El León Que se Enamoró del Cordero [Con Cho Kyuhyun]

Capítulo 42

- A veces me preguntó porque mamá y papá compraron una casa tan grande si solo eramos nosotros cuatro -

- Tal vez ellos querían tener más hijos - respondió mi hermana Alice mientras cocinaba el desayuno; el aroma a huevo frito, jugo de naranja y a pan tostado se hacía presentes en toda la cocina, era exquisito como siempre - Nuestros padres eran jovenes -

- Es una buena explicación - comenté pensando en la misma respuesta - Hubiera sido bueno tener otra hermana o hermano pequeño -

- No sé... - dijo dudosa - Tener un hermano más pequeño nos traería más responsabilidades y ahorita apenas y podemos con nosotras - dijo sonriendo mientras se quitaba el mandil y lo ponía en una clavo que estaba al lado del refrigerador - Mejor comamos -

- Está bien - dije y Alice me dio un plato con huevos y pan tostado y al lado un jugo de naranja recién exprimido; mi hermana se sentó a un lado mío y comenzamos a comer; en todo el desayuno ninguna de nosotras hablabamos y nos limitabamos a escuchar las cucharas que golpeaban los finos platos de porcelana inglesa que mamá alguna vez compró antes de comprar esa enorme casa, antes de que Alice naciera.

- ¿Cómo te ha ido en la escuela? - me preguntó Alice tratando de quitar el horrible silencio que se había formado.

- Bien - contesté para después tomar un poco de jugo de naranja - Mis notas son las mejores del salón y mi asesora dice que tal vez reciba un reconocimiento -

- Me alegro por ti TN - dijo sonriente pero su sonrisa se desvaneció al instante - He conseguido otro empleo - al escuchar la palabra "empleo" deje mis cubiertos para verla fijamente - Ganare mucho dinero y tendré tiempo para cuidarte, se que no te gusta quedarte con tía Lucia - nuestra "amada" tía Lucia era hermana de nuestro padre y en cuanto ellos murieron ella dijo que se haría cargo de nosotras hasta que Alice cumpliera los 16 y comenzará a trabajar, en ese tiempo solo nos iria a ver.

- Ella nos odia - dije entre dientes pero Alice me escuchó y me fulmino con una mirada molesta - Desde que mamá y papá murieron solo viene porque le pagas, no porque en verdad le nazca hacerlo -

- Lo unico que nos queda es agradecerle por ayudarnos estos ultimos años - me dijo seria - Si no fuera porque viene a cuidarnos nos hubieran separado para ponernos en diferentes orfanatos - comentó comiendo un poco del pan tostado que tenía a un lado - Además esto tenía que pasar -

- No entiendo porque hablas como si supieras eso - dije seria y un poco molesta.

- Es el destino - contestó cortante.

- Eso no existe - la contradije de la misma forma - Si existiera no creo que nos hubiesemos quedado huerfanas -

- A veces el destino es cruel TN - comentó sin verme a la cara - Cuando menos te lo esperas él ya ha planeado todo para ti... no dudes de él ni de su poder en el mundo -

- ¿A que te refieres Alice? - pregunté un poco confundida por sus palabras - ¿Haz tenido pesadillas otra vez? - en los ultimos años Alice había tenido pesadillas, se despertaba en la madrugada gritando asustada, pero jamás quiso contarme de que se trataban esos malos sueños; poco a poco estas fueron desapareciendo.

- No - contestó - Pero en verdad no deberías dudar del destino -

- Si eso te hace feliz no lo haré - dije para que se quedara más tranquila - Y ¿Qué clase de empleo es? - pregunté sacando otro tema de conversación.

- Pues... es en una gran compañía... un amigo me recomendo y entre como secretaría - respondió un poco nerviosa - Lo mejor es que no me absorberá como el empleo en la cafetería - dijo sonriente - Podré pasar más tiempo contigo -