¿Qué nos pasó?

24

Y cayó la noche. 

La hueva Inés sabía que era muy arriesgado lo que estaba a punto de hacer pero la duda la carcomía por dentro, al no saber si las sospechas de la sargento Kie Hue Bo Ta eran verídicas. -Nada pierdo con intentarlo- pensó, pues después del reality, mucha dignidad no le quedaba.

Se arregló lo más que pudo para la ocasión y salió presurosa hacia aquel infame bar donde Juan solía ir a emborracharse cuando descubrió lo que había entre el tío y ella. 

Entró y para su sorpresa, no se encontraban allí los poetas, ni los rancheros, ni ningún otro huevo ... Sólamente podía distinguir cierto sombrero púrpura de copa que conocía tan bien, por lo que se acercó con nerviosismo a la mesa donde se encontraba el tío.

-Qué pedo, sobrina? Pensé que me habías dejado plantado -

-  Pues no, fíjate, ya sabes que yo siempre cumplo lo que prometo -

- Me alegra escucharlo porque creo que me vas a tener que cumplir en otra cosita ...-

-Q-qué? - La sonrisa confiada de Inés se transformó en una mueca de nervios. -A-así nomás? Digo, mínimo invitame una copita o algo, no?- La pobre doncella supo en ese momento que había cometido una "cagazón", como diría el mismo tío.

...

Mientras tanto, en el refugio de los huevos de confeti...

- Ya carnalito, yo creo que no vale la pena, esė Ferdinand se me hace muy mal pedo- Confi suspiró, sintiendo cierta lástima por su hermano

- Lo sé, carnal, pero es que por más que trato no lo puedo dejar de querer...-

-Eso se pasa con el tiempo, no te me apresures -

-chales pues es que parece que es eterno- 

-pues fúmate una pa que pase el tiempo y no te des cuenta carnal- 

El mayor de los hippies obedeció enrollando su porro con desgano, perdiendo casi toda la esperanza.  Comenzó a fumar y miraba fijamente el humo 

- Qué looooco... El humo se está poniendo lila, se parece a la capa de... Aish olvídalo... -

- sabes qué? Pa que no pienses en eso, te voy a poner unas músicas- Confi sacó su celular y reprodujo un álbum del haragán y compañía, banda que los hippies solían escuchar cuando eran más jóvenes.

Después de un par de canciones, Confi notó que su hermano estaba más calmado, hasta que empezó una que le recordaría al rastudo el vacío tan grande que tenía dentro.

- Mejor quítala carnal, no quiero chillar ahorita -

- Tú siéntela carnalito, pa que saques el coraje que traes atorado -

- Ahorita no le eches limón a la herida -

- Ándale, hasta te dejo que la cantes, aunque se te salgan los gallos -

- No carnal, es que...- suspiró - Sabes qué? Pues va, si el Rodito puede, por qué yo no?-

"Bájate ya de esa nube 

Órale pues 

Aspiraste a más 

Te mereces un diez 

Deja ya de soñar, soñador 

Que para triunfar no eres un triunfador...

Tú, sólo tú 

Has tenido en tus manos mi verdad 

Yo, sólo yo 

He tenido el privilegio de tu mirar...

Sentí agua fría en mi cara 

No sé ni cómo llegó 

Sentí un brusco despertar 

La realidad me aplastó 

Ya no escucharás esa canción 

Que incitaba a pensar

Ya no crearás más paisajes 

En tu imaginación 

Ya no tendrás más mi amor 

En tu corazón 

Esta será para ti 

Mi última canción 

La cantaré al viento 

Y el polvo me escuchará 

Te dejaré mi sonrisa 

Me llevaré tu soledad 

Una lágrima eterna 

Que nunca secará 

Esta será para ti 

La última canción

Esta será para ti

Mi última canción 

Tú, sólo tú 

Has tenido en tus manos mi verdad

Yo, sólo yo 

He tenido el privilegio de tu mirar 

He tenido el privilegio de tu mirar 

He tenido el privilegio de tu mirar..."

Pascua suspiró, agotado pero era cierto, se sentía mejor al sacar eso de su sistema.