y que más nadie pueda verlo, solo yo.

—Supongo que hay algo que me hace feliz ahora.

—¿Es ese chico que trajo a Japón? —no respondí nada simplemente miré por la ventana pero sin poder evitar sonreír al pensar en JungKook— Pues si es así, me alegro al verla feliz, señorita, no lo deje ir.

Solo lo miré por el espejo retrovisor, le sonreí y volví a mirar por la ventana, entonces pude ver cómo llegábamos al lugar dónde sería la reunión, pero al ver a Wonho esperándome en la entrada mi sonrisa se borró.

—Vaya que ese hombre la hace molestar...

—No tienes idea de cuánto —suspiré y esperé a que se detuviera antes de bajar del auto.

Wonho me alcanza su mano pero yo simplemente salí dejándole su mano extendida.

—Auch, alguien amaneció de mal humor —habló detrás de mí, siguiéndome.

—No, de hecho estaba de muy buen humor, pero entonces te ví y todo se volvió molesto de repente —seguí caminando hasta llegar a la mesa donde almorzariamos con los socios de la empresa.

Wonho río, creo que aún no entiende que él es quien más problemas me trae y más infeliz me hace, lo peor es que no cree lo que le digo, cree que me estoy vengando por haberme engañado.

Loco...

—Solo entremos y salgamos de esto rápido para así no tener que verte la cara... Arruinas mi día —entré sin esperar a que me abriera la puerta como él acostumbra a hacer con todas las chicas.

*

Jungkook

Desperté...

Poco a poco mi cuerpo adolorido parecía despertar, pero en vez de molestarme, ese dolor me hacía el hombre y sumiso más feliz del mundo...

Mi Ama no se había controlado, sacó toda su perversidad anoche, esa perversidad que ví en sus ojos desde el día uno.

Wow... Jamás me había venido tanto... Mis orgasmos fueron fuertes, de hecho, y es cuando me dí cuenta... Mis ojos se fueron hasta las sábanas y me percaté que estaba durmiendo encima de mi semen.

Una cara de asco se formó, rápidamente me levanté para bañarme. Mientras estaba en la ducha fué que me llegó al pensamiento que hoy debía ir a una reunión con ella, así que como esposo que lo encuentran con otra mujer, salí despavorido del baño para comenzar a vestirme. Llamé para pedir cambio de sábanas.

Noté en una de las mesas de noche, encima de mi celular, una nota.

Querido Kookie:

Bebé te dejé que durmieras, sé que debes estar muy cansado, lo hiciste bien, tu Ama está feliz, espero que te haya gustado. No es necesario que vengas hoy conmigo pero sabes que tendrás un castigo cuando yo llegue, ¿Verdad?

Te avisaré cuando vaya en camino, así que sorprendeme.

Tú querida Noona.

Me sonrojé mucho... Amo la manera como me trata, para ella soy un hombre y me ha demostrado eso, pero me encanta que me trate como un niño pequeño en la cama, alguien inocente que necesita que le enseñen.

Ya sé... No es normal... Pero así soy.

No necesito que alguien me cambie, mientras no le haga daño a los demás y yo sea feliz, no me importa lo que opinen otros... Es mi vida.

Salí para desayunar algo y darle una vuelta al hotel. No podía evitar ver a las parejas haciendo cosas románticas, la verdad es que sí me veo haciendo esas cosas pero por otra parte amo lo que tengo con la señorita Reels.

—Hola guapo, ¿Estás solo? —entendía el japonés perfectamente.

—Vine solo pero si tengo a alguien, solo que no está en este momento —dije levantándome— Lo siento —me incliné.

Ella bufó y se alejó. Después de desayunar o casi almorzar, me puse a recorrer Tokio, compré algunas cositas para los chicos.

Sin darme cuenta ya eran las 3pm, revisé el celular para ver la hora y me dí cuenta que tenía un mensaje de mi Ama.

Ama 💋

Kookie llegaré a las 4.
Prepárate para el castigo.

Inmediatamente me puse duro, la emoción de recibir un castigo de parte de ella me encanta y me excita mucho.

A veces creo que puede ser algo más, tal vez sin darme cuenta ya me gusta, se que no debería seguir con esto, porque no puede haber una relación normal entre nosotros dos, pero no quiero y no me alejaré de ella.

Corrí lo más rápido que pude hasta el hotel, me duché y pedí servicio al cuarto, saqué un traje que parecía de vaquero, solo tenía unas tiras que llegaban hasta el cinturón dejando ver mi pecho completamente, luego del cinturón caía un especie de pantalón que cubría mis piernas pero dejaba mi polla a la vista.

Acomodé toda la comida que había traído la chica de servicio en la mesa encendiendo unas velas.

Y me arrodillé frente a la puerta mientras que esperaba a que se abriera y ella entrara por allí.

Está noche volvería a complacerla.