La teoría del vínculo [OBI-WAN KENOBI]

14.

CAPÍTULO 14.
NUEVO VÍNCULO
✨

✨

Era el primer día de entrenamiento de Irisdy como padawan de Obi-Wan y sabía perfectamente lo que eso significaba. Mentiría si dijera que estaba bien; y había aprendido a no mentirse en aquel tiempo fuera de Coruscant, a no tener miedo de admitir sus propios sentimientos. Sólo así sería capaz de tratarlos. Estaba llena de ansiedad y nervios, sí; puede que incluso algo de pánico. No podía evitarlo; la última vez que había formado aquel vínculo su maestro se había aprovechado de ella, utilizando el acceso a su mente para manipular sus pensamientos y sentimientos. La persona en la que más confiaba y que se suponía que debía ayudarla y protegerla en una edad y situación vulnerable la había traicionado y empujado en una espiral de terror y destrucción. Una parte de ella tenía muy claro que Obi-Wan no era así; pero la otra... ¿Acaso no había tenido aquella seguridad plena anteriormente también en su maestro?

Sentado de piernas cruzadas frente a ella y junto a Anakin, que aguardaba con impaciencia, Kenobi pareció entender el motivo de sus inquietudes y le dirigió algunas palabras de aliento, enviándole una corriente de calma a través de la Fuerza.

Irisdy no sabía si el Jedi estaba al tanto de lo que realmente había ocurrido con Reeves. Era consciente de que una teoría popular en el Templo era que su antiguo maestro había pertenecido en realidad al lado oscuro y que había tratado de arrastrar a su padawan con él; y tras resistirse, se habían enzarzado en una escandalosa pelea que había acabado descubriéndolo y provocando su expulsión en el Templo. Tenía sentido que Yoda y Tiin se la llevaran para tratar de reconducirla hacia la luz. Era un rumor sólido, y ciertamente la Fuerza oscura había estado involucrada; pero no era toda la verdad, e Irisdy se preguntaba hasta qué punto Obi-Wan y Anakin estaban al tanto de ésta. Skywalker no parecía mirarla con nada más alla que una casi irritante impaciencia; pero los ojos azules del maestro Jedi la esperaban con mucha más calma y entendimiento. Irisdy no sabía qué conclusión sacar de su expresión reservada. ¿Le había contado el Alto Consejo la verdadera naturaleza de lo ocurrido en el pasado con el objetivo de que entendiera mejor cómo trabajar con ella, o había extraído el Jedi a base de observaciones e intuición sus propias conclusiones?

Su nuevo maestro hizo un nuevo intento. Irisdy lo sintió estudiando cautelosamente las barreras de su mente, como alguien palpando a ciegas con cuidado intentando encontrar una salida o una puerta; después, la presencia de Obi-Wan se acumuló en un mismo punto de ella y empujó suavemente pero con firmeza. Irisdy trató de no resistirse y dejarlo pasar; pero a escasos segundos de establecer conexión con ella, el pánico le pudo y lo echó de su mente con una increíble potencia. Obi-Wan abrió los ojos intentando ocultarle su resignado cansancio y Anakin suspiró tratando de contener su irritación. Irisdy bajó la mirada avergonzada y jugueteó distraídamente con sus manos.

- Lo siento, maestro, yo...

Los ojos se le llenaron de lágrimas. Se sentía estúpida, ridícula y como una niña pequeña; haciéndoles perder el tiempo y decepcionándolos una vez tras otra. Quería hacerlo, de verdad que si, pero la idea le asustaba y... Obi-Wan la miró con preocupación e incluso Anakin, al darse cuenta de la lucha interna de la chica, abandonó su molestia y le colocó la mano en el hombro en señal de apoyo. Irisdy alzó la mirada y vió que sus ojos mostraban una empatía sincera.

- No tienes que temer nada. Obi-Wan te saca un poco de quicio a veces con sus largos monólogos y eso - comentó con una sonrisa traviesa asomándose por su rostro y haciendo que su maestro rodara los ojos - Pero es un buen maestro. Ahora somos un equipo y nos cubriremos las espaldas. Estás a salvo, confía en mi.

Irisdy sintió una oleada de tranquilidad en su interior y sus músculos se destensaron. Aquella calma era suya propia, no acentuada por Obi-Wan ni ninguna otra persona tratando de reconfortarla. Se sintió más preparada; pero su preocupación definitivamente terminó de extinguirse con la siguiente broma de Anakin que le hizo soltar un par de pequeñas risitas involuntarias.

- Además, no tienes que preocuparte de la oscuridad con él - prosiguió Skywalker, su tono sorprendentemente inocente y haciendo que el maestro Jedi lo observara perspicazmente, como si supiera que estaba a punto de decir algo que no le gustaba - Obi-Wan es la persona más pura que conozco. Estoy seguro de que ningún pensamiento pecaminoso o insulto hacia alguien ha pasado alguna vez por su cabeza. No sé por qué no le han construído ya una estatua aquí, en el Templo, de hecho.

- Anakin... - se quejó el susodicho, un leve rubor tiñendo irremediablemente su piel pálida, evidentemente incómodo, e Irisdy se unió a las pequeñas carcajadas del padawan.

La chica le asintió al Jedi, indicándole que estaba preparada. Cerró los ojos, relajándose como en un ejercicio de meditación, y cuando la presencia de Obi-Wan empujó contra las barreras de su mente, no se resistió. Fue como si un potente torrente de agua hubiera sido liberado de repente; la Fuerza de Obi-Wan se extendió rápidamente por toda su mente, rodeándola y cerrando el vínculo en una esfera perfecta.

Irisdy abrió los ojos; él ya estaba mirándola. La presencia de Anakin se difuminó un instante en un segundo plano mientras el azul se encontraba con el verde y la chica recibía sus primera impresiones del vínculo. Reeves había sido como una tormenta; chispeante y amarga. La presencia de Obiwan en la Fuerza, en su vínculo, sin embargo, era como el mar en completa calma. Su energía fluía en suaves movimientos de vaivén, era cálida y agradable; se sentía como un cuidadoso y reconfortante abrazo.

El Jedi debió haber sentido sus emociones y saber que se encontraba bien; pero aún así su voz tranquila interrumpió el silencio para asegurarse con palabras de ello.

- ¿Todo bien? - preguntó.

Irisdy sintió en la Fuerza su preocupación sincera y su inocente cariño. Dió un diminuto asentimiento distraído, todavía adaptándose al vínculo formado y una sensación de alivio y calma expandiéndose por todo su cuerpo.

"¿Cómo te sientes?" .

Fue inútil tratar de no sobresaltarse cuando escuchó la voz de Obi-Wan por primera vez en su mente; pero una vez superada la sorpresa inicial no se sintió alarmada, y volvió a relajarse de nuevo. Anakin los miraba en silencio.

"Bien, maestro. Tu presencia en la Fuerza..." , se detuvo, dudosa y tratando de encontrar las palabras, pero decidiendo ser honesta y escupir la verdad aunque le diera algo de corte y vergüenza. "Se siente como un sitio seguro."

El Jedi sonrió suavemente, sus ojos azules mostrando verdadera felicidad ante la respuesta de la chica. Las emociones de ambos se hicieron notar a través del vínculo, sus fuerzas vitales entrelazándose con respeto y calma; ambos se sonrieron.

Irisdy pensó que la presencia de Obi-Wan se sentía como la propia Fuerza; casi como la versión aumentada que había experimentado en Lothal. Poderosa y fluctuante; pero suave, controlada, y llena de paz.

✨