Narra ____.
Desde que abrí mis ojos en mi mente rondaban una gran cantidad de palabras por lo que ocurrió en la noche. Entre ellas no me decidí por una, pero creo que la que mas me describía en ese momento, era una total cretina. Arrugue mi rostro contra la almohada mientras repasaba mis acciones, desde el momeno en el que deje que me besara hasta en el momento que deje de pensar y le devolvi el beso entregandome a él, sin siquiera cuestionarmelo, pero claro, ahora nada era así ya que la realidad me había caído encima. Es mas, caí redonda en sus juegos tal como Chrollo lo planeo y tenía que aceptar que esta vez pude haberlo evitado si tan solo me hubiera detenido a pensarlo dos veces.
Como ya hace un rato estaba despierta, decidí que no podía seguir posponiendo mas mi realidad. Según mis cáculos aún era bastante temprano por lo cual probablemente la razón de mis problemas aún podia yacer a mis espaldas. Con lentitud gire lo suficiente para encontrarme con su espalda desnuda que se encontraba placidamente durmiendo. Me volví aplastandome la cara contra el colchón odiandome una vez mas en lo poco que llevaba el día y no sería la última en el día, ni en los siguientes.
Incapaz de formular algo claro, recorde lo unico que tenia que tener presente. Él era mi enemigo y no podía confiar en sus palabras <<quédate a mi lado>> <<a mi lado>>. Me mordí la lengua al notar como sonaba, no tenía sentido.
Me levante con total cuidado y me metí en la ducha tratando de que el agua calmara la cantidad de cosas que pasaban por mi mente. Deje que el calor del agua me ayudara a ordenar mis pensamientos, pero lo único que logre fue recordar cada detalle de esa noche. Definitivamente él escondió cada sentimiento de odio o rechazo que pudo tener por mi reemplazandolos por..¿Anhelo...Necesidad? Como si de verdad necesitara de mi, esperando que le correspondiese de la misma forma y luego recorde sus besos y la forma en la que me toco, sin rastros de odio.
Me sentí enferma de tan solo recordarlo y me refregue con la esponja lo mas fuerte que pude hasta dejarme la piel roja al darme cuenta que yo no fui mas que él al corresponderle de la misma forma. Luego pase a la otra parte de mi odio hacia mi misma, la parte que mas me carcomia mi conciencia, porque de alguna forma termine traicionando de la peor manera a Kurapika con la persona que era la razón de todo el odio con el que cargaba cada día de su vida y con ese acto, pude no mas que confirmar que nunca podría estar a su lado nuevamente.
Luego de hartarme de refregarme el cuerpo di por finalizada mi ducha que no me ayudo a despejarme en lo mas minimo. Envolviendome en mi toalla mire mi reflejo en el espejo para ver la guinda de mi pastel, especificamente en mi cuello. El tatuaje que albergaba mi cuello lo pude apreciar con total claridad ahora que mi cabello estaba envuelto con la toalla, una marca que tendría toda mi vida y en la que no me detendría a pensar mas por el momento, a menos que quisiera acabar con un colapso.
Salí siguilosamente asomando mi cabeza primero por la puerta notando con que Chrollo ya no estaba ni en la habitación ni en el restro de la casa. A pesar de lo satisfactorio de aplazar mi encuentro, me vestí lo mas rápido que pude y sin poder aguantarlo mas salí de la casa sintiendome ahogada de tan solo estar un minuto mas dentro de esas paredes.
Un poco de aire y estar rodeada de arboles terminaron por calmarme, aproveche de dar un paseo disfrutando mi momento sin pensar en la cantidad de cosas por las que tendría que preocuparme al volver. Caí en cuenta que desde ahora mi única compañía sería la naturaleza que albergaba este lugar la cual se componía de un prado con muchos arboles a su alrededor mas...Mi obligatorio acompañante. Negue con la cabeza sacandolo ese detalle por el momento y me concentre en todo lo que tenía por explorar. Sin embargo, como si el destino se esforzara por arruinar cada momento de plenitud en mi vida, empecé a escuchar las suaves pisadas que se acercaban detrás mio. No tenía que adivinar quien sería esa persona, solo que no tenia ganas de enfrentarlo aún, no ahora, pero él ya estaba aquí, esperando que reaccionara.
