Capítulo 24

2K 119 9
                                    

Despierto y estoy en un cuarto de hospital, conectada a una máquina que indica mis signos vitales y con un oxígeno. Andrew esta dormido en uno de los sillones. Decido llamarlo.
-Andrew -Andrew despierta algo desorientado y después viene hacia mi.
-¿cómo te sientes? -puedo percibir su angustia.
-Bien, sólo algo cansada.
-Iré por el doctor -Andrew sale antes de que pueda decir algo.
Enseguida entra Pietro por la puerta y se acerca a mi.
-Pietro... -Lo miro y el se inclina sobre mi.
-¿Te sientes mejor? -Pietro me acaricia la mejilla.
-Lo suficiente para que me des un beso -Pietro me mira con una sonrisa pícara.
-Entonces ya estás más que bien -Pietro se acerca lentamente y me da un beso en los labios -Tenía miedo de... perderte.
-Jamás te dejaría -Levantó mi mano y toco cariñosamente su mejilla -Te... amo.
-Yo también te amo -Vuelve a darme otro beso y en ese momento entra Andrew con el doctor.
-Si que te sientes mejor - Me dice Andrew algo divertido.
El doctor se acerca a mi y comienza a examinarme, revisa que el aparato que indica mis signos vitales este bien y después lo anota en mi expediente.
-Todo esta en orden, ha mostrado una gran mejoría, probablemente mañana pueda darla de alta. Por ahora yo le recomiendo que descanse.
-Gracias doctor -Dice Andrew.
-Con permiso -El doctor sale dejándonos solos a Andrew, Pietro y a mi.
-Bueno... Yo... los dejaré solos un momento -Dice Pietro rompiendo el silencio.
-Gracias -Andrew le da una palmada en el hombro, Pietro le sonríe y sale.
-Nat...
-¿Porque no me dijiste la verdad? ¿Desde cuando lo sabías? -Lo interrumpo abruptamente.
-Desde que tengo memoria, papa me dejo con la agente, tu mamá, para protegerme, tu mamá tuvo una relación no tan larga con Tony, así que técnicamente si somos hermanos.
-¿Entonces...? -Estoy bastante confundida.
-De esa relación pasajera naciste tu. Pero tu mamá no era la mía, la mía desapareció el día que nací, desde entonces no han sabido nada de ella.
-¿Entones somos medios hermanos?
-Si... bueno... para mi tu eres mi hermana.
Le extiendo lo brazos para que me de un abrazo, el entiende y me abraza cariñosamente.
-Tu también lo eres... en realidad jamás noté una diferencia en tu trato, siempre me has tratado como una hermana de verdad...Te quiero muchísimo -Lo abrazo, recargo mi cabeza en su hombro.
-Yo también te quiero muchísimo hermana - Me susurra al oído.
Nos separamos.
-Papa quiere hablar contigo -Hace una pausa pero al ver que no contesto continúa -¿Estas dispuesta?
-Si... creo... -Hago un gesto de confusión falso, Andrew sonríe.
-Bueno, los dejo para que hablen -Andrew sale por la puerta y después entra Tony asoma la cabeza algo dudoso.
-Pasa -Le digo tranquilamente.
Tony pasa y tiene un peluche con forma de perro porque sabe que me encantan esos animales y los peluches. -Se que los perro son tu animal preferido y los peluches también son tus favoritos - Me extiende la mano con el peluche y yo lo tomó.
-Gracias -Le dedico una sonrisa algo cansada.
-¿Te sientes mejor?
-Si, sólo estoy cansada.
-Supongo que Andrew ya te habrá contado todo.
-Si, ya lo hizo -Suelto un suspiro pesado.
-Sabes que te quiero mucho hija, ¿Verdad?
-Si... Lo que no entiendo es porque el mandarín dijo que no lo eras y porque si tu sabías que si, No dijiste nada en ese momento.
-Estaba desesperado, No sabía como actuar, y el te iba a hacer daño, al final lo logró pero estas conmigo. Y creo que... Bueno para mi... eso es lo que más me importa -Tony esta inclinado y lo aprovechó para abrazarlo.
-Te quiero, papa -Le susurro al oído.
-Y yo a ti... mi pequeña - Me da un beso tierno en la mejilla y me sigue abrazando.

Mi historia con QuicksilverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora