SS Suzune Horikita: ¿es superior a Nii-san? (REESCRITO)

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Hoy decidí seguir a Nii-san para finalmente hablar con él. Desde que ingresamos a esta escuela, sus miradas hacia mí han sido como dagas, una mezcla de decepción y frustración que me ha perseguido desde que quise emularlo. 

Antes, cuando yo aspiraba a ser como él, me miraba con admiración, me elogiaba y mostraba interés en mis logros. Pero esas épocas han quedado atrás, y ahora parecía haberse olvidado por completo de mi existencia.

Nuestros ojos se cruzaron en el pasillo, y la expresión en su rostro fue de desaprobación total. Esa mirada, tan intensa y llena de significado, me impulsó a seguirlo y descubrir qué es lo que lo atormentaba.

Después de las clases, comencé mi sigilosa persecución a través de los corredores de la escuela. Nii-san se dio cuenta de mi presencia de inmediato, pero no se molestó en mirar atrás. Salimos del edificio y nos dirigimos hacia un callejón, como si él ya supiera cuáles eran mis intenciones.

En el callejón, Nii-san dejó caer palabras que parecían puñales, hiriendo mi orgullo y confianza. Sin embargo, hubo algo que dijo que resonó en mi mente: "la Clase D". ¿Estar en la "clase D" es tan malo? ¿Qué significa eso? Automáticamente, en un intento de afirmar mi valía, le dije que llegaré a la "clase A". Fue lo único coherente que se me ocurrió en el momento, una especie de respuesta impulsiva para hacer frente a sus críticas.

La conversación continuó, y de repente, Nii-san agarró mi muñeca. No puse resistencia, consciente de su fuerza física superior a la mía. Estaba a punto de ser lanzado al suelo cuando, sorprendentemente, alguien agarró el brazo de Nii-san para evitarlo.

Miré hacia arriba y me encontré con Akiro, quien parecía haber intervenido en el momento justo. ¿Había escuchado todo? Si es así, me di cuenta de que tendría que tomar medidas para evitar que divulgara la conversación. La amenaza parecía ser la única opción en mi mente agitada, mientras pensaba en cómo mantener este enfrentamiento en secreto y proteger lo poco que me quedaba de dignidad frente a los demás.

Pero por alguna razón Nii-san ya conocía a Akiro y parece que le tenía algo de respeto.

Cuando yo le dije que parase el se alejo y Nii-san después lo intento golpear, cosa que Akiro lo esquivo y lo golpeó en el estómago ¿Qué como puede ser? Nii-san no pierde contra nadie.

Al parecer Nii-san está interesado en él y Akiro hizo una petición para que yo me alejara y tengan una conversación.

Después del sorprendente enfrentamiento entre Nii-san y Akiro, me quedé en la entrada de la escuela, con la necesidad imperiosa de hablar con él. La intrigante relación entre Nii-san y Akiro, marcada por un respeto aparente, dejó en mí la inquietud de descubrir más sobre ambos.

Mientras esperaba a Akiro, reflexioné sobre la extraña situación. ¿Por qué Nii-san ya conocía a Akiro? ¿Por qué le tenía ese peculiar respeto? 

Mi curiosidad estaba en su punto máximo, y al mismo tiempo, una chispa de esperanza se encendió. Tal vez Akiro podría ser la clave para alcanzar la ansiada Clase A, una pieza valiosa en el complicado tablero de la jerarquía escolar.

Finalmente, Akiro salió del callejón, y me acerqué para hablar con él. Sin embargo, algo en su mirada me paralizó. Sus ojos, más tenebrosos incluso que los de Nii-san, me atraparon en un escalofrío de horror. 

En ese momento, me vi incapaz de articular palabra alguna, y opté por apartar la mirada para liberarme de su penetrante mirada. Funcionó, y Akiro se alejó sin pronunciar una sola palabra.

La incógnita ahora era clara: ¿era Akiro más fuerte que Nii-san? La idea de que alguien pudiera superar a mi hermano en una pelea era inconcebible, pero la realidad estaba ante mis ojos. 

Mi mente maquinaba planes para convertir a Akiro en mi peón, aprovechando el aparente interés que Nii-san mostraba por él. Si lograba hacer de Akiro mi peón, la aprobación de Nii-san estaría asegurada, y mi posición en la escuela ascendería.

La pregunta que resonaba en mi mente era: ¿Cómo llevar a cabo este ambicioso plan? Akiro, siendo increíblemente popular, se convirtió en un desafío para mi estrategia. 

Aunque intentara advertir a los demás sobre su naturaleza aterradora, carecía de pruebas tangibles que respaldaran mis afirmaciones. La dificultad de la situación me hizo pensar que necesitaría más tiempo para idear un plan efectivo.

Mientras me retiraba de la entrada, decidí posponer la resolución del dilema para más tarde. Las ruedas de mi mente ya estaban en marcha, urdiendo un plan maestro para convertir a Akiro en mi peón y alcanzar la deseada Clase A.

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Notas del autor: Fin del SS espero que les haya gustado y por las dudas esto no cuenta como capítulo. Así que haré el capítulo y después un SS si me pinta, así que hasta la próxima.

No sé olviden de dar ⭐ en el SS chaito...😎

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