Cuando Menos Piensas Sale el Sol

Capitulo 28:

----Narra Dani----

La vi correr, abrí los brazos y ella me abrazó. Nos miramos a los ojos, en ellos pude ver que no me equivocaba, algo malo había pasado. Iba a preguntarle que le había ocurrido, pero preferí esperar a que ella empezara a hablar. Seguimos mirándonos a los ojos, como si no hubiera nadie más en el mundo aparte de nosotros dos. Después hundió su cabeza en mi pecho y empezó a llorar. Todos los chicos la miraban sorprendidos al igual que yo, pero nadie decía nada. Al cabo de un rato, María se soltó de mi abrazo, se limpió las lágrimas con las mangas de la chaqueta. Después, se dirigió hacia cada uno de los chicos.

María: Carlos, nunca hemos hablado mucho, pero en todo este tiempo que te conozco, te he cogido cariño-le sonrió.

Carlos: Gracias-le devolvió la sonrisa.

Nos quedamos extrañados al oír lo que dijo.

María: Álvaro, a ti pues que eres un graciosillo, pero se te quiere así como eres. No cambies y cuídame a Judith ¿eh?

Álvaro: ¡Sí! Para mí, mi princesa es lo primero.

María: ¡Judith! A ti te conozco desde hace menos tiempo, pero ya te he cogido cariño, espero que este graciosillo no te haga sufrir porque si no, ¡se las va a ver conmigo!

Judith: Tranquila, y yo también te quiero-sonrió mirando a Álvaro.

María: Blas, el romántico Blas. No veas cuanto tardaste en declararte a Mireya ¿eh? Pero mira lo felices que sois ahora, ojala os vaya genial y trátamela bien ¿vale?

Blas: Claro.

Blas la miró raro, todos estábamos sorprendidos por lo que estaba diciendo, pero ninguno queríamos interrumpirla.

María: Mireya, mi niña bonita, mi loca, mi mejor amiga. Te quiero un montón, espero que sepas hacer igual de feliz a Blas que él a ti.

Mireya: Claro-sonrió-.Lo quiero demasiado.

Ambos se sonrieron y María le dio un abrazo a Mireya.

María: David, mi pastelito. Muchas gracias por estar ahí, para hacerme reír, por aguantarme, por apoyarme, por todo. Te quiero.

David: Yo a ti también pastelita.

Le dio un abrazo y se dirigió hacia mí.

María: Dani, mi amor, mi vida, mi peluchito-nos reímos-.Lo eres todo para mí. Por ti sonrío por las mañanas y suspiro por las noches, por ti sigo adelante cada día, por ti soy alguien nueva, alguien a la que no le importa el qué dirán y alguien que te quiere con toda el alma. Dani, no sé qué voy a hacer sin ti-me abrazó y empezó a llorar.

Dani: ¿Cómo que qué vas a hacer sin mí?

David: Suena a despedida.

Miré a María que estaba secándose las lágrimas.

Dani: ¿Te estás despidiendo de nosotros?

No contestó, se limitó a agachar la cabeza.

Dani: ¡Respóndeme!-la zarandeé.

María: Dani…

Dani: ¿Qué? Ahora que estamos juntos, que somos felices ¿te vas? ¿Por qué? ¿Por quién?

David: No le grites.

Dani: ¡Vete a la mierda!

David: ¡Lo haré cuando dejes de gritarle!

Dani: ¡No te metas!

María: ¡Parad los dos!

La miré, estaba llorando.