TRAS DE TI (En Corrección)

Capítulo 58

Albert

Despierto desorientado. ¿Dónde rayos estoy? ¿Dónde está Gabriela?

—¿Gabriela?... ¡Gabriela!

—Calma Albert, ella está bien -me informa Madox y me señala la camilla de la izquierda, la veo tan tranquila y dormida, me levanto despacio pues necesito saber que es cierto

—No crees en uno ¿verdad?

—Solo quiero tocarla, saber que está bien —acaricio su rostro, ella se mueve al contacto de mi mano derecha y abre poco a poco los ojos— hola dormilona

—Albert... ¿Qué paso?  —Se sienta en la camilla alarmada

—Tranquila, escuchamos una detonación y al llegar a ustedes ambos estaban desmayados, los trajimos a la base de la organización para la que trabajamos antes Gabriela  —le explica Madox

—¡Cómo pudieron traernos aquí! Uno de los delincuentes es parte de ella

—Está muerto  —nos informa Madox y lo recuerdo todo, el asesino de mi padre está muerto— la organización ya tenía en la mira al señor Henry, solo esperaban que diera un paso en falso para atraparlo

—Julián asesino al señor Henry  —le explica Gabriela

—Lo sabemos, pero nuevamente perdimos el arma

—Exacto compañeros  —nunca creí alegrarme por ver a mi cuñado

—Vaya, ¿esa sonrisa es para mí Albert?  —Pregunta Demian con asombro

—Te la ganaste, ambos  —veo a Madox— les agradezco por ir a nuestro auxilio

—Es lo bueno de que Gabriela siempre lleve joyería

—¿De qué hablas Madox?

—Bueno... puede que tus pendientes sean pequeños rastreadores

—¡¿Qué?!

—¡Ana me obligo Gabriela, sabes que no puedo decirle que no!  —Le explica Madox alarmado

—Pero serás... —trata de levantarse y golpearlo pero la detengo

—Gabriela, gracias a ellos estamos vivos

—Tienes razón Albert, pero esto no acaba aquí, Madox, tú y Ana me las pagaran —lo sentencia

—A propósito Madox ¿porque no me dijiste de los pendientes? ¡Podría haberla encontrado mucho antes! —ahora soy yo quien lo golpeara por idiota al no decirme nada

—Como querías Albert, ¡estaba inconsciente!, solo me dio tiempo de darte la ubicación donde había mandado a Ana  —recuerdo a mi hermana, me pregunto dónde la habrá dejado Gabriela

—Amor, ¿dónde está Ana?

—Con mi tía, ella y el bebé están a su cuidado —ve a Madox y se levanta para abrazarlo -me alegra de que estés vivo

—Fue gracias a Demian y Albert, tenía un localizador, así pudieron encontrarme y salvar mi vida, les estaré agradecido por esto siempre  —Gabriela nos sonríe a ambos en forma de agradecimiento... un momento ¿está llorando en sus brazos? Bien, es momento de separarlos

—Suficiente con el abrazo. Ya sabes que está vivo, así que ya basta de llorar por él  —Gabriela me sonríe, se alza para darme un beso en la mejilla

—Eres un celoso Albert  —le seco las lágrimas con mis dedos y acaricio su mejilla, la acerco a mí para darle un beso en los labios, como deseaba hacerlo desde hace mucho tiempo