43.- Nace el Taller de Magingeneria

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Tras una noche ajetreada donde lloramos, reímos y regañamos mutuamente nos pusimos manos a la obra. Mande a llamar a Laster y Alestro, últimamente habían estado trabajando de manera frenéticas en la armadura para Lowe, así que tuve que hacer mucho hincapié en que lo que haríamos era algo aún más importante o esos dos maniacos de las armaduras no vendrían por seguir trabajando.

A los pocos minutos llegaron a la casa con varios carruajes llenos de cajas, los esclavos ayudaron a bajar las cajas y al poco rato se llenó uno de mis patios con piezas, engranajes piedras y de mases. Cuando me acerque a ver que era Laster estaba radiante, parecía que había perdido varios kilos pero por alguna razón se veía más joven y lleno de energía.

- Maestro, su coordinación fue perfecta, tenía pensado venir a verlo justo hoy – Dijo Laster sonriente.

- Así es Maestro, ayer junto al Profesor terminamos los ajustes de la última armadura de batalla Lion XXX – Continuo Alestro mientras bajaba de una carreta.

-¿Por qué me llaman Maestro? – Pregunte

- Porque desde nuestro encuentro, a pesar de que usted no lo quiso, puse a su nombre el taller , así que ahora es usted el Maestro – Dijo Laster

-Dime que no usaste mi nombre como nombre del taller – Dije afligido.

- Por supuesto que no Maestro, su sierva nos dio un par de ideas y así el taller paso a llamarse Taller de la Serpiente Plateada en honor al símbolo de la familia Guld – Dijo Alestro.

Suspire, al menos el nombre no era tan malo, vi que varios de los trabajadores del taller seguían bajando cajas y maquinaria, así me mire a Alestro y pregunte:

- Alestro ¿Por qué siguen bajando cajas y cajas de las carretas?

- Pues, vera maestro, cuando cambiamos de nombre también decidí que cambiaríamos de rubro, no nos dedicaríamos a copiar y refinar lo existente, si no que crearíamos cosas nuevas. Si bien muchos de nuestros trabajadores se fueron muchos más llegaron, no solo ingenieros mágicos, carpinteros, herreros, papeleros entre otros más llegaron buscando trabajando en nuestro taller.

-¿En serio y a que se debió eso?- Pregunte extrañado

- Fue a causa de un rumor que se extendió entre los talleres, sobre que nuestro taller estaba dispuesto a gastar toneladas de oro en pos de hacer más fáciles la vida de los comunes mientras desarrollamos nuevas tecnologías y métodos.-Dijo Laster

- Pero no recuerdo haber hecho algo para infundir ese rumor – Dije perplejo

- Se nota que el maestro es un hombre humilde, maestro el subsidio que das a nuestro taller es cuatro veces el subsidio que recibe el taller imperial, además gracias a tus contactos con el grupo comercial Midas nos es relativamente fácil conseguir materias primas- Explico Alastro

- Ya veo- jamás pensé que mi subsidio era tan alto, solo pensé que con esa cantidad de dinero podrían trabajar tranquilos sin molestarme- pero eso no responde mi pregunta.

- Lo que pasa es que la mayoría de los trabajadores se enteraron que vendríamos a mostrar la Lion xxx, así que quisieron venir a mostrar lo que hacen, además de realizar peticiones egoístas – Dijo Alastro.

- ¿Peticiones egoístas?

- Si- Dijo Alastro- Guimen ven aquí – Dijo apuntando a un enano de piel negra como el carbol- Guilmen es un Armero, pero últimamente está bloqueado al no encontrar un mineral especial, le dije que le preguntara a usted si lo tenía en su colección.

Guilmen sonrió y me paso un pequeño trozo de metal, rápidamente lo duplique en mi falso bolso mágico y le pase un kilogramo de metal, casi se cayó de espaldas y me dio varias veces las gracias, apenas se retiró había otro tipo esperando con un pequeño trozo de metal en sus manos y una mirada suplicante, tome el trozo de metal y lo copie, para luego ver un pequeña fila de hombres y mujeres esperando con trozos de materiales en sus manos, llame a Gabriel y grite:

- Metales y gemas conmigo, otras cosas con Gabriel, las solicitare con urgencia a la familia Midas y al gremio de comercio.

La mayoría de los miembros del taller gritaron en alegría y antes de darme cuenta me llene de pedidos, rápidamente mande a Nadja a buscar mi caja con metales, mientras entregaba minerales los expertos comenzaron a trabajar, el sonido de martillos , maquinas, sierras y otras cosas más que solo ellos sabían que eran comenzaron a rugir. Pero no tuve tiempo de fijarme en lo que hacían, cada segundo que pasaba estaba ocupado copiando minerales.

Cuando ya iba en el pedido doscientos una mujer hermosa y llena de tatuajes me pidió un poco de plata, se la di rápidamente, pero su figura llamo mi atención, me detuve un segundo y mire a mi alrededor y vi varias mujeres y hombres con cuerpos llenos de tatuajes y ropa reveladoras entremedio de los técnicos trabajando y compartiendo ideas con ellos, me pareció un poco raro pero no le preste atención. Cuando llego la hora de comer, la comida se sirvió en el jardín y Alastor básicamente obligo a los expertos a comer, al parecer era algo común en el taller ya que apenas Alastor aparecía los técnicos dejaban de hacer lo que hacían y se dirigían a buscar su comida.

Mientras copia mi sopa, una mujer de edad y llena de tatuajes se acercó a mí, parecía una anciana de más de 60,sus tatuajes estaban oscuros y parecía que la edad la había comprimido hasta la altura de un niño.

- Eres interesante Conde Guld – Dijo, su voz era clara y segura, se notaba que estaba acostumbrada a mandar

-¿Por qué lo dice?- Pregunte

- No solo nos dejaste entrar a tu casa, si no que nos agasajaste con lo que más desean los de mi tribu, conocimiento.

- ¿No eres miembro del taller no? Seguramente vinieron sin malas intenciones o los perros sombra y potras criaturas de Nadja no los hubiesen dejado pasar.

- Así que eso fue lo que le paso a algunos de los jóvenes, la mujer de pelo rojo nos explicó que solo estarían detenidos y que nada malo les pasaría, pero perderse esta instancia seguramente será algo que pese en sus almas.

- Ya veo, por cierto, dime si me equivoco pero usted es Madame Lyn y la mujer que está haciendo pulsadas con los herreros es Najarab ¿no?

- Así es Conde Guld, somos el Taller de la sierpe durmiente quienes hemos venido a aceptar su patrocinio a cambio de nuestra lealtad ¿Pero cómo supo quién soy yo? A Najarab la había visto antes, pero no me explico cómo supo quién soy

- Gracias a Alana, siempre se quejaba de que Madame Lyn la regañaba , la describió tantas veces que me siento un poco tonto al no darme cuenta que usted estaba aquí antes, mis disculpas, sea bienvenida Madam Lyn matriarca de las Silde de Novaventura.

- Ya no más muchacho, ahora seremos las Silde de Tenebris, si es que descubrimos como purificar esa tierra corrupta claro, tengo algunos planes pero habría que experimentar y ver como resultan.

- Pues creo que me adelante, he encontrado una forma de purificar el miasma

-¿En serio? Eres más sorprendente de lo que pensaba.

- A mí más me sorprende que Alana los convenciera de venir

- En parte fue el hecho de que no le cortaste la cabeza al explotar tu casa

-Y la otra fueron los informes de tus espías ¿no?

- ¿Sabes de los espías?

- La magia de ilusión no sirve en mí, así que si veo a los mismos tipos siguiéndome y observándome es como obvio que sabré que me vigilan, aunque solo por los tatuajes supe que eran tuyos.

- Entonces es verdad lo que conto esa niña, que nuestra magia no funciona en ti, eso te hace más interesante

- No se alegrarme o no por eso –sonreí- a todo esto ¿Dónde está Alana?

- Acompaño a la niña lobo a tu casa a buscar más comida

Y apenas termino de decir esas palabras voltee con preocupación hacia mi casa solo para ver como explotaba nuevamente mi cocina.

Mi  truco es ser ricoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora