XXXIV

149 20 1
                                    


Sus padres no sabían que decir, se habían quedado sin palabras y con los ojos muy abiertos mientras miraban con incredulidad a YoonGi, quien estaba ahora a su lado.

-Pero nuestro hijo es un mortal, igual que nosotros.- le sorprendía como su padre encontraba cualquier cosa para refutar la petición de YoonGi.

-Eso no me importa, amo a su hijo y lo quiero conmigo, es lo único que importa.

No sabía si aquello le encantaba o le disgustaba, YoonGi, pese a seguir con la conversación con serenidad, seguía proyectando vibras de posesión sobre Jungkook. Y eso lo tenía en aquella batalla mental, era lindo que alguien lo quisiera de esa manera como para llamarle "suyo" pero por otra parte creía que era como tratarlo igual que una cosa.

-¿Que te puede ofrecer nuestro hijo?- Sus padres seguían en la incredulidad, casi indignante, como si pensaran que Jungkook fuera poca cosa para el dios.

-El simple placer de tener su compañía día y noche.- la serenidad todavía no abandonaba su cuerpo, aunque podía notar el desespero en su mirada cansada.

-¿Por que nadie me ha preguntado sobre lo que yo quiero?- Él mismo ya se estaba cansado de la situación también.

-¡Oh! Adelante hijo, habla.- sus padres y YoonGi dirigieron sus atentas miradas a él y por un segundo se arrepintió de haber hablado y prefirió dejarlos que ellos resolvieran el asunto.

-Pues....

Jungkook myth Donde viven las historias. Descúbrelo ahora