Dɪᴇ Fᴏʀ Yᴏᴜ - [Aldryx x Flux]

Épilogo

Abriendo sus ojos, miró a su alrededor, sofocado por lo blanca que era la habitación, todo se oía demasiado lejano, un constante pitido en sus oídos aturdía sus sentidos, tratando de ver a su alrededor, pudo percatarse que estaba conectado a una gran cantidad de máquinas, una llamó su atención en específico, aquella que trabajaba por sus pulmones, quejándose un poco al tratar de sentarse, pudo oír pasos acercándose a su posición, pero eso no le tranquilizó demasiado.

— Quédate quieto. —Habló Solazar, apoyando su mano en el hombro de Flux, obligándole a recostarse.

Llevó su mano a su propio pecho, su herida estaba cerrada, o al menos eso parecía, debía seguir regenerándose lentamente, sus órganos internos seguían débiles, por ejemplo, sus pulmones que recibían soporte de una máquina. Volviendo a ver a Solazar, trató de formular palabras, pero su garganta estaba seca, y ninguna palabra en específico pudo brotar de él, a lo cual, desesperadamente se aferró al brazo de su suegro, emitiendo ruidos indescifrables, Solazar sabía que era lo que trataba de enfatizar, así que trató de tranquilizarlo, dando palmadas suaves sobre sus temblorosas manos.

— Aldryx está bien, tranquilo. Estará aquí en unos minutos, no te esfuerces de más, ¿vale?

Asintiendo, Flux se permitió cerrar sus ojos, el cómo había sobrevivido era un misterio, pero sin duda agradecía, estaba tranquilo de saber que su pareja estaba bien, sin embargo, todo volvió a reproducirse en cámara lenta a su alrededor, sus párpados pesaban, pero no se sentía mal, de hecho, estaba demasiado tranquilo, no había ningún dolor en su cuerpo, y lo que más le alivió fue sentir contacto en su mano.

— ¿Amor?

— Al~ —Sonrió tontamente, alzando su mano al rostro de su pareja.

— Dios, Flux. Es tan Bueno verte despierto nuevamente. —expresó el de tez rojiza, lagrimeando un poco.

— Solo fue un pequeño descanso, nada grave, ¿que te preocupaba tanto? Estoy bien, sabes que soy duro de matar.

— Flux, no fue un "pequeño" descanso, estuviste inconsciente 2 meses.

El paso del tiempo golpeó de lleno su conciencia, ¿que había pasado en todo ese tiempo? ¿Enserio se podía dormir tanto? Joder, su regeneración estaba más débil de lo que había imaginado, pero al menos estaba con vida.

— Extrañaba tanto oír tu voz. —Acarició su propia mejilla contra la palma del pálido hombre.— No vuelvas a irte de mi lado, ¿entendido?

— Está bien... Entonces... Tendré que vivir por ti, morir es demasiado fácil, vivir es toda una aventura. —Sonrió, achinando un poco sus ojos en lo que se quitaba la mascarilla de oxígeno.

Recibiendo besos en su rostro, Flux se sintió como nuevo, era tan agradable estar de vuelta, obvio tendría que adaptarse a volver al mundo actual, 2 meses no era poco tiempo, pero estando al lado de ese chico todo era posible.

(...)

Lustrando su hermosa moto, Aldryx sonrió nostálgicamente, gracias a esa bestia había conocido a quien actualmente era su pareja, habían pasado casi 6 años desde que oficialmente pareja, y hace 3 meses compartían un anillo de compromiso, mentiría si dijera que viendo esa moto no se sentía orgulloso de su gran progreso.

Habían pasado tantas cosas que echando un vistazo atrás jamás imaginaría estar en donde estaba ahora, era impresionante el cómo una simple persona podía darle tanto significado a su vida.

— Amoor~ Mira a quien traje~ —Habló Flux, cargando a Azara, la pequeña hija de Tabi y Agoti.

— Aaawww, hola, preciosa. —se alzó, acercándose al fregadero para lavar sus manos y secarlas sobre su ropa para luego ir a cargarla.— ¿Tus papis están trabajando que te dejaron con tus tíos?

La pequeña bebé rió tiernamente, apoyando sus manos en el rostro de Aldryx, quien con una amplia sonrisa dio un beso sobre su mejilla antes de mirar a su pareja, quien besó sus labios antes de apoyar su cabeza sobre su hombro.

— ¿Cansado del trabajo, amor? —Preguntó Aldryx, permitiendo que la bebé jugara con su cabello.

— Sí, pero tengo chismesito, vi a Sasa y Wara dándose besitos en la oficina. Fue muy lindo, pero shhh, ellos no deben saber que nos enteramos.

— Jajaja, pero si es obvio que ellos dos tienen algo. Ya solo falta que lo confiesen. ¿Y mi papá?

— Aquí. —se asomó en la puerta.— A la niña le toca comer, déjamela un poco.

Entregándole la pequeña, la parejita se despedía de ella con un infantil movimiento de mano, para luego de un rato quedar completamente solos nuevamente, a lo cual Flux suspiró, acercándose a la moto de su pareja.

— Que nostalgia, aún recuerdo cuando ganabas cada competencia, siempre fuiste increíble, admiro eso. —Deslizó su mano por aquel vehículo, sonriendo un poco.

— Jajaja, si. Aunque tú me hiciste ser mejor persona, oh, por cierto, quiero entregarte algo, espérame ahí.

Atento, Flux siguió a su pareja con la mirada, quien se alejó de él por unos minutos, para cuando volvió, le ofreció una bolsa muy linda de regalo.

— Que lindo, pero mi cumpleaños fue hace 7 meses. —Bromeó.

— Solo ábrelo. —le dio un golpecito sobre el hombro.

Riendo, el más alto abrió la bolsa con cuidado, retirando un lindo listón color azul, para luego fruncir el ceño y sacar una pequeña prenda de colores celestes con un estampado de moto, mirando a su pareja con cierta duda, confirmando sus sospechas cuando el de tez rojiza apoyó su mano sobre su vientre.

— ¿Seremos padres? —Preguntó algo atónito.

— Sí, después de tanto tiempo... Tendremos un hij- ¡wow!

Levantándolo del suelo, Flux abrazó a su pareja con cariño, dando unas vueltas antes de bajarle y tomar sus mejillas para besar su rostro repetidas veces, besando finalmente sus labios volvió a abrazarle.

Correspondiendo a su abrazo, el más bajo estaba sorprendido de su reacción, no esperaba que se lo tomara tan bien, era... Hermoso tener una familia propia.

Escondiendo su rostro en el pecho de su amado prometido, el joven sollozó un poco, su vida era perfecta ahora, haría todo lo posible por mantenerla así hasta el fin de sus días.

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꧁Rᴇᴀʟ Eɴᴅɪɴɢ꧂

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Bueno, esta historia de amor ha llegado a su final, muchas gracias a todos aquellos que estuvieron apoyando la historia desde un inicio, quise dar dos finales a esta historia, consideremos que este es el verdadero final.
La historia se desarrolló con cariño y esfuerzo, espero enserio que la hayan disfrutado tanto como yo disfruto al darles capítulos nuevos, siempre son bienvenidos en leer mis otras historias.
Las despedidas son tristes, así que veamos esto como un hasta luego, y nuevamente, muchas gracias por su apoyo.